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Mundo

15 de Mayo de 2013

Los padres surcoreanos obligan a sus hijas a someterse a operaciones de cirugía plástica

Vía Vice Como seguramente ya sabéis, la cirugía plástica está muy de moda en Corea del Sur. ¿Visteis la semana pasada las fotos de las participantes de un concurso de belleza surcoreano? Todas tenían la misma cara: Decidí contactar con mi amiga Sparkles (no es su nombre real), quien acaba de regresar a vivir a […]

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Vía Vice

Como seguramente ya sabéis, la cirugía plástica está muy de moda en Corea del Sur. ¿Visteis la semana pasada las fotos de las participantes de un concurso de belleza surcoreano? Todas tenían la misma cara:

Decidí contactar con mi amiga Sparkles (no es su nombre real), quien acaba de regresar a vivir a su Seúl natal, para averiguar cuál había sido la reacción ahí a toda esta historia. Resulta que esta fascinación por la cirugía plástica se ha convertido en una especie de broma y las chicas se ríen ante la posibilidad de que todas terminen con el mismo doctor y sin párpados. También me dijo algo un poco más preocupante: los padres están presionando a sus hijas para que se sometan a procedimientos cosméticos. Aquí está nuestra charla.


Un anuncio de cirugía plástica en un camión en Corea del Sur (Imagen via)

¿Cómo es “la escena de la cirugía plástica” actualmente?

Tenemos tendencias, como hacer un corte en la parte interna del ojo para que tenga una forma más ovalada. Durante un tiempo estuvo de moda hacerse una liposucción y meterse esa grasa en la frente. Pero es difícil saber si se trata de imitar la idea occidental de belleza; nadie lleva una foto de una famosa caucásica y le pide al cirujano que la deje así. Esta idea quizá surgió porque la gente blanca, por lo general, tiene narices más altas y ojos más grandes, así que es fácil adjudicárselo a un “look” occidental, pero nadie en Corea dirá que quiere parecer más occidental. En Corea, las cirugías de ojos y nariz son lo “básico”; son procedimientos estándar.

Suena como ir a un restaurante de comida rápida y pedir una hamburguesa. “Sólo lo básico, gracias”.

Sí. “¿Todavía no te has hecho cirugía plástica? ¡Deberías hacerte lo básico!” Eso no es nada. Lo hace tanta gente que ahora las personas dicen cosas como, “Sólo te has hecho los ojos y la nariz, eso no es nada”.

¿Tienes amigas que se hayan hecho cirugía plástica?

Creo que no tengo ni una amiga que no haya pasado por algún procedimiento. Todas se han hecho algo. Por lo general ellas pagan para hacérselo, pero hay muchas madres que pagan las cirugías de sus hijas. Todas son cada vez más hermosas y algunos padres no quieren que sus hijas sean las “feas”. Es como en los noventa, cuando tus padres te daban un Discman porque no querían que fueras el único niño en el colegio sin uno.

¿Por qué decidiste hacerte la cirugía?

No fue mi idea. Mi madre me decía, “No es tan grave, sólo cierra los ojos, duérmete y lista. Te despertarás y te acompañará el resto de tu vida”. Empezó a decirme eso cuando estaba en el instituto. Quería que me operara la nariz antes de ir a la universidad.

¿Por qué quería que lo hicieras?

La razón principal, y esto es verdad, es que en la sociedad existe esta idea de que cuanto más hermosa eres, más beneficios obtienes. La gente se inclina más por las personas atractivas cuando toman decisiones, como a la hora de contratar a alguien. Esa es la belleza estándar aquí, así que todos quieren ser así; la cultura lo ha convertido en algo normal. Muchas personas no lo piensan demasiado. Piensan, “Desearía que mis ojos fueran más grandes. Voy a hacerlo”.

¿Notas estos beneficios ahora que tu rostro ha cambiado?

Personalmente, no sólo en Corea sino también cuando viajo, he notado que la gente es más amable conmigo. Siento que puedo salirme más con la mía.

Vas a robar un banco, ¿no?

No, no digo que me aproveche de esto, pero siento que la gente me trata de forma distinta. Me hace sentir que la gente tiene razón. En algún lugar leí que, desde un punto de vista psicológico, la gente confía más en la gente bonita.

¿Fue extraño ver tu rostro por primera vez?

Tomé pastillas para dormir y para el dolor durante una semana cuando me operé la nariz, así que sólo dormía. La primera vez que me vi la nariz fue extraño. Me pareció que había quedado demasiado alta, no me gustaba y sentía que no iba con mi cara. Cuando me acostumbré a verme con mi nueva nariz fue como ese sentimiento que tienes cuando vas de compras y encuentras el vestido perfecto y estás feliz de haberlo comprado y no puedes esperar para usarlo. Es ese sentimiento multiplicado por un millón; muy amplificado.

Y tu padre quería que te operaras las orejas también, ¿verdad?

Sí, una era más pequeña que la otra. Le pesaba la idea de que me sintiera mal el día de mi boda cuando me recogiera el pelo. Que cosa más rara.


Un cirujano surcoreano muestra fotos de mujeres antes y después de someterse a la cirugía (Imagen via)

¿Te has operado algo más?

Los ojos, y es muy peculiar porque tienes que permanecer despierta. Te ponen anestesia local en los párpados y debajo de los ojos. Fue horrible porque puedes sentir cómo algo te atraviesa la piel. Estaba bañada en sudor de lo nerviosa que estaba. Fue al mismo tiempo que mi nariz, pero no sanó muy bien, así que me lo volví a hacer. Fue mi madre quien quería que me lo hiciera.

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