La ciencia explica así cómo son las formas más terribles de morir

Una publicación de Cultura Colectiva cuenta cuáles, según la ciencia, son las formas más horribles de morir. Peor que ahogarse o quemarse, inclusive.

Un rayo dentro de una casa

Se narra el caso de una persona que murió en su casa después de la descarga de un rayo. Según el texto, el hombre estaba trabajando en su hogar en unos estructuras metálicas. Entonces, “el rayo saltó por su pie, viajó a través de su cuerpo hasta llegar a su corazón y finalmente salió a través de su pulgar derecho”. Su cadáver estaba extremadamente tieso. Por esto se cree que el rayo lo paralizó y el dolor fue espantoso.

Derretirse en las aguas termales de un volcán

Para hacerse una idea de lo terrible que es esto, se cuenta de un caso de una persona que resbaló en una cámara de magma en el parque  Yellowstone, en Estados Unidos. La piel se le desprendió del cuerpo, así como los músculos. En simple, se disolvió en el agua. Si bien quedó rápidamente en shock, el dolor inicial -sostienen- es indescriptible. De este hombre sólo quedaron sus sandalias.

La boomslang

Aunque ataca sólo para defenderse, se trata de una serpiente ultra venenosa. Su mordida se describe así: fuertes mareos, después una especie de fiebre que da paso a un sangramiento por la boca, a vomitar y a orinar sangre. Luego, ojos, oídos, nariz y el resto de los orificios empiezan a derramar sangre hasta quedar inconsciente. El corazón y elcerebro se desangran hasta el final.

Flujo piroclástico

Es cuando se muere por la explosión de un volcán. Los elementos que emergen de los macizos tienen temperaturas que sobrepasan los 1000° C. La piel se cocina al instante.

Dentro de una campana de buceo

Si acaso por accidente se llega a abrir, como aconteció en una expedición en el Mar del Norte, se produce una explosión bajo el agua que acaba de manera instantánea con la vida humana. Los cuerpos se hacen pedazos.