“Escuchamos, no juzgamos”: las razones por las que parejas, amigos y familias se confiesan sin miedo en el trend viral de TikTok

Desde hace unas semanas, se ha viralizado en TikTok el trend “Escuchamos pero no juzgamos”, el cual está relacionado con la idea de crear un espacio seguro y libre de juicios en la comunicación en línea. En esta tendencia, las personas comparten experiencias personales o vulnerables.

La dinámica es sencilla: un participante revela algo personal mientras los demás escuchan sin emitir juicio. Esto ha dado lugar a miles de videos que van desde lo humorístico hasta lo profundamente reflexivo.

Este trend permite a los usuarios abrirse sobre diversos temas, convirtiéndose en una herramienta para expresar lo que antes podría haber sido considerado tabú.

Dentro de las conversaciones se incluyen confesiones sobre citas fallidas, historias laborales, relaciones tóxicas y momentos vergonzosos, recordando siempre que el juego no solo promueve la risa, sino también un espacio seguro para la vulnerabilidad.

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Guillermina Guzmán Leal, académica y psicóloga especialista en comportamiento humano, asegura que, desde una perspectiva psicológica, este trend funciona “como espacios de contención emocional donde las personas sienten que pueden expresarse sin miedo a ser criticadas”.

La psicóloga considera que, desde lo sociocultural, estas tendencias se han convertido en una forma moderna de catarsis colectiva.

“En un mundo hiperconectado pero a menudo deshumanizado, participar en estas dinámicas permite a las personas reconectar con su vulnerabilidad en un entorno que parece diseñado para aceptar y validar sus emociones”, agrega Guzmán.

Finalmente, este tipo de trends en TikTok, con su formato breve y los códigos compartidos, ofrecen una especie de “permiso social” para expresar emociones o pensamientos que, en contextos tradicionales, podrían parecer incómodos o inapropiados.