¿Y qué pensará José Maza? Así fue el encuentro mundial de Terraplanistas en Buenos Aires

Ponentes de España, Estados Unidos y Chile se reunieron este sábado en un encuentro de “terraplanistas” en el que discutirán entre otros temas la vacunación “forzada”, en la localidad argentina de Colón, en la provincia de Buenos Aires.

El foro, anunciado como “Encuentro Nacional e Internacional de Terraplanistas”, se celebrará a lo largo del fin de semana, y generó polémica por el apoyo que había recibido por parte de las autoridades del pueblo, que ofrecieron el espacio para organizarlo e incluso lo publicitaron en sus redes sociales.

Entre los actos que incluye la agenda hay charlas sobre geoingeniería y ‘chemtrails’ (una teoría conspirativa sobre cambios forzados en el clima a través de químicos), inoculación forzada y vacunas, nueva medicina y la Tierra plana, y un taller de intercambio de semillas.

El evento, en el que también habrá un concurso de arte y bandas de música en directo, culminará con una entrega de diplomas por parte de Guillermo Wood, un arquitecto chileno al que los organizadores consideran un “referente”.

Desde la Sociedad Argentina de Astronomía recordaron que “hay pruebas irrefutables” de que la Tierra no es plana, “desde los antiguos griegos hasta hoy”.

En una entrevista en el canal TN, el científico e integrante de la Sociedad Daniel Carpintero señaló, por ejemplo, que en el hemisferio norte y el sur se aprecian distintas constelaciones de estrellas.

Declaró que la Sociedad Argentina de Astronomía y el mundo científico “no pretenden acallar a quienes opinen distinto, cada uno es libre de pensar en lo que quiera”, pero denunció “que oficialmente se pongan recursos públicos para auspiciar este tipo de eventos”.

Además, destacó que los terraplanistas “no juegan con vidas ni con bienes de nadie”, pero sí lo hacen otros grupos como los antivacunas, y todos ellos están “basados en la misma idea de que hay una gran conspiración a nivel mundial”.

En una publicación, los organizadores del encuentro criticaron la “cacería de brujas” desde que saltó a la actualidad la convención que se iba a realizar, y la cobertura hecha sobre ellos por parte de los medios “oficializados”, en un país “donde los medios están bastante controlados por los mismos grupos empresariales”.