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Actualidad

21 de Noviembre de 2019

Guarello, durísimo con las barras que piden que no vuelva el fútbol: “Ahora son la vanguardia popular democrática e inclusiva, con tintes de feminismo y veganismo”

Para el periodista, estas agrupaciones tienen "chantajeado" al fútbol.

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Juan Cristóbal Guarello profundizó, a través de una columna de opinión, su mirada sobre la extensa petición de las barras de los equipos de fútbol para impedir el retorno de la actividad, programado para este fin de semana.

En el programa “Los Tenores” de radio ADN, el periodista aseguró que las barras tienen “chantajeado” al fútbol, léase a jugadores, entrenadores y dirigentes, de cara a la programación, luego de más de un mes de paralización, con el fin que se prolongue aquello.

“No resulta creíble que estos grupos sin ideología, dios ni ley, en menos de un mes y como un acto de magia, se hayan reconvertido en conscientes luchadores sociales cuyo único norte es la justicia, la igualdad y la dignidad. Los mismos que hace tan poco tiempo andaban a los palos en la tribuna por un simple paño y amenazando con sodomizar y balear a quien se cruzara en su camino, ahora son la vanguardia popular democrática e inclusiva, con tintes de feminismo y veganismo“, critica en la parte final Guarello aquellas peticiones.

El comunicador también hace hincapié en que una manifestación desde el estadio, tendría una caja de resonancia mayor a una que se realiza en otro lado.

“Más sospechoso es un empecinamiento en que el fútbol no se reanude ‘hasta que se cumplan todas las demandas sociales y Chile sea un país más justo’. Raro, no quieren ir a su lugar de expresión natural, donde una manifestación bien organizada tiene una resonancia infinitamente mayor que cualquier pelotera en la calle. Donde un lienzo o canto llegaría a todo el país y un acto simbólico, como taparse un ojo, sería de gran impacto“, argumenta en La Tercera.

Según Guarello, todo apunta a seguir usufructuando los recursos que deja el deporte popular. “Lo que está en juego acá, y aterrizo a los idealizadores y románticos, es una pugna de poder. Si las barras bravas ya tienen condicionado al fútbol chileno, ¿por qué no ir a por todas? Es decir, que se juegue cuando ellos decidan y sobrepasar a la ANFP y los clubes. Acogotar el fútbol. Control total. Desde ahí, todo es posible: asientos en el directorio, porcentaje de los sueldos y traspasos de los jugadores y, cómo no, una cola de los pagos del CDF“. cierra.

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