La “vaquita” del abogado del Mamo para ayudar a los militares de Punta Peuco

Hace una semana, el abogado René López, representante de Manuel Contreras, inició una extraña campaña en las redes sociales. En el muro de su Facebook redactó una carta destinada a la “familia militar”, en la que criticaba el apoyo poco comprometido de algunos seguidores y detallaba los escasos fondos con los que cuenta para la defensa de los soldados: “La verdad es que estamos sin financiamiento, nadie colabora, ni siquiera con una resma de papel”, decía la publicación en sus primeras líneas.

Según escribió López, los condenados por violaciones a los derechos humanos sólo confían en él, y que por falta de recursos no puede hacerse cargo de todas las representaciones: “Si alguien está en condiciones de colaborar, que se nombre un recaudador. Hoy todos quieren que presente un recurso por la totalidad, y sólo puedo hacerlo con dedicación exclusiva. Les dejo el guante tirado, él o los que puedan, que lo recojan. Ellos, nuestros presos políticos, están más complicados que nunca”, agregó en la carta.

En la Corporación 11 de Septiembre, creada en 1999 por Álvaro Corbalán, no reaccionaron de la mejor manera frente a las palabras de López. Miembros de esta agrupación se reunieron de emergencia durante esta semana para aclarar que los militares que están en Punta Peuco no necesitan dinero, y que la campaña para juntar recursos no cuenta con la simpatía de los seguidores de Pinochet. Agregan, además, que no es verdad que todos los militares presos quieran al abogado del Mamo como su representante, pues muchos de los reos hoy siguen culpando a Manuel Contreras por el cierre del Penal Cordillera.

René López aseguró a The Clinic que su publicación se trató de un experimento, y que bajo ninguna circunstancia su intención era pedir dinero: “La plata no nos interesa. Escribí eso para hacer una encuesta. Quería ver quiénes estaban dispuestos a apoyarnos, pero salí muy defraudado. Nadie se puso ni con un grano de maíz. Como dice Eduardo Iturriaga, los militares son palos con caca, porque nadie los quiere tomar”.