El rector, Andrés Benítez, afirmó que los recursos que el Estado les dará a las universidades por cada alumno con el beneficio “habría sido la mitad de nuestro arancel real, lo que generaría un déficit de $1.200 millones a la universidad".
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La Universidad Adolfo Ibáñez decidió no sumarse a la gratuidad propuesta por el Gobierno de Michelle Bachelet y comunicaron que intentarán subsidiar a los alumnos más vulnerables con becas especiales.
Según señala El Mercurio, la decisión fue tomada el jueve pasado tras una reunión con Francisco Martínez, jefe de la División de Educación Superior del ministerio de Educación.
El rector, Andrés Benítez, afirmó que los recursos que el Estado les dará a las universidades por cada alumno con el beneficio “habría sido la mitad de nuestro arancel real, lo que generaría un déficit de $1.200 millones a la universidad”.
Sin embargo, hay que destacar que Benítez recalcó que la decisión no es totalmente definitiva. “La decisión es postergar el ingreso a la gratuidad. No es un no definitivo. Vamos a esperar a conocer las condiciones del proyecto final de la reforma a la educación superior. Es más responsable postergarla y conocer los antecedentes del proyecto, que entrar ahora y salirse después si la cosa anda mal”.
Así las cosas, la Adolfo Ibáñez se suma a la Universidad Mayor, como privadas fuera del Consejo de Rectores, que rechazaron la gratuidad. Este domingo 27 concluye el plazo para las casas de estudio notifiquen su participación en la gratuidad.