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El rearme de José Antonio Kast tras sus derrotas electorales: el plan para enfrentar a Kaiser y la trastienda de los quiebres irreparables con sus aliados

El abanderado presidencial del Partido Republicano se prepara para su tercer y último intento presidencial. En ese camino, ha recorrido 336 comunas y ha salido al exterior en busca de un relato e ideas que lo muestren más maduro y experimentado, justo las bases que ahora intentará relucir frente al resto de los abanderados presidenciales. Pero en ese derrotero también quedaron varios heridos y quiebres que nunca se recompusieron, entre ellos, excolaboradores para fundar su partido, integrantes de su equipo presidencial y figuras emblemáticas, además del propio Johannes Kaiser, con quien no conversa hace más de un año y medio y quien aparece como uno de los principales escollos para llegar a La Moneda.

Por 13 de Abril de 2025
José Antonio Kast
José Antonio Kast
José Antonio Kast, abanderado del Partido Republicano. Ilustración: Sandro Baeza
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Fue en uno de sus tantos viajes a regiones, en febrero pasado, cuando una dirigente regional le comunicó con pesar a José Antonio Kast que había decidido dejar el Partido Republicano para recalar en el Partido Nacional Libertario, de Johannes Kaiser.

¿El motivo? Su tono de moderación en la campaña de la segunda vuelta presidencial de 2021, cuando su rival era el actual Presidente Gabriel Boric y el republicano se acercó a Chile Vamos para tratar de alcanzar la mayoría.

La escena reflejó uno de los dos puntos de fuga que ha debido enfrentar el abogado y exdiputado de 59 años camino a su tercera y última —como ha asegurado él y ratifican sus cercanos— candidatura a La Moneda.

El otro motivo de abandono ha sido el mismo por el cual a fines de 2023 Kaiser dejó la colectividad: el proceso constitucional de ese año, en el que Kast y los republicanos impulsaron una nueva Constitución, luego de que la ciudadanía los convirtiera en la primera fuerza política del país en la elección de consejeros constitucionales, con más de 3 millones y medio de votos, atrayendo a un 35% del electorado.

Se trató del mejor momento de Kast en las encuestas de cara a la carrera presidencial de este año —con un 27% de intención de voto espontáneo en ese momento, según Cadem— y al que aún no ha logrado volver frente al inamovible primer lugar de Evelyn Matthei, la candidata de Chile Vamos.

Pero a partir de ahí el camino se puso cuesta arriba. Vino la derrota en el plebiscito de diciembre ese año, donde un 55% rechazó la propuesta constitucional que se escribió con una fuerte presencia de los colores del Partido Republicano. Hubo un distanciamiento de un grupo de dirigentes clave en la construcción de la tienda y de otros que terminarían poniéndose en su camino de cara a La Moneda, como ocurrió con Johannes Kaiser.

2021: una derrota ni tan dura, al menos para republicanos

Dar vuelta la página de inmediato. Esa fue la decisión que Kast y el Partido Republicano tomaron luego de la derrota con Gabriel Boric en la elección presidencial de 2021. Si bien la distancia en votos fue considerable, de más de un millón, esa noche de la segunda vuelta, aseguran dirigentes, había satisfacción.

José Antonio Kast durante un debate presidencial con Gabriel Boric. Foto: AgenciaUno

“¿Tú crees que estábamos tristes? Lejos de eso, quedamos muy bien”, recuerda un dirigente sobre esa ocasión. En la tienda aseguran que las expectativas iniciales no eran altas. Una apuesta para la primera vuelta era que Kast doblara el 7,9% que logró en su primera incursión presidencial de 2017, donde el partido no existía. Finalmente, terminaron primeros, con casi un 28% de los votos, con una bancada de 13 diputados y siendo un factor clave para que el Senado quedara empatado con la izquierda.

En el frente a frente con Boric, en tanto, obtuvieron un 44%, en “el peor momento de la derecha y cuando se decía que el país era de izquierda”, como dicen en el partido.

De hecho, la decisión de que Kast iría por una nueva candidatura presidencial se tomó tempranamente, cuentan dirigentes. Pero para crecer se fijaron como meta consolidar al partido: tener funcionando los institutos de academia y formación —entre ellas, Ideas Republicanos y Acción Republicana—, conseguir representación a nivel local y regional en las siguientes elecciones municipales y dotar de mayores conocimientos y preparación al propio Kast.

Hoy los republicanos afirman que cada uno de esos objetivos se cumplió. Sostienen que hay un equipo. Que el candidato está más experimentado, más maduro y con aplomo. Y que el escenario no podría ser mejor para la oposición, con un gobierno con alta desaprobación y con un clima a favor de la derecha.

Aunque en el camino, reconocen cercanos a Kast, hubo que ser pragmáticos y adecuarse a un imprevisto escenario.

Recorrer las 345 comunas

La única certeza para Kast en su camino a La Moneda luego de la derrota frente a Boric era que habría un plebiscito de salida en septiembre de 2022, para el cual rápidamente apostaron a la opción del Rechazo.

Para los republicanos el plan fue que Kast se mantuviera en modo trabajo, colaborando en la estructuración de las instituciones del partido y en la formación de liderazgos e ideas.

Por lo demás, el compromiso que asumieron los liderazgos de la derecha de cara al plebiscito fue el quedar relegado en una segunda línea, sin asumir vocerías, para que la campaña estuviera dominada por rostros ciudadanos. Lo hizo tanto el expresidente Sebastián Piñera, como el líder de los republicanos.

¿Se escondió Kast para el plebiscito? Ese fue el concepto que utilizaron en la izquierda, pero que los republicanos siempre rechazaron. Ahí indican que no se quedó en su casa ni en la sede de los republicanos, ubicada en Las Condes, sino que recorrió el país.

De hecho, la meta fijada —que se ajustó a los procesos electorales imprevistos que se sumaron en el camino, como la elección de consejeros y un segundo plebiscito de 2023— fue recorrer las 345 comunas de cara a la presidencial de este año.

En su equipo aseguran que hoy lleva 336 comunas y que solo le restan La Higuera, Paihuano, Río hurtado, Juan Fernández, Ranquil, Quilaco, Quilleco y Tucapel.

Kast durante sus salidas a regiones. Foto: Redes sociales

Solo en enero de este año recorrió 14 comunas. Estuvo en Quirihue y Cobquecura, de la Región de Ñuble; en Retiro, Empedrado, Villa Alegre, Yerbas buenas, Colbún, San Rafael y Curepto, de la Región del Maule; Malloa, Quinta Tilcoco y Coltauco, de O´Higgins); Negrete, de la Región del Biobío, y Galvarino, de La Araucanía.

Y la próxima semana, en tanto, arribará a la Región del Biobío, donde se reunirá con dirigentes locales.

¿Cómo financia ese despliegue? En el Partido Republicano afirman que Kast recurre, por un lado, a un financiamiento propio, que viene de su patrimonio personal.

En los comicios de 2021 declaró participar en la sociedad de inversiones Bavaro SPA, de la cual dijo ser controlador a través de una participación del 97,5%. También señaló tener una renta bruta mensual de $3,5 millones de pesos y mantener acciones por $108,7 millones en el Banco de Chile.

Por otra parte, el propio partido contribuye “con parte del financiamiento y equipos propios, y lo mismo las instituciones asociadas, para la realización de actividades, recorridos y soporte a las actividades, para lograr esos fines”, relacionados a la actividad partidaria.

Adicionalmente, tal como señalaron desde la colectividad en un anterior reportaje de The Clinic, existe un aporte de voluntarios y profesionales que contribuyen permanentemente en el trabajo que realiza el partido y las instituciones asociadas.

Formación en el exterior

Hubo otro despliegue que en el Partido Republicano ha sido fundamental para la tercera aventura presidencial de José Antonio Kast: el internacional, con la intención de conocer modelos exitosos implementados en distintas materias, sobre todo en la seguridad.

Llegó a El Salvador a conocer el plan de cárceles del presidente Nayib Bukele. También a Italia, para examinar el régimen “41-bis” de aislamiento especial para reos de alta peligrosidad. Y a Inglaterra, para comprender el sistema de cámaras.

Asimismo, llegó a Hungría, en la frontera con Serbia, donde se instaló una extensa valla para detener el paso de inmigrantes. Viajes similares se realizaron a Polonia, España y a Estados Unidos, también con un foco en el trabajo implementado en la frontera.

Kast en la frontera de Hungría y Serbia. Foto: Republicanos.

En todas esas visitas, subrayan cercanos a Kast, no se buscó la foto con los principales líderes políticos, sino que se reunió con quienes ejercen de primera mano las acciones en seguridad, como ministros o la propias policías. Todo ello estará en las bases de un futuro programa.

Pero además, Kast continuó con un despliegue internacional más político, asistiendo a foros conservadores desde los cuales extendió redes y emitió frases golpeadoras que repercutieron en Chile. En la Cumbre Viva Europa 24, por ejemplo, cuestionó al Presidente Boric acusándolo de ser un “travesti político”, lo que fue repudiado desde la UDI al PC.

El mismo año atacó al mandatario y a la expresidenta Michelle Bachelet en el Foro Madrid 2024, y ha tenido una recurrente participación en los encuentros de la Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC)

En su partido indican que desde 2021 comenzó a extender sus redes internacionales. Clave fue su rol en la Political Network for Values, una red internacional conservadora, que presidió hasta diciembre para dedicarse de lleno a su campaña presidencial.

Y si bien aún se sigue cuestionando entre la militancia el viaje relámpago que realizó Kast a Estados Unidos en medio de la segunda vuelta presidencial de 2021, en la tienda hay quienes lo justifican por un sentido de presentación de su figura al exterior, considerando que camino a esa elección, a nivel internacional se le tildó a ratos como “el nuevo Trump chileno”.

La ruptura con figuras de su partido

El Partido Republicano nunca quiso un cambio constitucional, pero en 2023 se vio forzado a impulsarlo. En la elección de mayo de ese año la ciudadanía les dio un 35% de los votos y el análisis que se hizo es que no había otra opción: había que jugársela e impulsar un nuevo texto, en el que la derecha tendría el control.

Pero la apuesta por el A Favor resultó fallida. En el plebiscito de ese año un 55% estuvo por la opción En Contra y, nuevamente para Kast, hubo que dar vuelta la página rápidamente.

Sin embargo, en el camino quedaron varios heridos identificados con las filas republicanas. El más emblemático a esta altura es Johannes Kaiser, quien renunció en enero de 2024 a la colectividad tras manifestar, sin alguna vacilación, que estaría por el En Contra.

Pero hubo otro grupo de militantes y dirigentes que jugaron roles clave en la tienda que también se alejaron.

Una de las primeras en tomar distancia fue la economista María Cecilia Cifuentes, quien colaboró cercanamente con Kast en su camino a la segunda vuelta. Se distanció luego de que los republicanos presentaran una propuesta para eximir de contribuciones en al primera vivienda, lo que quedó plasmado en el proyecto impulsado en 2023.

Cifuentes hoy es parte del grupo economista que trabaja en la propuesta presidencial de Evelyn Matthei.

Kast reconoció la lejanía con ella en una entrevista de diciembre de 2024 en Radio Infinita. “No he hablado con ella. Tuvimos una diferencia de opinión importante en el tema de las contribuciones. Nosotros éramos partidarios de liberar las contribuciones a la primera vivienda para la clase media, y ella decidió que eso era incompatible con seguir con nosotros”, comentó.

Otro de sus cercanos era el abogado Jorge Barrera, uno de los primeros en entrar a las filas de la colectividad y colaborar en la declaración de principios y sus estatutos. Con ese pergamino, interrumpió su estadía en Estados Unidos y volvió a Chile para asumir un rol clave como jefe de los asesores de los consejeros republicanos, tras sellar un acuerdo con Kast y Arturo Squella, el presidente de la colectividad.

Jorge Barrera asumió como el jefe de los asesores de los consejeros republicanos. Foto: AgenciaUno.

La campaña para el plebiscito final, sin embargo, los distanció hasta ahora irreparablemente, dicen cercanos a ambos. Estas fuentes señalan que hubo diferencias insalvables por la estrategia de campaña y que afloraron las desconfianzas. En los republicanos, además, incomodó que Barrera asumiera un rol de vocero en la recta final de campaña, lo que provocó momentos de tensión.

Marinovic: “Le perdí la confianza a Kast”

Hubo otro quiebre que sorprendió a la derecha ese año. La filósofa Teresa Marinovic, una de las figuras ligadas a ese partido durante la Convención Constitucional, hizo públicas sus diferencias con el actuar de los republicanos en 2023.

Si bien Marinovic es independiente, fue a raíz de la negociación de Chile Vamos con los republicanos que logró entrar en un cupo de RN. Más tarde, además, era usual que visitara la sede de la colectividad. De hecho, Kast en redes sociales destacó en más de una ocasión su labor en la Fundación Nueva Mente.

Pero el proceso también puso fin a esa relación. “Le perdí la confianza”, dice Marinovic a The Clinic al explicar sus motivos para el distanciamiento.

“Fui testigo de que Kast estuvo dispuesto a cosas que no me parecen legítimas, con tal de aparecer como el gran ganador. Validó el principio de igualdad sustantiva, que es el que representa a la extrema izquierda”, explica Marinovic, quien en el proceso de 2023 apostó por el En Contra.

“Confundió al electorado: dijo que votábamos con los comunistas y él sabía que eso era injusto”, añade.

Teresa Marinovic junto a José Antonio Kast, invitado a su Fundación Nueva Mente.

Cercanos a Kast, en tanto, indican que estos alejamientos se explican por las visiones distintas en torno al proceso, pero recalcan que el candidato nunca se tomó estas diferencias a nivel personal y que mantiene una idea de puertas abiertas.

En el camino también tomó distancia uno de los expresidentes de la tienda, el senador Rojo Edwards. Y tempranamente se alejaron diputados, como Gonzalo de la Carrera y Gloria Naveillán, quien calificó al Partido Republicano como una secta. Y por otra parte, después de la segunda vuelta presidencial de 2021, hubo un punto de fuga de quienes se desencantaron de la “moderación” de Kast, como ocurrió con la mencionada dirigente de Los Lagos.

Al interior de la tienda republicana, de todos modos, reconocen que a varias personas se les dejó ir o se les pidió dejar la tienda al no ser compatibles con el proyecto, el cual —reconocen algunos— necesitó de una moderación, de manera de evitar que se les asociara a figuras conflictivas o a un discurso antomujeres o “antivacunas”.

El núcleo de Kast, por lo demás, continuó siendo casi el mismo, estando acompañado hasta hoy principalmente por su jefa de prensa y posterior jefa de gabinete, la periodista Carolina Araya, como también de uno de sus principales asesores, el abogado Cristián Valenzuela, quien lideró el Centro de Ideas Republicanas y actualmente lo aconseja en el ámbito comunicacional.

Cristián Valenzuela y Carolina Araya, del equipo de José Antonio Kast. Foto: Redes sociales.

La entrada y salida de Kaiser

Fue en el marco del XXVI Congreso Nacional de la Confederación del Comercio Detallista y Turismo de Chile (Confedech), del pasado 31 de marzo, cuando Kast y Kaiser volvieron a estrechar sus manos.

Se trató solo de un saludo cordial dado que ambos no mantienen conversaciones desde hace al menos un año y medio, justamente desde la campaña por el plebiscito constitucional de 2023.

El saludo entre José Antonio Kast y Johannes Kaiser el pasado 31 de marzo en la Confedech.

Kaiser entró al Partido Republicano convocado por uno de sus cercanos en la Región de La Araucanía, Alejandro Martini, presidente regional de la tienda de Kast, cuando sus seguidores de Youtube le plantearon dejar de criticar y pasar a la acción.

Si bien en principio planeaba postular por un cupo a diputado dentro de esa región, en el entorno del libertario aseguran que fue el propio Kast quien le planteó que lo mejor sería que se presentara en el distrito 10, de Santiago, como finalmente ocurrió. Como factor se consideró su perfil más similar al de Teresa Marinovic, que poco antes había resultado elegida convencional en la misma zona.

En el Partido Republicano aseguran que algunos dirigentes no lo conocían realmente hasta que resultó electo diputado y su nombre figuró a los pocos días en matinales por sus antiguos dichos contra las mujeres.

Conocedores de la interna republicana, aseguran que nunca se terminó forjando una relación muy estrecha entre Kaiser y Kast. El primero, en realidad, generó mayor cercanía con sus compañeros de bancada, en el Congreso.

“No hemos tenido la oportunidad de cultivar una relación más frecuente”, dice escuetamente Kaiser al ser consultado por The Clinic sobre su relación con Kast.

Lo cierto es que la apuesta constitucional de 2023 terminó por dividir aguas, al punto que Kaiser acusó a los republicanos de apostar por una constitución de “amarillos”.

Y hoy, como abanderado presidencial del Partido Nacional Libertario, terminó convirtiéndose en un flanco para las intenciones de Kast que pocos vieron venir.

Marcar diferencias con Kaiser, pero no entrar en el barro

El discurso del Partido Republicano frente a la irrupción de Kaiser ha sido plantear que es positiva la competencia dentro de la derecha. Y que ese factor ha llevado al sector a conseguir los mejores resultados electorales. Por lo mismo es que hace meses se descartó la idea de que Kast vaya a una primaria, por lo que se afirma que estará en la papeleta de primera vuelta.

No obstante, la figura de Kaiser ha sido parte del análisis y la conversación en las instancias partidarias de los republicanos, donde algunos aún tienen dudas sobre cuál es su “techo” electoral.

Por ahora, en la tienda republicana dicen que hay tranquilidad y que la “espuma” de su fenómeno comenzó a retroceder, aunque reconocen que el factor “novedad” esta vez lo tiene Kaiser.

A la vista han tenido las encuestas.

Aunque todo depende del sondeo que se ocupe. En la más reciente Cadem, Kast marcó un 11% y Kaiser un 13%. En Criteria, en tanto, Kast subió de un 11% a un 15%, mientras que Kaiser bajó de un 13% a un 9%. Otro estudio de Feedback conocido esta semana, no obstante, le dio a Kaiser un 22% de intención de voto versus un 7% para el republicano.

Y si bien en Chile Vamos hay quienes hablan de un “desfonde” de Kast, en los republicanos aseguran que eso no ha existido.

Por otra parte, aseguran que se han preparado mejor para esta carrera presidencial. Recalcan que tienen una propuesta bien elaborada y que cuentan con un equipo ya consolidado y andando.

Y dicen ver a un candidato mucho más cómodo y tranquilo a la hora de dar entrevistas. Sus ideas, dicen, ahora no generan la controversia que causaban antes y ponen ejemplos: fue de los primeros de hablar de un estado de emergencia para La Araucanía, el cual ahora se extiende por más de dos años. O planteó antes que el resto el utilizar franjas en la frontera.

Por lo mismo, indican que se debe lucir aquello, su experiencia. Como también exhibir que esta vez cuenta con un partido consolidado y con presencia en gobiernos locales. Los republicanos actualmente cuentan con más de 200 concejales y 60 consejeros regionales, que la colectividad aprovechará de cara a la campaña presidencial.

Por lo demás, dentro de los republicanos hay quienes siguen creyendo que Kaiser podría terminar bajándose de la carrera presidencial. Recuerdan que él mismo se fijo un piso de un 20% en las encuestas para ir a primera vuelta. Y si llegara a salir, en la tienda creen que un porcentaje relevante debería ir hacia Kast.

“Hay más similitudes que diferencias”, recalcan dirigentes, que dan cuenta que de que el público de Chile Vamos ya se atrevió una vez a votar por Kast en la segunda vuelta de 2021, y que en tanto en el primer y segundo proceso constitucional tuvieron a Demócratas y Amarillos apoyando la misma causa.

En ese marco, una decisión tomada es que Kast no entre a la confrontación con Kaiser ni con Matthei, sino que muestre su experiencia, propuesta y formación del partido. En las últimas semanas, de hecho, dieron a conocer un plan para eximir de contribuciones a la primera vivienda y otro para enfrentar las listas de espera. También sacaron a relucir el ingreso al partido del ahora excarabinero Sebastián Zamora.

De todos modos, se enfatiza que la preocupación no está puesta en Kaiser sino en todo lo que es el desafío presidencial de esta vez, donde el eje que han tratado poner es la disyuntiva entre cambio y continuidad.

Para los republicanos, tanto el actual gobierno, como el anterior de Sebastián Piñera, reflejarían una continuidad, y por lo mismo Squella se ha preocupado de remarcar el “piñerismo” detrás del equipo de Matthei.

En contrapartida, Kast y los republicanos dicen representar un cambio “radical”.

Con todo, también hay dirigentes que sostienen que Kaiser podría terminar enredado en sus propios errores, destacando que en las últimas semanas ha debido salir en varias ocasiones a dar explicaciones, como ocurrió con su traspié sobre las dosis de las vacunas en Chile.

¿Y si no gana la presidencial?

Hace unos cuatro meses, José Antonio Kast retomó el hábito deportivo, lo que ha reflejado en sus redes sociales, en las que permanentemente también comparte sus salidas con su mujer, Pía Adriasola, en lo que ha llamado sus “martes de pololeo”.

Sus cercanos dicen que quiere estar activo para los desafíos que se le presentan este año, pero también para lo que será un eventual futuro período en La Moneda o fuera de ella.

El propio candidato ha señalado que esta será su última incursión presidencial y que no quiere convertirse en un nuevo ME-O, apareciendo en elección tras elección.

Si bien en su tienda señalan que el foco está puesto en la campaña que liderará este año, también se especula por qué ocurrirá en caso de que no resulte vencedor. En su partido indican que, ante esa eventualidad, seguirá estando vinculado al partido en la promoción de nuevos liderazgos y de las ideas.

Sin embargo, un retorno al Parlamento, aseguran quienes lo conocen, no está en sus planes. “Ya estuvo una década ahí y lo último que desearía es volver”, afirman.

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