Productos skincare bajo la lupa del Sernac: El 89% no informa sus componentes

El Servicio Nacional del Consumidor (Sernac) puso en la mira a los productos Skincare, es decir, cosméticos de cuidado facial, en un nuevo informe que detectó varios incumplimientos respecto a la entrega de información que se debe entregar a los usuarios de estos.

Este estudio se llevó a cabo con 361 productos comercializados en diez plataformas de ventas. Algunos de los centros de venta en los que se consiguieron fueron Falabella, Paris, Ripley, Salcobrand, Cruz Verde, Ahumada, Líder y Jumbo, además de las tiendas especializadas Hede Salud y Central Klinic.

La investigación arrojó que en el tema de los productos skincare se advierte “una brecha enorme entre lo que se informa y lo que no, reflejando incumplimiento por parte de las tiendas online, además de no dar herramientas importantes a los consumidores para la toma de decisiones”.

Muchos de los cuestionamientos provienen a que la normativa del Sernac implica que cada producto debe contener su nombre, finalidad cosmética, formato, instrucciones y advertencias de uso, precauciones de almacenamiento, ingredientes, activos cosméticos, nombre o razón social del comercializador, país de origen y número registrado en el Instituto de Salud Pública.

Los cuestionamientos del Sernac a los productos de Skincare

Pero, en el caso de los productos examinados, al menos un 99% de estos omiten el registro de aprobación del ISP, 97% no declaran sus precauciones de almacenamientos, el 89% no menciona advertencias de uso y el 86% no dice nada sobre sus componentes, mientras el 58% no informan sus instrucciones de uso.

Igualmente, destacaron que la mayoría si cumple en entregar el nombre, finalidad y activos cosméticos, pero que igualmente el Sernac aseguró que estos “son principalmente aspectos básicos y comerciales que no necesariamente facilitan una toma de decisiones de compra informada”.

Esto, agregó desde la entidad, podría “llevar a los consumidores a optar preferentemente por una marca en lugar de considerar aspectos como los componentes o ingredientes”, agregando que hay diferencias de hasta 29 veces entre los costosos y baratos.