“Esta profesión no admite giles ni ingenuos”: el duro mea culpa de Guarello asumiendo la responsabilidad por publicar audios contra Castrilli

Juan Cristóbal Guarello salió a realizar un mea culpa luego de que la ANFP descartara la supuestas presiones arbitrales denunciadas que terminaron con la desvinculación de Javier Castrilli de su cargo como jefe de la Comisión de Árbitros.

Cabe recordar que el periodista deportivo afirmó poseer unos audios que comprometían al argentino, los que finalmente fueron revelados y en los que el juez Francisco Gilabert acusaba presiones para cobrar un penal en favor de Huachipato en el partido por la promoción ante Deportes Copiapó, lo que finalmente fue desmentido.

La columna de Guarello

Tras el informe de la ANFP, Guarello publicó una columna en La Tercera, en donde señaló que “ahora lo que me corresponde como mi responsabilidad periodística, pues fui quien entregó los audios a ADN y recibí la autorización de emitirlos. Eso sería anecdótico, pero lo grave es que esto era parte de una maniobra para sacar a Castrilli de la comisión de árbitros. Y ese es el fondo del asunto”.

“No me quitaré responsabilidad, yo recibí y pasé los audios, declaré en la investigación entregando todos los antecedentes que poseía, creí que, efectivamente, había habido una presión indebida desde Santiago al VAR del duelo entre Huachipato y Copiapó”, añadió.

En esta línea apuntó a que “en el periodismo, la credibilidad crece a la velocidad de una palmera y se cae a la velocidad de un coco. Los audios eran reales, nunca fueron manipulados, Vargas dijo ‘para Santiago es penal’ que llevó a la confusión de Droguett y Gilabert. Hubiera sido una polémica menor si no fuera porque estaba inserta en una guerra civil en el arbitraje chileno”.

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“Había una noticia para contar, pero también, se exige una distancia crítica sobre esa misma noticia. De mi parte, no existió esa distancia, esa prudencia. Esta profesión no admite giles ni ingenuos. Y esta vez lo fui. Patricio Caldichoury, quien fue mi editor en Chilevisión, me dijo una vez que en el periodismo uno era tan bueno como su último trabajo. Mi último trabajo no cumplió los estándares que yo mismo alguna vez pretendí”, sentenció en la columna.

Aclaración en Los Tenores de ADN

Juan Cristóbal Guarello además salió a explicar la situación detrás de su denuncia durante el programa Los Tenores de Radio ADN, afirmando que “yo he hablado con la gente que está involucrada en esto, con respecto a cosas que son importantes resaltar: los audios de Gilabert son reales y fueron emitidos al día siguiente del Huachipato-Copiapó”.

“Dos, que si existió el diálogo entre Vargas y Cristián Droguett que estaba en el VAR, diciéndole que para Santiago es penal y que se acordara del penal de Universidad Católica. El tema es que la intención de Vargas era recordar lo que se había hablado en el curso que se había hecho en el verano respecto a los penales. Droguett interpretó que habían llamado desde Santiago e hizo caer a Gilabert”, añadió el periodista.

Fue en este punto que Guarello reconoció que “en el tema esencial, que son los audios que yo tenía en mi poder hace mucho tiempo, fueron liberados con la intención de desestabilizar a Castrilli, que venía hace mucho tiempo con problemas con los árbitros, con argumentos malos, discutibles y malos”.

“La ANFP tiene que determinar si tiene que ser integrado. La intencionalidad siempre fue desestabilizar a Castrilli por la guerra con los árbitros. El tema de fondo era si había una intención desde Santiago de intervenir el VAR, aunque la conclusión de la investigación es que no hubo una petición desde allá”, complementó.

Por otro lado, Juan Cristóbal Guarello realizó un autocrítica, asegurando que “mi mea culpa es no haber liberado los audios, ya que eran de interés y reales. El tema de fondo es que uno se prestó para algo (…) Sé que Castrilli quiere hacer unas querellas, no sé si contra mi, contra la radio, aunque sí lo hará con los árbitros”.

“Yo creo que era válido haberlos revelado, aunque el tema de fondo es que el oficial de cumplimiento de la ANFP llegó a la conclusión que no hubo llamado desde Santiago y que un grupo de árbitros ocupó este audio para desestabilizar a Javier Castrilli”, sentenció Juan Cristóbal Guarello.

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