Columna: Fauna Magistral

El 18 de septiembre de 2014 uno dijo: Me gusta lo perecible de un libro para colorear. Seguramente un niño lo hará pedazos recortando, quizás otro lo rayará saliéndose de los bordes y manchando todo, o también puede pintarlo con excesiva témpera y pegar las páginas, un amigo seguro lo habría convertido en repollo. Lo fugaz del libro es relativo a la experiencia de estropearlo, dijo. Te quedas con la emoción de una actividad y quizás debas deshacerte del objeto que la propició porque está deshecho.

Otro dijo: Hay algo interesante en lo perdurable de un libro para colorear. Puede ser el testimonio gráfico de un momento, de un día alegre, de un día triste. Cuando lo veas a los 50 años, emociones van a sobrevolar tu memoria, te apuesto.

El último dijo: Bueno, ¡entonces hagamos un libro para colorear!

Los tres levantaron la cabeza y vieron a un zorzal que los miraba, entonces dijeron todos juntos: ¡Un libro de pájaros para colorear! El zorzal aguzó la mirada, les guiñó un ojo y emprendió veloz vuelo.

Este libro, primera publicación de Ediciones Libres, contiene treinta dibujos de aves que habitan el territorio nacional. Algunas giran la cabeza en 360 grados como el pequén. Otras vuelan de mala gana, como la chiricoca que prefiere correr entre las matas. El rayadito es exagerado, alimenta a sus polluelos más de 500 veces al día. La golondrina es citadina, el mirlo se viste de riguroso negro y el hued-hued canta tímidamente “hued… hued… hued”.

A pesar de que Pájaros chilenos para colorear contiene información, no intenta ser un libro enciclopédico. Sus páginas dan a conocer de forma sencilla características de cada ave y su ubicación en el mapa; hay pájaros costeros, cordilleranos, sureños, nortinos y centrales. Pero el libro busca, principalmente, fomentar la interactividad usuario-objeto haciendo que todos pinten, rayen o decoren a su pinta el peuco que han visto en el cerro o la tórtola de la plaza. Los amantes de la ilustración naturalista también pueden encontrar un deleite visual en estos dibujos, que no permiten confusión. Y si la intención es ser riguroso con los colores, el libro trae una lámina con todos los pájaros pintados que sirve como guía de color.

Esta experiencia editorial no ha dejado de asombrarnos. En dos semanas hemos recibido una cantidad abrumadora de correos y mensajes de apoyo por la iniciativa. Muchas personas de regiones preguntan por el libro, hemos recibido consultas y felicitaciones de biólogos, matemáticos, periodistas y artistas. Aunque sabemos que hay un grupo de Angry Birds preparando un boicot, estamos muy sorprendidos y para nosotros, amantes de las aves, ha sido un triunfo colectivo rendir tributo a una fauna magistral, superior a la especie humana. No por nada el poeta Juan Luis Martínez dijo: “Los pájaros cantan en pajarístico, pero los escuchamos en español. El español es una lengua opaca, con un gran número de palabras fantasmas; el pajarístico es una lengua transparente y sin palabras”.

Pájaros chilenos para colorear
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