Saltó del avión: El día en que Sergio Melnick fue el único sobreviviente de un accidente aéreo

En forma “milagrosa” escapó con vida el decano de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas, Sergio Melnick, del accidente de aviación ocurrido antenoche en la localidad de Bucalemu, a unos seis kilómetros de la ciudad de San Felipe. Ayer llegó al lugar el fiscal de aviación de Santiago, Renato Nuño, quien levantó los cadáveres y deberá establecer las causas de la tragedia. En tanto, Melnick fue trasladado a la Clínica Las Condes en Santiago, con lesiones de mediana gravedad.

“Fue un milagro. Es casi inconcebible que uno de los pasajeros haya logrado escapar de este accidente”, dijo el fiscal que asumió la investigación.

“Realmente no me imagino cómo pudo saltar o salir desde el interior del aparato cuando éste se desplomaba boca abajo sobre el duraznal”, agregó el fiscal.

En el accidente murieron ocho personas que viajaban en un avión bimotor arrendado por la empresa Aeroguayacán. El magistrado castrense formuló las declaraciones cerca de las 12 horas de ayer, tras constituirse en el lugar del accidente y efectuar los primeros peritajes.

La aeronave, un bimotor Beechcraft modelo BE-80, matricula CC-CDW, había despegado desde La Serena a las 19 horas hacia Santiago con nueve personas a bordo, cuando, por causas que se investigan, sufrió un desperfecto mecánico.

Las víctimas fueron identificadas como los pilotos Julio Cerda y Rubén Guevara; y los pasajeros Raúl Bitrán (ex-secretario general de la Universidad de Chile y fundador de la Universidad de La Serena); John Phillips y Rolf Haardt (geólogos estadounidenses de la Compañia Minera Atacama); George Strausser (gerente general de la Compañia de Aceros del Pacífico); Juan Zagayo (funcionario de la misma empresa) y Adamo Pesce (subgerente de la firma), además de Melnick, el único sobreviviente.

En la madrugada de ayer el vicedecano de la Facultad de Ciencías Económicas y Administrativas de la Universidad de Chile, Rodrigo de La Cuadra. llegó hasta el hospital de San Felipe donde se encontraba internado Melnick. “Pude entrar y conversar con él un instante. Me dijo que venia viajando en el asiento posterior del avión, parece que al lado de la puerta, cuando comenzaron a fallar los motores. Los pilotos intentaron buscar un lugar para aterrizar, pero el avión no respondió y se precipitó a tierra”.

Testigos presenciales señalaron que Melnick habría saltado desde el aparato segundos antes de que estallara o se incendiara, cayendo sobre los árboles del fundo Las Viñas, propiedad de Carlos Vekeman. Esa versión no ha sido des-cartada por el fiscal de aviación, ya que en un árbol situado a unos 20 metros del avión siniestrado, se encontró una corbata.

El fiscal estimó que lo más probable es que el avión haya sufrido un desperfecto mecánico y confirmó que en el momento del accidente intentaba descender hacia Santa Rosa de Los Andes, una pista de aterrizaje cercana al lugar.

Los restos de las víctimas fueron levantados cerca de las 12.30 horas por orden del magistrado castrense y remitidos directamente hasta la Morgue del Instituto Medico Legal de Santiago.

El lugar donde cayó la máquina presentaba en la madrugada de ayer un desolador panorama. Los cadáveres calcinados por el incendio, se encontraban dispersos junto a trozos del fuselaje, restos de ropa, documentos y efectos personales, en un radio de unos 10 metros, aproximadamente.