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12 de Mayo de 2017

La declaración de Piñera por caso Exalmar: “Ni yo ni ningún miembro de mi familia participó en la decisión de realizar esa inversión”

"Yo me desligué absolutamente de la administración de las empresas situación que mantengo hasta el día de hoy. Esto ocurrió en abril de 2009, por lo que, en consecuencia, durante el período en que fui candidato y todo el período en que fui Presidente de la República no participé en la gestión , administración e inversiones de las empresas", aseguró el exMandatario y actual precandidato presidencial ante el fiscal Manuel Guerra.

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Hace algunos días el ex Presidente Sebastián Piñera declaró ante el fiscal Miguel Guerra por la bullada investigación del caso Exalmar, que dice relación con las inversiones realizadas por una de sus sociedades a la pesquera peruana en 2010, justo en momentos en que se desarrollaba el litigio entre Chile y Perú en la Corte Internacional de Justicia de La Haya.

Según consigna este viernes La Tercera, el exMandatario y actual candidato presidencial aseguró al persecutor que “casi un año antes de asumir la presidencia de la República, en forma voluntaria, porque entonces no había ninguna ley que lo exigiera, yo tomé un conjunto de decisiones”.

En ese sentido indicó que lo primero fue “retirarme de la administración y gestión de todas las sociedades en que había tenido participación y formar fideicomisos ciegos con todos los activos accionarios de sociedades anónimas abiertas chilenas”. Después, dijo, abrió “un proceso de ventas de las acciones de ciertas empresas como LanChile, Chilevisión y Clínica Las Condes”.

Añadió que “en consecuencia, una parte de los activos de las sociedades en que yo participaba quedaron con la figura de fideicomiso ciego, administrados por cuatro instituciones financieras chilenas (Banco Bice y las corredoras Celfin, Moneda y Larraín Vial)”.

En este punto apuntó que “la condición esencial era que dichas instituciones no podían ni debían informarme de las decisiones de inversión que ellas adoptaran y que sólo debían proveer la información estrictamente necesaria para cumplir con las obligaciones legales que me afectaban, tanto a mí, como a las empresas que habían suscrito los contratos de fideicomiso ciego, especialmente las obligaciones tributarias”.

“¿Qué pasó con los restantes activos que poseía?”, consultó Guerra, a lo que el ex Jefe de Estado contestó que “la otra parte de los activos de las sociedades en que yo y mi familia participábamos quedaron bajo la administración de un equipo profesional independiente y bajo la supervisión de los respectivos directores y consejos”.

Precisó en esta línea que “primero, a los administradores de los fideicomisos ciego que debían vender todas las acciones cuyos precios estuviesen regulados por el Estado y de empresas sensibles como AFP e Isapres y que no podían invertir recursos en ninguna de las empresas antes mencionadas y adicionalmente que ninguna posición en una empresa en particular podía superar el 2,5% del capital accionario del las respectivas empresas, cuyo objetivo era que en ningún caso la suma de las de los administradores de fideicomisos ciegos superase el 10% del capital accionario de una empresa en particular porque éste hecho generaba la exigencia de informar públicamente y, como yo no conocía las inversiones que hacían estos cuatro agentes y ellos no conocían lo que hacían los otros agentes, esta nos pareció la única forma de evitar el incumplimiento de una norma legal que consiste en que cuando se supere el 10% de la propiedad de una sociedad anónima abierta, esto debe ser informado a la autoridad”.

En otros pasajes de su declaración, Piñera sostuvo que “la otra parte del patrimonio que quedó bajo el
Profesional llegó con las siguientes instrucciones: que todas las inversiones debían ser de carácter pasivo y no controladoras y segundo que las inversiones debían ser lo más diversificadas posibles y que podrían realizarse tanto en Chile, como en el extranjero”.

A su vez, el aspirante a La Moneda aseveró que luego de ordenar todo legalmente, “yo me desligué absolutamente de la administración de las empresas situación que mantengo hasta el día de hoy. Esto ocurrió en abril de 2009, por lo que, en consecuencia, durante el período en que fui candidato y todo el período en que fui Presidente de la República no participé en la gestión , administración e inversiones de las empresas y sólo fui informado de hechos que requería conocer en mi carácter de candidato o de Presidente como por ejemplo la materialización de las ventas de empresas como Lan Chile o Chilevisión u otros hechos de carácter muy particular como por ejemplo accidentes del trabajo de personas relacionadas con esas empresas”.

Tras ser consultado por los profesionales que manejaron sus inversiones y empresas, el exPresidente manifestó que “el equipo profesional al que he hecho referencia lo lideraba Nicolás Noguera como gerente general y estaba constituido por un equipo de profesionales que fue variando en el tiempo, puesto que una de las cosas que más se incentivaban en las empresas era que sus ejecutivos jóvenes realizarán estudios de postgrado fuera de Chile y así fue que ocurrió con varios de ellos”.

Agregó que “en consecuencia, ese equipo de profesionales tomaba las decisiones de inversión en forma autónoma sujetos a las instrucciones generales a los cuales hice alusión. Con respecto a quienes participaban en la administración de los fideicomisos ciegos, esas eran decisiones que ellos tomaban autónomamente y en reserva sin que yo lo supiera, como tampoco nadie de mi familia, ni de las empresas. El mandato era una institución y no una persona en particular. Existió una suerte de consejo que supervisaba la marcha de las empresas en términos generales con especial énfasis en que se cumpliera estrictamente la normativa legal, pero no participaba en las decisiones de inversión responsabilidad que recayó exclusivamente en el equipo profesional que encabezaba Nicolás Noguera. Ese consejo lo integraron entre otras personas José Cox y Fernando Barros, quienes incluso eran directores de alguna de las empresas, consejo que se reunía trimestralmente”.

Sobre las inversiones en la pesquera, el exMandatario juró que nunca tuvo conocimiento de aquello, así como tampoco su familia: “dado que yo no participaba de la administración, gestión e inversión ni yo ni ningún miembro de mi familia participó en la decisión de realizar esa inversión que se efectuó el año 2010”.

“Por lo que he sido informado después que dejé la Presidencia de la República, esa inversión representaba un 0,5% de las inversiones totales de las empresas y gran parte de esa inversión se hizo después de marzo de 2014 cuando yo había dejado de ser Presidente de Chile”, juró.

En tanto, aseguró que se informó por la prensa de dicha información, cuando Radio Bíobío lanzó la publicación referente a ello y luego de que el diputado comunista, Hugo Gutiérrez se querellara en su contra por este tema.

En otros pasajes, Piñera aseguró que no supo el resultado del juicio en La Haya entre Chile y Perú antes de que se diera a conocer el fallo. “No era conocido ni por mi persona ni por nadie que formara parte de la defensa chilena hasta cuando se dio a conocer públicamente en forma simultánea a los agentes chilenos y peruanos que estaban en La Haya y a todo el público que seguía por televisión la lectura del fallo que se realizó en enero de 2014”, recalcó.

Respecto a la querella, manifestó que “estoy convencido que no tiene ningún fundamento, está totalmente reñida con la verdad, y sólo obedece a un propósito político de tratar de debilitar lo que entonces era una posible o eventual candidatura de mi parte”.

A su vez, advirtió que los temas de soberanía o territoriales “se tratan como temas de Estado más allá de las legítimas diferencias de la contingencia política…la Presidenta Bachelet me informó en mi calidad de Presidente electo del contenido básico y fundamental de la contramemoria que su gobierno presentó el 9 de marzo, dos días antes de que yo asumiera la Presidencia y honrando esa larga y valiosa tradición yo decidí mantener al equipo que llevaba la defensa de Chile que encabezaba el agente Alberto van Klaveren y constituido por los embajadores Juan Martabit y María Teresa Infante, como una forma de darle continuidad y eficacia a la defensa de Chile”.

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