Opinión
26 de Diciembre de 2019Abofem: Violencia político-asexual en el contexto de las manifestaciones sociales en Chile
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El año 2019 será recordado por una serie de hitos que han sido de suma relevancia para el feminismo, aunque fuertemente marcado por la violencia estatal ejercida en el contexto de las manifestaciones que comenzaron a partir del 18 de octubre. Dentro de esa violencia, las mujeres, las y los menores de edad y las personas de la comunidad LGTBIQ+ han sido víctimas de violencia político-sexual ejercida por agentes estatales. También lo han sido los hombres, quienes han sido feminizados a través de la violencia sexual, subordinándolos a través de ella, tal como se ha hecho con nosotras siempre.
La llamada “Huelga Feminista” se tomó el 8 de marzo, día internacional de la mujer, caracterizada por una serie de actividades que tuvieron por objeto enfatizar los escasos avances de nuestra sociedad para conseguir la equidad de género, denunciando la persistente discriminación y violencia profundamente arraigada y que lamentablemente, nos sigue afectando en mayor medida. En todas las regiones, y de manera extraordinaria en Santiago, la jornada finalizó con una marcha pacífica que renovó el movimiento social, logrando destacar que las demandas del feminismo no solo son urgentes, sino también transversales, dado que en ellas se incorporan la perspectiva de clase, raza y las demandas de los sectores discriminados.
Durante este año, Abofem, cuyo objeto es promover el enfoque de género en el derecho, logró incidir en distintas instancias. En el debate legislativo, participamos de la discusión de proyectos de ley sobre materias que afectan a las mujeres referidos a los distintos tipos de familia, el matrimonio igualitario, la violencia en el pololeo, la adopción homoparental, la lesbomaternidad, etc. En el plano judicial, ejercimos distintas acciones judiciales en defensa de aquellas personas más vulnerables, siendo relevante destacar las denuncias con relación al caso Nido.org y la orientación judicial y extrajudicial gratuita que se hace en las actividades conocidas como “Abofem en tu Barrio”. En el plano académico, logramos impulsar la necesidad de enseñar el derecho con enfoque feminista, ayudando así a preparar a las futuras generaciones de abogadas.
Los casos de femicidios, lesbicidios y delitos sexuales que produjeron gran conmoción, dejaron entrever que la violencia hacia las mujeres y cuerpos feminizados no solo se produce por parte de los victimarios, sino también por parte del Estado, a través de las instituciones que intervienen en distintos procesos judiciales, diseño e implementación de políticas públicas. A diario se conocieron casos que revelaron una serie de prejuicios, enjuiciamiento y falta de garantías para las víctimas.
En los últimos meses, nuestro país vivió un clima de agitación como consecuencia inevitable de la sensación generalizada de abuso por parte de quienes detentan el poder y concentran los medios de producción. Como Asociación de Abogadas Feministas, nos mantuvimos vigilantes de la situación poniéndonos al servicio de quienes más nos necesitan, con la convicción de que nuestra labor y conocimiento debe estar a disposición de quienes sufren las consecuencias más graves y se encuentran en una situación de vulnerabilidad.
Abofem concurrió masivamente a las comisarías a lo largo del país, detectando graves violaciones a los derechos humanos, como los hechos de tortura sexual contra mujeres, Comunidad LGBTIQ y menores de edad por parte de agentes estatales. Lamentablemente, no se trató de hechos aislados, sino que de una política generalizada por parte del Estado, consistente en reprimir las manifestaciones sociales, ejerciendo ese tipo de violencia. Ante esta situación, nuestras socias organizaron un equipo judicial que, de forma gratuita y conforme a estándares de derechos humanos para la atención de víctimas, presentó acciones judiciales en su favor. Para complementar el proceso de acompañamiento, formamos distintas alianzas con redes de psicólogas y asistentes sociales.
Hace algunas semanas, se dio inicio a un nuevo proceso constituyente en aras de construir un nuevo pacto social de manera democrática. Como feministas, hemos relevado la necesidad de incluir la paridad dentro del proceso como condición mínima, así como la inclusión de grupos discriminados que requieren ser representados en ese espacio. Se trata de un imperativo de justicia para que, por primera vez en Chile, contemos con una norma fundamental que nos incluya a todos y todas. Una nueva Constitución no resolverá todos los problemas que causan exclusión y violencia contra las mujeres y disidencias, pero es un piso mínimo para construir una sociedad en la que la dignidad de las mujeres se haga costumbre.
*La Asociación de Abogadas Feministas, Abofem surgió a fines de mayo de 2018 bajo la idea de insertar un discurso feminista en las leyes chilenas.