Amado en Brasil, odiado en Francia: la historia de John Textor, el multipropietario de equipos que condenó al Olympique de Lyon al descenso

“¡Textor fuera!”. Eran las pancartas que los hinchas del Olympique de Lyon desplegaron por toda la ciudad. En la puerta de la basílica de Notre-Dame de Fourvière, en los puentes de la circunvalación de Lyon, cerca del Estadio Groupama, y ​​en los puentes de la ciudad sobre los ríos Ródano y Saona, se podía encontrar un cartel en contra del actual propietario del Lyon, John Textor. 

“Les aseguro que no descenderemos. Tenemos recursos que superan con creces las necesidades de este club”, fueron las palabras de Textor a finales del año pasado. El inversionista estadounidense llegó al Lyon en el año 2022 y a través de Eagle Football Holdings, se transformó en propietario del Botafogo, Crystal Palace, RWD Molenbeek y el club francés. 

Textor asumió en el conjunto galo con la idea de revolucionar el equipo. “El increíble lujo que tenemos de ser una organización global con múltiples clubes nos da la capacidad de equilibrar los flujos de efectivo en todas nuestras corporaciones”, afirmó. 

Sin embargo, esto no fue así para la Dirección Nacional del Control de Gestión (DNCG, el organismo encargado de supervisar las finanzas de los clubes de fútbol franceses). En noviembre sancionaron al Lyon y lo descendieron administrativamente a la Ligue 2. Textor y compañía, tras varias reuniones esperaban que esta sanción se levantara, sin embargo esto no fue así. El martes de la semana pasada la DNCG confirmó que el club francés jugará en la segunda división. 

Ante esta noticia, el club declaró en un comunicado de prensa que para ellos es incomprensible la decisión emitida por la DNCG esta tarde (martes) y confirmó que apelará de inmediato. 

Al mismo tiempo, hace unas semanas el propio Textor le dijo a L’Equipe que “todo va bien financieramente”. El grupo liderado por el estadounidense había vendido sus acciones del Crystal Palace por 210 millones de euros y además vendió más de 100 millones de euros entre los mercados de enero y junio. 

Para la DNCG esto no fue suficiente. La razón fue que estas ventas aún no generaron ninguna entrada de efectivo y en un comunicado de prensa en enero de este año, Eagle Football Holdings señaló que solo 40 millones de euros de la venta del conjunto inglés irán para el Lyon. Aquella incertidumbre,no le ha dado seguridad financiera a la DNCG, por lo que tomó la decisión de descender al club francés. 

La principal diferencia entre Textor y la DNCG radica en si los demás clubes del Eagle son relevantes para el panorama financiero del Lyon. El magnate argumenta que los jugadores de los otros equipos son activos compartidos y cualquier efectivo generado por las ventas puede ser agrupado. Un Botafogo, reciente campeón de Brasil y de la Copa Libertadores, se traduce en grandes ventas de sus futbolistas, lo que puede ayudar al Lyon, según Textor. 

Sin embargo, según revela L’Equipe, John Textor no ingresó el dinero de la reciente venta de Rayan Cherki por 42,5 millones de euros y tampoco el traspaso de Luis Henrique del Botafogo al Zenit por 33 millones, a pesar de que se lo había prometido a la DNCG. 

El mismo medio francés, cuenta que el dueño del Lyon pactó con un fondo de pensiones estadounidense un porcentaje de futuras ventas de jugadores del Lyon a cambio de una inyección de 70 millones de euros. Además, la venta del Crystal Palace es un activo que está bloqueado porque le pertenecen a ARES, la empresa que le dio a Textor un préstamo de 425 millones de euros para comprar al equipo galo. 

Hay que tener en cuenta, que Textor al mando del Lyon vendió el estadio LDLC Arena a su antiguo propietario para tener fondos y también se tuvo que deshacer del exitoso equipo femenino, en donde juega la portera nacional Christiane Endler, que fue vendido a Michele Kang, propietaria de Washington Spirit CF, de la National Women’s Soccer League.

Según Financial Times, hoy más de 300 equipos a nivel mundial, incluyendo el 13% de los que forman parte de la UEFA, son manejados por propietarios con multiplicidad de clubes. En 2012 habían menos de 40 clubes. 

John Textor es amado en Botafogo, porque fue el propietario que los sacó campeón por primera vez en la Copa Libertadores y los tiene peleando en lo alto del Brasileirao. “Mientras este hombre siga vivo, le estaré agradecido. Le pedí a Dios que apareciera un comprador para Botafogo, para que el club no desapareciera”, fueron las palabras de un hincha del Fogao al medio francés AFP. 

Sin embargo, en Lyon lo odian. Los Bad Gones, los ultras del conjunto francés, se han estado manifestando en las calles y el mensaje es claro: John Textor nunca ha sido ni será el hombre adecuado para el puesto. Este hincha del Botafogo debe desaparecer ahora del panorama lionés. Por lo mismo, en las últimas horas Michele Kang fue anunciada como nueva presidenta del club.