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Poder

16 de Mayo de 2015

Las definiciones del Presidente del Senado tras cambio de ministros: “No es un tiempo para darse gustitos”

"Hoy el país necesita sensatez y buen juicio", dice el senador Patricio Walker, quien insistió -alineado con el tono del nuevo ministro del Interior, Jorge Burgos- que hay que apelar al diálogo. Hay que "estar abiertos y ser flexibles. No hay que enamorarse de los proyectos propios. A veces, las mejores ideas surgen de otros. Hay que ser flexibles, no arrogantes ni soberbios".

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patricio walker A1

Un llamado a la prudencia, a la sensatez, al diálogo, a no volver a caer en la soberbia, es el que hizo el presidente del Senado, el DC Patricio Walker, quien entregó a La Tercera, sus definiciones respecto de cómo debe funcionar el gabinete, luego de los cambios que introdujo la Presidenta Michelle Bachelet el pasado lunes.

“Espero que exista mayor coordinación política y legislativa. Falta un trabajo prelegislativo mayor y un diálogo permanente de los ministros con los parlamentarios. Segundo, la capacidad de forjar acuerdos… No es un tiempo para darse gustitos”, planteó Walker, quien evitó hacer comparaciones entre Jorge Burgos y su antecesor en Interior, Rodrigo Peñailillo.

De todos modos, el ex diputado sí se dio tiempo para destacar la llegada como jefe de gabinete del ex ministro de Defensa.

 

“Creo que va a tener una implicancia positiva. Burgos tiene una experiencia suficiente para asumir ese cargo. Es reconocido por su capacidad de diálogo y de forjar acuerdos. Es la persona adecuada para asumir el nuevo período que se inicia. Lo conozco mucho como parlamentario, y debo decir que es el parlamentario más sensato y brillante que me ha tocado conocer en el Congreso. Y hoy el país necesita sensatez y buen juicio”.

 

Walker, dice que es sensatez, ese buen juicio, ese llamado a la moderación tiene que ver con aprender de los errores. Al respecto pone como ejemplo la reforma tributaria.

“Las reformas hay que hacerlas en diálogo con los parlamentarios y con los actores sociales. Un ejemplo de lo que no hay que hacer fue la reforma tributaria, en que hubo soberbia e inflexibilidad. A los senadores no nos quedó otra salida que señalarle a las autoridades de Hacienda que el proyecto tenía que ser modificado sustantivamente. Gracias a que nos pusimos firmes, logramos un acuerdo que fue desde la UDI al PC. Y un muy buen ejemplo de lo que hay que hacer es la reforma laboral. Ojalá todos los ministros sigan el ejemplo de Javiera Blanco, para que todas las reformas sean sensatas. En estas reformas que vienen yo espero que haya gradualidad, sensatez y eficacia”.

 

 

Sobre cómo cumplir con la hoja de ruta trazada por el gobierno, dijo que “nosotros apoyamos el programa de la Presidenta Bachelet. Pero, obviamente, el programa es un instrumento, un instrumento para lograr que la gente mejore su calidad de vida, igualdad de oportunidades, inclusión en la justicia social, cohesión, social, crecimiento, empleo. En ese sentido, los programas son una especie de carta Gantt, pero si en el transcurso de la aplicación de los programas y en la tramitación legislativa nos damos cuenta que surgen mejores instrumentos para lograr esos objetivos, tenemos que estar abiertos y ser flexibles. No hay que enamorarse de los proyectos propios. A veces, las mejores ideas surgen de otros. Hay que ser flexibles, no arrogantes ni soberbios”.

Nueva Constitución

Tema obligado en las definiciones del oficialismo, toda vez que la Mandataria lo anunció hace unos días es la nueva carta fundamental. Sobre los mecanismo, como una Asamblea Constituyente, dijo que “yo no demonizo ningún mecanismo. Sin embargo, soy partidario de que exista un proceso de diálogo previo, que después las reformas constitucionales se aprueben en el Congreso, y que exista un plebiscito que le permita a la gente tener voz y voto para decidir los contenidos. Voz y voto”.

 

“Me gusta mucho una frase de Chesterton. Lo digo como cristiano. Cuando uno va a una iglesia, le piden que se saque el sombrero, pero no la cabeza. Uno nunca debe abdicar de hacer el ejercicio de pensar por sí mismo”, aseguró.

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