Dos políticos hindúes recurren a los dioses para resolver discusión

Incapaces de resolver sus diferencias por cauces habituales, dos políticos de Bangalore, en el sur de India, han decidido recurrir a más altas instancias: mantendrán un careo en un templo para, ante los dioses hindúes, ver quién de ellos miente.

Los protagonistas de esta historia son el jefe del Gobierno regional de Karnataka -cuya capital es Bangalore-, B. S. Yeddyurappa, y su principal rival, H. D. Kumaraswamy, enzarzados en una agria disputa sobre un intento de soborno político.

Kumaraswamy acusó a Yeddyurappa, del partido nacionalista hindú Bharatiya Janata Party, de haber usado a intermediarios para ofrecerle una cantidad económica a cambio de que su partido, el Janata Dal, dejara de destapar escándalos de corrupción.

Y el jefe del Gobierno, que a sus 68 años estaba sometiéndose en ese momento a una terapia de rejuvenecimiento, reaccionó a lo John Wayne: retando a su rival a un duelo “dhármico” (“rectitud” religiosa) en presencia del dios del templo de Dharmastala.

“Yo creo en dios. Espero que tú también. Te desafío: escoge una fecha y hora y jura frente al dios Manjunatha. Admiraré la valentía de mantener tus acusaciones ante el todopoderoso. Yo estoy listo para jurar que lo que dices es falso”, afirmó.

“Ya basta de tirar piedras y esconder la mano, con acusaciones serias para luego huir como un cobarde”, añadió, en un texto publicitario publicado por distintos medios de comunicación este fin de semana de la región de Karnataka.

La India es un país que lleva a gala su secularismo y presume de diversidad religiosa, aunque los hindúes componen más del 80 por ciento de la población y en la práctica la mayoría de los políticos utilizan de una forma u otra la brecha religiosa.

Nunca, sin embargo, dos altos dirigentes democráticos habían llevado hasta este nivel de juramento una polémica política, y ahora las autoridades del templo de Dharmastala, en el suroeste del país, confían en que no se registrarán problemas de orden público.

“Quien quiere un conflicto no viene al templo”, declaró a Efe el jefe del Comité del Templo de Dharmastala, Virendra Heggade, que descartó que vayan a tomarse medidas de seguridad adicionales ante la salomónica comparecencia de Yeddyurappa y Kumaraswamy.

La creencia, mantienen los medios indios, es que las personas que mienten no acuden a Dharmasthala, y que, si lo hacen, no reúnen la valentía suficiente como para repetir una mentira ante la deidad en los arbitrios, que son presididos por Heggade “cuando es necesario”.

“Seguro que será un juramento pacífico. Este tipo de juras son habituales porque para muchos es un alivio de conciencia, y si los políticos lo quieren, estamos listos”, aclaró a Efe Heggade.

La fecha elegida por Kumaraswamy y Yeddyurappa para su jura es el próximo lunes 27 de junio, aunque en las últimas horas están creciendo las voces que critican la decisión por estimar imprudente y sacrílego que sus cuitas políticas lleguen a la arena religiosa.

“Se ganarán la maldición de Manjunatha si convierten el templo en un lugar para discusión política. Me ha sorprendido y se trata de un mal ejemplo”, afirmó al diario indio DNA el gurú hindú Visveshatheertha.

Y a la tranquilidad tampoco ayuda el hecho de que ambos políticos, viejos rivales de la política kannada, vayan a desplazarse en compañía de sus familias a Dharmasthala, un centro de peregrinación situado a 300 kilómetros de Bangalore.

“Estoy dispuesto a someterme incluso a un detector de mentiras o a inyectarme el suero de la verdad”, ha dicho a la prensa Kumaraswamy, que acusa del intento de soborno a un ayudante de su rival llamado Lehar Singh.

“¿Vendrá Yeddyurappa con su ayudante?”, se preguntó también el opositor, mientras calienta motores para su particular duelo al sol…del templo.

El resultado quedará sin embargo en un probable empate, a menos que Manjunatha se pronuncie de algún modo, como aseguró a Efe el gestor del templo, Heggade: “si juras en falso ante Manjunatha -concluyó-, el dios te castigará”.