Nacional
23 de Septiembre de 2017Robo del siglo II: Guardias critican las precarias medidas de seguridad para custodiar los 16 mil millones
Moya y Bravo sostuvieron que la noche del asalto el sistema de alarmas conectadas con Carabineros no sonó. "Si la alarma hubiera funcionado, los pillan en la calle".
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Los dos guardias a cargo de la seguridad de la empresa de valores Esertval, que la noche del martes fue asaltada en el denominado robo del siglo II, Eduardo Moya (23) y Jesús Bravo (34), criticaron las medidas tomadas por la compañía para custodiar los 16 mil millones que fueron robados por la banda de desconocidos.
Ambos reconocen que las sospechas del Ministerio Público apuntan a una presunta complicidad con los delincuentes, pero aseguraron a El Mercurio que están tranquilos, porque no tuvieron nada que ver con el asalto.
En torno a las medidas de seguridad, Eduardo Moya reveló que “cuando ocurrió el asalto, llegó mi primer jefe, que es gerente contralor, y en vez de preguntarnos cómo estábamos, nos dijo ‘por qué no apretaron la cagá de alarma’. La alarma no funcionó. Si hubiera funcionado, los pillan en la calle. Se supone que tenemos dos minutos de reacción de Carabineros al apretar el Alpha II -el sistema de alarma que conecta con la policía- y (no pasó) nada”.
Moya y Bravo sostuvieron que por las noches solo quedan dos guardias a cargo de la seguridad y que incluso a veces solo una persona.
Sobre la noche del asalto, Moya cuenta que cuando sonó el timbre vio a Bravo, que es cuñado y había salido por cigarrillos, solo en las cámaras, pero al abrirle la puerta, se abalanzaron un grupo de seis a siete encapuchados. “Nos arrastraron, nos pegaron, nos pasaron a una sala, nos dieron una pateadura. Nos querían matar”. Además, trataron de sacarles información para acceder a la bóveda, pero ellos desconocían cómo ingresar y de cuánto dinero se trataba.
Ambos señalan sentirse abandonados por la firma. “No, yo no me siento apoyado (…) La empresa anda metida en el seguro, en nada más”, dijo Moya.