La noche más eufórica del Partido Republicano: los gritos por los primeros cómputos, los cánticos de “Kast presidente” y los pronósticos desbordados

El ambiente era de festejo. A solo veinte minutos del inicio del conteo de votos de la elección para el Consejo Constitucional, al interior de la sede del Partido Republicano -ubicada en Presidente Errázuriz, en Las Condes- ya se percibía la euforia de un triunfo, con aplausos y el tradicional cántico “C-H-I”. 

La celebración no era para menos. La colectividad fundada por José Antonio Kast obtuvo –con un 99,44% de mesas escrutadas– 3.451.066 votos, 22 candidatos electos de 72 postulantes, al menos un representante por cada región -a excepción de Aysén- y con Luis Silva, aspirante por la Región Metropolitana, como primera mayoría nacional. Un resultado, incluso, mejor que el esperado al interior de la tienda política, donde proyectaban al menos a 5 elegidos.

El escenario es favorable para los republicanos, quienes han defendido firmemente la postura de no redactar una nueva Constitución. Se convirtieron en el partido con más representatividad al interior del futuro órgano redactor, el único en obtener más de un millón de votos y aseguraron un factor clave: el poder de veto al interior del órgano redactor.

Una de las estrategias del Partido Republicano durante la campaña fue capitalizar las principales preocupaciones de la ciudadanía, sobre todo frente a la crisis de seguridad que afecta al país y que ha sido foco de cuestionamientos para el actual gobierno.

La celebración oficial comenzó pasadas las 20.30 con una entonación del himno nacional, banderas de Chile flameando y con unas breves palabras del presidente del Partido Republicano, Arturo Squella y la secretaria general, Ruth Hurtado.

Seguidamente, vino la entrada de José Antonio Kast, quien vistió un terno azul oscuro con una corbata roja y tuvo un importante despliegue a nivel nacional durante la campaña de consejeros constitucionales.

“Podemos decir que estamos contentos, porque logramos una meta importante”, dijo en su discurso el otrora candidato presidencial, pero advirtió: “Hoy no es tiempo de celebrar ni de dividir al país, es tiempo de trabajar en unidad por el bien de Chile“.

Ovacionado por el público y entre cánticos de ”se siente, se siente, Kast presidente”, el líder republicano también tuvo duras palabras para la administración del Presidente Gabriel Boric.

“Hoy también Chile, no nosotros, Chile ha derrotado a un gobierno fracasado, y eso hay que decirlo fuerte y claro. Al gobierno que ha sido incapaz de enfrentar la crisis de la inseguridad, la crisis migratoria y la crisis económica”, expresó.

Una vez finalizado su intervención, invitó a los futuros consejeros constitucionales, y también a los no electos, a subirse a la tarima, y cerró su aparición con un abrazo junto a su esposa, María Pía Adriasola.

¿Un resultado esperado?

El resultado para esta elección de consejeros constitucionales había sido previsto por los expertos, que planteaban que el Partido Republicano podría convertirse en la primera colectividad de la escena política chilena, por su presencia en el futuro órgano que redactará una nueva Constitución.

Ese escenario, no obstante, había sido desdramatizado durante la mañana por el excandidato a La Moneda. Tras emitir su voto en el Colegio María Ana Mogas de Paine y en una sobria puesta en escena, expresó: 

“Nosotros, más que por el resultado, trabajamos por ideas, por principios. Creo que lo hemos ido asentando con el tiempo. Las personas se han ido dando cuenta de cómo actuamos en política, por lo tanto, para nosotros es importante que ya se cumpla este proceso, que la gente vote es importante, y no nos fijamos tanto en lo que dicen de nosotros respecto de qué votación vamos a sacar, qué lugar vamos a ocupar”.

Y sin proyectar un escenario, con un mensaje atenuado, advirtió que todo análisis vendría el día después de la elección.

En la sede del partido, por la tarde, el ánimo era diferente. A eso de las 18.30, cuando comenzaron los conteos preliminares, el senador republicano, Rojo Edwards, concedió un punto de prensa en el que planteó un piso mínimo de cinco representantes electos. 

“Espero que los republicanos cumplamos nuestra meta de, al menos, conseguir cinco consejeros”, declaró el parlamentario.

Una proyección que respaldó, minutos después, Luis Silva: “Definitivamente los conteos que van a esta hora dan muy buenos resultados en la Región Metropolitana, también en el resto del país. Todo hace pensar que vamos a quedar dentro del Consejo”.

Para ese entonces, pese a que el conteo de votos era preliminar, el Partido Republicano ya se consolidaba como el favorito.

Luis Silva: “La Constitución que resulte se va a parecer bastante a la que tenemos”

Desde que comenzó el diálogo para habilitar un nuevo proceso constituyente entre las diferentes tiendas políticas, el Partido Republicano había manifestado públicamente su postura de no redactar una nueva Constitución. 

En octubre del año pasado, incluso, habían anunciado su retiro de las negociaciones –previo a que se materializara el Acuerdo por Chile, que no incluyó la firma del Partido Republicano-, insistiendo en que la discusión debería radicarse en el Congreso Nacional.

A meses de ese episodio, y tras capitalizar un triunfo en la elección para el Consejo Constitucional, Luis Silva remarcó que el nuevo camino constituyente es un proceso que “nunca han deseado” y adelantó la actitud de discusión con la que llegará la tienda política al órgano redactor.

“Nosotros no creemos en las refundaciones y tampoco creemos que una nueva Constitución sea la respuesta que Chile necesita para hacer frente a las necesidades que, evidentemente, se sienten como salud, educación, medio ambiente, seguridad social, etcétera, así que vamos a este proceso con la actitud de a quien veo oportunidades para introducir mejoras en la Constitución”, expresó el abogado.

Y agregó: “No vamos a boicotear el proceso, sino que queremos contribuir a que resulte de este proceso lo mejor para el país”.

Además, puntualizó que las doce bases institucionales acordadas “son una copia bastante fiel al texto de la Constitución vigente” y que, por lo mismo, “la (nueva) Constitución que resulte se va a parecer bastante a la que tenemos hoy”.

Y es que además de posicionarse como el partido más fuerte al interior del Consejo Constitucional, el triunfo de los republicanos se suma también al resultado que obtuvo Chile Vamos.

La coalición que agrupa a la UDI, Renovación Nacional (RN) y Evópoli logró once representantes electos, lo que se traduce en un control de la derecha al interior del Consejo Constitucional. Serán 33 los redactores de oposición, un número que supera el quórum de 3/5 necesario para la aprobación de las normas que quedarán plasmadas en la propuesta de nueva Carta Fundamental.

Para el oficialismo el escenario es diferente. Unidad para Chile, pacto que incluye a Apruebo Dignidad y el Partido Socialista, logró obtener a los 17 representantes restantes del Consejo Constitucional, que comenzará sus funciones el 7 de junio y deberá redactar una la propuesta de nueva Carta Magna, que será plebiscitada en diciembre.