Experta y el insólito aumento de consultas médicas por problemas a la adicción a los videojuegos: habló de Fortnite entre los ejemplos

En una realidad se está transformando uno de los clichés y paranoias más grandes que dominó el siglo XX sobre los videojuegos: la capacidad de que se transformara en una adicción para muchos jóvenes de todo el mundo.

Al menos así está ocurriendo según han podido retratar varios expertos en Iberoamérica tras la consolidación de una tendencia. De este modo, la Organización Mundial de Salud (OMS) incorporó este fenómeno dentro de su lista de enfermedades mentales, provocando una alerta a raíz de las implicancias de la medida.

Producto de ello es que el medio español La Vanguardia consultó sobre esta tendencia en Europa. Así, la coordinadora de la Unidad de Juego Patológico y Adicciones Comportamentales en el Hospital de Bellvitge, Susana Jiménez, analizó el fenómeno intentando alejarse de los prejuicios.

De este modo, entregó una serie de advertencias sobre los riegos que conlleva esta práctica. “En nuestros registros teníamos anualmente sobre un 3 o 4% de consultas por adicción a videojuegos en nuestra unidad. Y ahora esta cifra se sitúa por encima del 15% de todas las consultas por adicciones comportamentales”, aseguró.

¿Quiénes sufren la adicción a los videojuegos?

Según apuntó la experta en la adicción a los videojuegos, existe un perfil de personas que se acercan más a este tipo de enfermedades. Así, habló de que se trata de pacientes a partir de los 14 años y, en su gran mayoría, hombres.

En esa línea, describió que de los pacientes casi el 90% son varones, muchos de quienes están entre los 18 y 20 años. Es decir, años clave en el inicio al ingreso de la educación superior en muchas zonas del planeta.

Asimismo, describió algunos de los factores que fueron posible de observar en algunos de ellos. “Hay elevados niveles de impulsividad, de búsqueda de sensaciones. Hay baja autoestima, introversión y dificultad en las relaciones personales”, complementó.

“El impacto es en todas las áreas de la vida, vemos chicos totalmente aislados en sus habitaciones, que dejan de compartir tiempo con la familia, dejan de lado el ocio y dedican todo el día a jugar a videojuegos, en una etapa en la que las relaciones interpersonales son tan importantes. Vemos jóvenes con muchos conflictos familiares y tienen mayoritariamente muy poca consciencia del problema”, agregó.

¿Qué juegos pueden presentar mayor grado de adicción?

A raíz de estas preguntas es que la experta sobre la adicción a los videojuegos, Susana Jiménez, apuntó a cuáles son algunos de los ejemplos que más estrés pueden provocar.

“Los videojuegos con mayor potencial adictivo son los multijugador, online, de rol, tipo Fortnite. Se juegan en grupo y requieren mucha inversión de tiempo. Las llamadas ‘loot boxes‘ (cajas de botín), además, son ítems virtuales que producen recompensas aleatorias cuando son ‘compradas’, ya sea con horas de juego o pagando un importe real en dinero”, aseguró.

En este sentido, complementó que “hay similitudes entre la adicción a los juegos de azar y este tipo videojuegos. Alientan el hecho de gastar dinero en ítems que no son comprados en realidad, sino producto de un algoritmo informático“.

Así, los comparó con los juegos de azar producto de que “el refuerzo positivo del premio tiene un patrón intermitente y variable (con un resultado desconocido). Y cada vez se gasta más dinero en un intento de compensar lo invertido. Pueden representar incluso la transición a los juegos de azar. Algunos países han prohibido o estudian la regulación de las cajas de botín”.