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Nacional

7 de Septiembre de 2016

Así fue el áspero diálogo entre la periodista Mirna Schindler y el obispo de San Bernardo por el tema del aborto

"No, no, no. Mirna, yo te pido que no confundas lo que dice la Iglesia con lo que dice, grita o escribe la gente en la calle o en los Whastapp, eso es otra cosa. La gente tiene su rabia, su enojo… está bien. No confundas la Iglesia, nosotros acogemos a esa gente, aquí mismo en San Bernardo yo tengo una fundación que se dedica a eso", dijo el obispo Juan González.

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obispogonzalezyt

En medio de la discusión del proyecto que busca despenalizar el aborto bajo las causales de violación, riesgo de la vida de la madre e inviabilidad fetal, el obispo de San Bernardo, Juan González, conversó con Mirna Schindler en ADN HOY, instancia en la que se dio un áspero intercambio de opiniones.

Esta es la conversación, transcrita textualmente por El Dínamo.

-Obispo González: esta discusión que hemos tenido con diputados y senadores de la DC, sobre todo, es porque se está desconociendo la posibilidad de que existan valores que son absolutos, que son muy pocos, uno de ellos es la vida humana, entonces la solución no puede ser la interrupción directa.

-Mirna Schindler: entonces no desconectemos a una persona que tiene muerte cerebral, porque también está la vida humana en juego.

-OG: ¿Y quién dice que se puede desconectar?

-MS: ¡Pero cómo que no! ¡Cualquier persona que tiene muerte cerebral en Chile los médicos están autorizados para desconectarlo!

-OG: Momento, Mirna. Es que algunas veces los veo a ustedes decir cosas sin pensarlas muy bien…

-MS: Pero cómo que no, si yo lo viví directamente, monseñor. Usted está hablando con una mujer que tuvo un embarazo de anencefalia que el Estado de Chile la obligó a llegar hasta el final de ese embarazo. Entonces ¿por qué? ¿por qué con casos sí y en otros no?

-OG: Tú estás comparando dos cosas que no son comparables…

–MS: Es que son comparables, porque usted está hablando de una guagua que va a morir sí o sí sacándola del útero.

-OG: ¿Pero me va a dejar o no me va a dejar hablar? No, no, no… no son cosas comparables, son cosas completamente distintas. En el caso de… la… hay una cosa completamente distinta. Eso, la Iglesia o la Moral Cristiana, no dice que puede ser desconectado tan fácilmente, eso lo estás diciendo tú, eso es lo que hacen los médicos.

-MS: Bueno, por eso es que la Iglesia está tan desconectada de la gente, pues monseñor, por eso es que la Iglesia…

-OG: ¡Nooooooo! Venga, venga, oiga, venga a San Bernardo…

-MS: Pero, por supuesto, pero ustedes a quiénes les están hablando… a los fieles que van a la Iglesia o le están hablando a los chilenos para qué, para que exista una evangelización genuina.

-OG: No, no, no. Perdóneme una cosa, pero usted habla desde una posición que ya está tomada.

-MS: ¡Pero por supuesto que tengo una posición! ¡A mí me extraña que la Iglesia no se pronuncie frente a temas tan difíciles para cualquier mujer y mantenga siempre su moral general sin atender al sufrimiento que tienen las mujeres que viven embarazos inviables! Ante eso ustedes mantienen su moral general… ésa es la Iglesia, por eso que la gente no va a misa.

-OG: Eso es lo que usted ve, lo que usted transmite desgraciadamente.

-MS: Es culpa de la prensa, entonces

-OG: No, no… en parte sí, evidentemente. Venga a San Bernardo. Hay 15 sacerdotes, 45 parroquias, miles de personas que van a misa. Usted ve una pequeña visión, la suya.

-MS: No, lo que pasa es….

-OG: Yo tengo 570 mil personas católicas y muchas, la mayoría, se acerca a la Iglesia. Yo voy a las poblaciones… usted está tratando de imponer una posición.

-MS: Es que ustedes también imponen una posición.

-OG: No, no, no… nosotros proponemos.

-MS: Ustedes declaran a todas las mujeres que abortan asesinas. Uno lo escucha a diario, es cosa de ir a las marchas pro vida, como se sataniza a una mujer que aborta, como si todas las mujeres que abortaran fueran…

-OG: Esa es la libertad de la gente que hace lo que quiere. La Iglesia, los pastores, nunca hemos hablado así. No, Mirna, estás completamente equivocada… estás en una posición ideológica.

-MS: No, yo estoy tratando de explicarle lo que sentimos las mujeres que hemos vivido situaciones traumáticas.

-OG: No, no, no… lo que siente usted.

-MS: ¡Pero por supuesto, porque soy mujer y usted es hombre y usted nunca va a entender lo que siente una mujer! ¡Nunca! Y ningún hombre va a saber ponerse en el lugar de una mujer porque el hombre no vive el embarazo.

-OG: Entonces cortemos la entrevista, hasta luego.

-MS: No… lo que yo estoy tratando

-OG: No, no. Hasta luego.

-MS: Estoy tratando de ponerle en perspectiva lo que estamos discutiendo.

-OG: No, no, no. Lo que pasa es que usted está mostrando su posición.

-MS: Pero por supuesto, monseñor, si soy mujer y tengo una posición.

-OG: Pero Mirna, deje hablar, ¡deje hablar!

-MS: Ok, lo voy a dejar hablar. No hablo más.

-OG: Así no se puede hablar. Hay muchas posiciones distintas y hay muchas mujeres que no piensas lo que usted. Muchas, muchas más de lo que la gente cree.

-MS: Lo que pasa es que usted habla de la moral, como si la moral fuera sólo la de la Iglesia Católica. Usted dice “la moral natural”, como si la moral fuera sólo la que dice la Iglesia Católica.

-OG: La moral dice que no se puede nunca hacer el mal para traer un bien. Eso lo dijeron los griegos, Mirna, no la Iglesia Católica. No puedo yo para el bien suyo quitarle la vida a otro ser. No puedo hacerlo, cómo no entienden eso, es elemental.

-MS: Yo lo entiendo a usted, es su posición.

-OG: No es mi posición, es una cosa esencial del ser humano. Nunca se puede hacer un mal, vamos a quitarle la vida a este ser porque tiene anencefalia para que la mujer no sufra. ¡No! Hay que dejar que la naturaleza…

-MS: No, no se trata de eso. Eso es un reduccionismo… y si está en riesgo la vida de la madre… entonces que se muera la madre.

-OG: No, no, no. Momento. Si está en riesgo la vida de la madre hay que hacer todo lo necesario para salvar la vida de la madre y si por consecuencia se muere el niño, eso no es un aborto evidentemente. Eso se ha hecho siempre en la praxis médica. Y por qué no entienden eso. Lo que no se puede hacer es si alguien dice “está en riesgo la vida de la Mirna, hay que quitarle al niño para que se salve la madre”, eso no se puede hacer. Si no entiende eso, tiene que estudiar más.

-MS: Sabe lo que pasa, lamentablemente aquí hay descalificaciones por todos lados y eso no contribuye al debate. Usted habla de entender… uno entiende cuando vive las cosas también, fíjese que hay un valor de la experiencia.

-OG: No, no, no. Mirna, yo te pido que no confundas lo que dice la Iglesia con lo que dice, grita o escribe la gente en la calle o en los Whastapp, eso es otra cosa. La gente tiene su rabia, su enojo… está bien. No confundas la Iglesia, nosotros acogemos a esa gente, aquí mismo en San Bernardo yo tengo una fundación que se dedica a eso. Entonces cuando nos presentan así, es profundamente falso y profundamente dañino para el bien del país y por eso en parte los periodistas tienen la culpa de presentar las cosas de esta manera. Nosotros estamos trabajando en otras cosas, nosotros decimos “estos son los principios, si usted quiere cumplirlos, cumplamos, si no, no”. No le impongo nada a nadie aquí, cómo se le ocurre. Yo le digo, no se puede intervenir directamente contra la vida de un ser humano vivo o en gestación para lograr otro bien. No se puede hacer un mal para lograr un bien. Ese es el argumento central. Lo que dijo ayer la Carolina (Goic) es precisamente que lo tiene y el derecho de la mujer está por encima en ciertos casos de la vida humana… nosotros pensamos que no es así, no por ser católicos, religiosos o nada… pensamos que es así porque la vida humana es así y hay otras maneras de resolver esto. Tú viviste cosas muy delicadas, pero no la extrapoles a la realidad. Hay muchas mujeres que han vivido embarazos como el tuyo y han tenido su guagüita, hay mucha gente que dice “prefiero tener en mis brazos el niño anencefálico 5 minutos que cargar sobre mi conciencia decir ‘hasta aquí nomás llegué”.

-MS: Ese fue mi caso, en todo caso, para que no se mal entienda. Porque en este país ningún médico puede generar un aborto cuando una guagua es incompatible con la vida. Quiero dejarlo claro.

-OG: ¡Es que no se puede! ¡Nos han vendido el cuento del aborto terapéutico del año 89 y eso es mentira! Se lo expliqué a Ignacio Walker en el Parlamento. Nunca hubo aborto en Chile, no hay registro de aborto del artículo 119. Era precisamente porque estaba regulado eso que te digo… al defender la sanación de la madre se producía un aborto y alguien podría pensar que eso es un aborto, eso no es un aborto. Pido un poquito de calma en esto. Estamos procediendo en tres casos excepcionales, todos sabemos que estos tres casos después se prestan a más casos, más casos. Todos sabemos que la ley es ejemplar, lo que dice la ley es lo que la gente cree que está bien, porque la ley está para regular cómo hacer el bien y no hacer el mal. Cuando la ley dice que se puede abortar en tres casos, dice que está bien abortar en tres casos y eso nunca va estar bien.

– MS: Muy bien.

– OG: Así que ánimo.

 

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