Matías Toledo, candidato a alcalde de Puente Alto: “Si le ganamos a Karla Rubilar, vamos a acabar con el legado de Piñera a nivel nacional”

Al llegar al lugar para el que convocó a esta entrevista, Matías Toledo (34), candidato independiente a alcalde por Puente Alto se sorprende: pensaba que habría más gente en el entorno.

Es la semana en que se celebran las Fiestas Patrias y la Plaza Elvira Matte, ubicada en la comuna del suroriente de Santiago —y que abarca una cuadra completa—, está con menos de cinco personas ocupándola, pese a ser un punto común de encuentros sociales.

Mientras un par fuma cigarrillos, otros se esconden en la sombra de los árboles para amortiguar los 25 grados que hay en este caluroso septiembre, mes previo a las elecciones municipales de las que Matías Toledo participará por segunda vez.

“La otra vez que hice una entrevista aquí me saludaron algunos curados. Debieron de pensar que eran amigos míos”, cuenta. No tarda en señalar que su nombre será el próximo que comandará la alcaldía de Puente Alto, la cual disputará con Karla Rubilar, exministra de Sebastián Piñera, exdiputada y exintendenta.

“Hoy Karla Rubilar, después de todo el show que se pegó con (Germán) Codina, no es la candidata ni de (Manuel José) Ossandón ni de Codina, es como la candidata a la fuerza que tuvieron que decidir“, define Matías Toledo.

—Usted ya fue candidato en 2021. ¿Cómo ha sido su vuelta a competir? ¿Qué lo diferencia de la vez anterior?

—En la campaña anterior sabíamos que no íbamos ganar. Estábamos compitiendo con el político mejor evaluado por la Cadem, el vocero nacional de la campaña del Rechazo, el presidente de la Asociación de Municipalidades, que iba por sus tercer período. Y nosotros veníamos del mundo de las organizaciones sociales. Un vecino de la comuna, sin apoyo de los medios de comunicación. Vimos que en las urnas se vio expresado los años que tenemos de trabajo territorial, 17 años, desde las ollas comunes, desde las asociaciones de emprendedores. 

Hoy tenemos un trabajo mucho más grande que el que teníamos en las elecciones pasadas. Tenemos un trabajo mucho más consolidado, un equipo tremendo con harta experiencia en gestión municipal, con algunas personas con cargo en la diputación, etcétera. Tenemos un trabajo mucho más serio, mucho más profesional y más transversal de lo que fue la campaña en 2021. Eso es fundamental para Puente Alto, porque es una comuna muy diversa. Conviven muchas realidades y muchas contradicciones. 

—Con German Codina fuera de la pista, ¿llega más confiado? 

—Sí, nosotros vamos a ganar en octubre. Tenemos la confianza de eso. Germán Codina ha integrado un sistema clientelar en Puente Alto. No solamente él, sino también Renovación Nacional. No han sido buenos los años de Codina. Hoy el índice de calidad urbana, que hace poco subió en la Municipalidad, dice que Puente Alto subió de “bajo” a “medio bajo”. Sin embargo (José Manuel) Ossandón le entrega la municipalidad en 2011 a Codina con un índice de calidad urbana “alto”. Es decir, durante su periodo pasamos de “alto” a “bajo” y hoy celebramos que retrocedimos cuatro pasos y avanzamos uno. 

A nosotros nos va a beneficiar mucho el voto obligatorio. No sólo Codina, sino que a nivel general, los partidos de izquierda y de derecha supieron administrar el voto voluntario, administrando los bolsones electorales y trabajando para ciertos segmentos etarios. Sin embargo, tenemos sectores sectores donde existe el voto nulo, blanco o la abstención totalmente abandonados. Ese voto de castigo va a ser determinante en las elecciones. 

—El único aporte que tiene en su campaña, hasta ahora, es del Fisco. ¿Qué tan complejo es levantar una candidatura independiente?

—La elección pasada nosotros gastamos 3 millones de pesos. Sacamos casi 56 mil votos. El 33%. Codina gastó 125 millones. Y no sólo eso, sino que también apoyado de toda la institucionalidad, que es la municipalidad. Nos rechazó 3 o 4 debates televisados. El bloqueo comunicacional fue tremendo. Hoy, para los independientes, la autogestión es fundamental, sobre todo para quienes no se quieren amarrar con el empresariado. A nosotros empresas del período de Ossandón nos han pedido reuniones, y nosotros, para mantener nuestra autonomía, no hemos aceptado. Vamos a seguir con el financiamiento, con los aportes que hagan los vecinos y vecinas. Hay alguien de la organización que le dio una enfermedad y que le van a pagar su finiquito. El finiquito quiere ponerlo en la campaña. Esta campaña se ha levantado con mucho cariño y responsabilidad. Es súper importante mantener la independencia económica y no mezclarse con quienes han lucrado o beneficiado de prestar malos servicios a las comunidades. 

—¿Qué tan perjudicada se ve su campaña por no ser el candidato oficialista?

—Hoy día los partidos políticos están pasando por una crisis de representatividad. El oficialismo no está ajeno a esto. Luis Escamilla es una muy mala carta que pudo elegir el socialismo. Pero, también es una buena carta, porque nosotros ya competimos con él. Él sacó el 8% de los votos. No va a sacar más de lo que ya pudo obtener.

El oficialismo y el Presidente no tuvieron la fuerza política suficiente y necesaria en este periodo para poder zanjar cuáles son las comunas prioritarias para la izquierda o el progresismo en Chile. Puente Alto es una comuna determinante como Maipú o La Florida. Son comunas que van a definir quién es el gobernador de la Región Metropolitana y la futura presidencial. Tiempo atrás, cuando nos llamaron del oficialismo para pedir el apoyo a Gabriel Boric, nos llamaron al pragmatismo político. Pero eso es algo que no existe por parte del oficialismo cuando no son ellos quienes encabezan los procesos.

—¿Con quiénes se ha reunido del oficialismo?

—Tengo una excelente relación con el Presidente. Tenía una excelente relación con distintos ministros, con presidentes de partidos, diputados, etcétera, porque creemos que quien gobierne la comuna de Puente Alto tiene que tener una muy buena relación con el que esté en el poder en el Gobierno. Lo hemos discutido con vecinos y vecinas. Pueden estar a favor o en contra del Gobierno de Gabriel Boric. Sin embargo, cuando hablamos de los presupuestos que necesitamos, es muy importante la relación que nosotros tengamos con quien sea oficialista. Hemos tratado de nutrir esas relaciones.

—¿Quiénes han sido con los que ha conversado?

—Nosotros tenemos línea directa con el Presidente, con su avanzada presidencial. También tenemos una excelente relación con la Toti (Antonia) Orellana, con Nicolás Cataldo, con presidentes de partidos, con Efrén Osorio, con Daniela Serrano…

—¿Con qué presidentes de partido?

—Tanto con Acción Humanista como del Partido Comunista. Nosotros valoramos mucho que el PC no haya llevado candidato en Puente Alto. Y que Acción Humanista también nos haya dado el apoyo en Puente Alto. Eso no fue representado sólo por Efrén Osorio, sino también por Ana María Gazmuri. 

—Fuera de esos partidos del oficialismo, ¿le han manifestado apoyo a su nombre?

—Tanto Acción Humanista como el Partido Comunista nos han dado el apoyo. Por fuera tenemos también el apoyo del Partido Humanista, Alianza Verde, tenemos candidatos del FREVS que nos están apoyando, del Partido Radical. Gente de diferentes partidos que hoy nos están apoyando. También tenemos una excelente relación con Claudio Orrego.

—A usted se le suele vincular con el PC, pese a ser independiente. ¿Por qué cree que ocurre eso?

—Es parte de las noticias falsas que intenta instalar la derecha diciendo que todo candidato independiente es comunista. También se nos ha asociado por el apoyo que nos da la senadora Campillai. Ellos creen que comunicacionalmente existe cierto anticomunismo, entonces tratan de instalar de que somos candidatos del PC. La verdad es que somos el candidato que el PC apoya. También somos el candidato que apoyan otros partidos. Pero, tenemos la primera mayoría nacional de firmas, y para conseguirlas no hay que ser militante en ningún partido. 

—¿Le molesta que se le vincule?

—Para nada. El PC es el segundo partido con más militantes a nivel nacional. Tienen una trayectoria impecable, de más de 100 años. El anticomunismo le hace mal a Chile. Hoy no debiesen existir diferencias sobre ninguna visión política. Lo que se tiene que combatir siempre enérgicamente es el fascismo. Pero, no tiene que existir ninguna postura antipartidos. Vivimos en un país democrático y diverso, donde cada visión tiene que ser respetada. Tenemos que defender el derecho a la vida, eliminar el negacacionismo. Por eso soy enfático en que no podemos permitir el fascismo, pero tienen que ser respetadas todas las visiones políticas. Por eso hay republicanos por acá instalados. No todos los republicanos tienen una ideología política marcada hacia el fascismo.

Matías Toledo y Karla Rubilar: “La derecha pudo haber escogido mejores candidatos”

—¿La izquierda institucional ha abandonado Puente Alto? La oposición lleva la candidatura de una exministra y exdiputada.

—Sí. A nosotros nos molesta mucho el abandono que tiene el oficialismo con Puente Alto. Existen un montón de partidos que decidieron  quién iba a ser el candidato en Puente Alto, y son partidos que algunos ni siquiera existen en la comuna. Yo valoro mucho su existencia a nivel nacional, pero no todos los partidos tienen representación comunal. Hoy día esos partidos sí tienen a nivel nacional un voto que decir sobre Puente Alto. Y son personas y partidos que han abandonado nuestra comuna. No hay que olvidar que el Partido Socialista trajo a Ossandón a Puente Alto. Nos molesta mucho cuando desde una vara nacional se quiere ver lo que pasa en Puente Alto. 

—¿Qué opina de Karla Rubilar?

—Creo que es una mala candidata. La derecha pudo haber escogido a mejores candidatos.

—¿Felipe Ossandón?

—No sé si Felipe Ossandón, tengo muy buena referencia de él, pero no sé si hubiese sido el mejor. Pero creo que en Puente Alto existieron concejales que estuvieron por dos períodos, había personas que trabajaban en la Dideco, en comunitario, que son personas que son funcionarios, que le han dedicado su vida al trabajo social, pero que no fueron escogidos, sino que eligieron una figura nacional. Codina no dejó ningún delfín, como lo hizo Ossandón, entonces tuvo instalar a una figura nacional que no tiene arraigo con Puente Alto, que no conoce la comuna.

Hoy Karla Rubilar, después de todo el show que se pegó con Codina, no es la candidata ni de Ossandón ni de Codina, es como la candidata a la fuerza que tuvieron que decidir. 

—En el tema de seguridad, Karla Rubilar guarda varios años en el servicio público. ¿Cómo su candidatura puede convencer sobre ese tema considerando lo anterior?

—La experiencia es fundamental. Si hablamos de Karla Rubilar, ella fue desaforada mientras Fue diputada. Cuando fue intendenta de la Región Metropolitana, la delincuencia subió en un 5%, inclusive antes del estallido social. Entonces sus cifras no son buenas. Si hablamos de la experiencia de Torrealba, de Barriga, de los distintos alcaldes procesados por distintos casos de corrupción, la verdad es que deja mucho que desear.

He trabajado casi 12 años en gestión municipal. He trabajado en más de 15 municipalidades, tanto contratado directamente por ellas como por medio de empresas desde las que trabajé, en municipios de izquierda y de derecha. Trabajé en Olmué cuando la alcaldesa era Macarena Santelices… Nosotros conocemos el aparato público el aparato estatal.

—¿Qué le dice que la única candidatura a la que Cecilia Morel apoyó sea la de Rubilar?

—Karla Rubilar es la cara del piñerismo. Para la izquierda es súper importante ganar la comuna. Si nosotros hoy día le ganamos a Karla Rubilar, vamos a acabar con el legado de Piñera a nivel nacional. Vamos a destruir… Va a ser súper complejo que Karla Rubilar pierda contra un vecino de Puente Alto. Una persona que ha estado designada en diferentes cargos y que es de renombre nacional, que pierda contra el vecino de una comuna va a terminar por sepultar su carrera política.

Hoy, Puente Alto es clave para el progresismo, para la justicia social. Karla no sólo tiene aportes de Cecilia Morel, sino también de (Juan) Sutil. Vemos que es la carta del empresariado y la carta de la extrema derecha. A mí, lo que más me preocupa de ella, es que instalación en Puente Alto fue caótica, tanto para Codina para Ossandón. Si lo fue para ella, imagina para nosotros. O sea, pidió la cabeza de varios funcionarios. Tuvieron dirigentes bloqueados en el municipio por tener una postura política distinta.

—¿Lo que ocurra en torno a Luis Hermosilla beneficia la candidatura suya?

—Claro que sí. Vimos a Karla Rubilar en el programa “Sin filtro” gritando que Hermosilla nunca había sido abogado de Piñera. Sin embargo, a los pocos días después de su intervención, salieron estas relaciones que tuvo con (Andrés) Chadwick, con su primo, y otros personajes ligados al gobierno de Piñera. El caso Hermosilla es la punta del iceberg. Si bien ha sido un caso de connotación nacional, detrás de un Hermosilla existen 10 Hermosillas más y 10 Chadwick que han cometido casos de corrupción. Esto le va a salpicar a la derecha. Ellos son expertos en tratar de evadir. 

Toledo y Pablo Chill-E: “No he conversado en particular con él”

—A pesar de que no pertenece a un partido, sí es parte de una coordinadora social, Shishigang, que tiene amplio renombre gracias también al cantante urbano Pablo Chill-E. Que se le vincule con él ¿beneficia su candidatura?

—Sí, es positivo. Tenemos 17 años de trabajo territorial, y creemos que la transversalidad es súper importante. Hoy nosotros tenemos un trabajo social desde el género urbano hasta el empresariado en Puente Alto. Hemos trabajado con Iván Martínez, con la Cámara de Comercio, con personas como Pamela Leiva, Diego Urrutia. La misma María Luisa Godoy, con quien tenemos una amistad desde hace mucho tiempo. De hecho, estuvo en el bingo de mi abuela que le hicimos a beneficio. Trabajamos con distintas personas. Cada artista, cada segmento y persona representa a otra en la población. Yo tengo 34 años. RN tiene 25 años en Puente Alto. Crecí con una exclusión de RN hacia la juventud, hacia los proyectos comunitarios que podíamos levantar. En base a eso, levantamos nuestras propias organizaciones. 

A nosotros se nos ha dicho: “Oye, dejen de trabajar con el género urbano” o la izquierda más dura nos ha dicho “no quiero verlos más con María Luisa Godoy, por ser hija de la “regalona”, ¿se entiende? Pero para nosotros es súper importantes ser transversales, porque nacimos con esa exclusión.

—Y en el caso particular de Pablo Chill-E, ¿ha hablado con él sobre tu campaña, le ha comprometido apoyo a usted?

—Sí, creo que nos van a apoyar distintos artistas. No he conversado en particular con el Pablo sobre esto, pero sí con el sponsor de los Shamanes, de Pamela Leiva, con Claudio Michaux, con distintos artistas de la comuna, con agrupaciones folklóricas. Es súper importante resaltar todas estas diversidades, no solamente al Pablo, porque el Pablito, si bien es como de interés de connotación nacional, en Puente Alto también está Miguel Castro, que está trabajando con Amnistía Internacional. Le hizo un cuadro a Will Smith y es una persona que tiene que estar renombrada en todos los espacios en los cuales podamos estar.