Entrevistas
10 de Febrero de 2022“Nos gustaría poder vivir del hockey”: Constanza Palma, capitana de las Diablas y la histórica clasificación al Mundial
Durante las últimas semanas la Selección femenina de hockey césped logró clasificar por primera vez en la historia a una copa mundial. En conversación con The Clinic, Constanza Palma, capitana de las “Diablas”, reflexiona sobre la clasificación y sobre la situación de este deporte en el país. “Encuentro que la situación económica ha ido mejorando, el Proddar para nosotros es un gran apoyo, sin embargo nos gustaría poder vivir del hockey y poder dedicarnos más profesionalmente aún de lo que lo estamos haciendo”, comenta la capitana.
A fines de enero de 2022, la selección femenina de hockey césped logró un hito histórico para Chile. Tras vencer a la selección de Estados Unidos, las “Diablas” aseguraron su cupo para el Mundial de Hockey Femenino 2022 que se disputará en España y Países Bajos durante las primeras dos semanas de julio de este año.
El camino ha sido largo y complejo, dice Constanza Palma, capitana del equipo, en conversación con The Clinic, donde reflexionó respecto a la clasificación y sobre la situación del hockey en Chile.
La relación de Constanza Palma (29) con el hockey es un lazo que lleva más de 20 años, y que parte cuando era una niña de siete años que vivía en Argentina con su familia. Allá, cuenta la capitana, el hockey es mucho más popular que en Chile, con mayor cantidad de equipos y jugadoras.
Los primeros partidos de hockey los vivió como espectadora, mirando a su tía chilena que solía jugar en algunas ocasiones.
“Ahí dije ‘ah, yo también quiero jugar’, y obligué a mi mamá a meterme al club de hockey del colegio. En el club del colegio se inscribía tan poca gente que lo tuvieron que cancelar, así que la obligué a meterme a un club fuera del colegio. Yo lo único que quería era jugar hockey. Ahí me metieron a un club en Buenos Aires”, dice Constanza.
“El equipo participaba en el torneo nacional de Argentina. Allá es un poco distinto porque tienes que ser un deportista federado para poder competir en un torneo nacional. Primero, cuando llegas a jugar, pasas por toda una escuelita, y desde ahí te van subiendo según tu nivel hasta que llegas al equipo principal”, comenta la capitana.
Luego de vivir unos años en Argentina volvió a Chile, a vivir a Santiago. Dejó su hogar bonaerense, pero el hockey la acompañó hasta el otro lado de la cordillera.
Una vez aquí, en Chile, cuando tenía cerca de once años, se sumó al equipo del que forma parte hasta hoy: la Selección femenina de hockey césped de la Universidad Católica. “Feliz cumpleaños al club que me ha traído más alegrías. Gracias por tantos momentos, abrazos y amistades. Ya volveremos a estar todos juntos”, escribió Constanza en su cuenta de Instagram en abril de 2021.
–¿En qué momento comenzaste a ver el hockey como algo entrelazado a tu vida?
-Yo creo que cuando entré en la selección menor, en el sub 13 o sub 12. Ahí te llaman a la selección y vas, pero con mucha gente. La primera parte era una escuelita formativa, y ahí era entrenar no más. Después, en el sub 13, tuvimos la primera competencia.
–¿Cómo fue eso?
-Me acuerdo que el entrenador ni siquiera me conocía, él era de otro club. En un partido de entrenamiento al que fui me fue muy bien, y había ido con trenzas. Le dije a mi mamá “mamá, me vas a tener que hacer trenzas de acá hasta el último entrenamiento para que se acuerde de mi nombre, sino no se va a acordar“. Ahí me dejaron para el viaje de la selección y me he mantenido en los procesos de selección
“Uno lleva tantos años que te dan ganas de hacer otras cosas”
Entre el 14 y 15 de septiembre del año 2005 se desarrolló en Santiago la V Copa Mundial Junior de Hockey Femenino sub-21, que tuvo como campeona a la selección de Corea del Sur.
En ese entonces Constanza tenía 12 años, y hoy recuerda ese momento como una etapa clave en su vida deportiva.
“Acá en Chile era poco común, pero justo cuando estaba en esa época en que o te conquista el hockey o te patea, fue el mundial junior acá, el 2005. Me tocó ser pelotera y yo rayaba con el tema. Quería ser como todas las que estaban jugando, quería estar en la selección, y ahí empezó la motivación. Ver a tu mismo país que está en un mundial, te motiva a full”, dice Constanza.
“Me acuerdo que mi mamá me depositaba a las ocho de la mañana en Manquehue, y me quedaba todo el día siendo pelotera durante todo los partidos que podían haber. Me iba a buscar después a las siete de la tarde”, agrega.
–En el equipo que clasificó al Mundial hace algunas semanas, ¿se mantienen jugadoras que conociste cuando recién entraste a la selección?
-Cuando yo entré deben haber habido unas cuatro de las que están ahora, o cinco. Va cambiando siempre, al final hay muchas que se van saliendo por distintas cosas. La Sofía, que era un exponente súper importante, se retiró por lesión, la Caro García porque quería tener guagua, y así van saliendo. Es súper desgastante estar en la selección, uno lleva tantos años que te dan ganas de hacer otras cosas.
–¿Y cómo fuiste lidiando con eso? Imagino que hay éxitos pero también costos y sacrificios, cosas personales que se dejan de lado…
-Sí, cien por ciento. Por suerte en la selección tengo grandes amigas, entonces vas a entrenar pero estás acompañada de tus amigas y tu gente cercana. Obvio que te pierdes cosas, pero por otro lado ganas mil otras. Las giras, todos los viajes… Yo fui a jugar afuera, me fui a Bélgica y Alemania. Todo lo que ganas con eso al final es impagable. Por mucho que pierdas, lo que ganas jugando hockey es demasiado. Yo creo que llega un punto en el que te lo cuestionas. Yo todavía no, gracias a Dios, pero para mí es muy importante todo lo que conlleva el hockey, es mucho lo que me ha dado. Es una manera de devolverle al hockey chileno.
–¿Cómo lees ahora, en retrospectiva, la clasificación a este Mundial?
-Yo creo que hemos ido pasito a pasito, cada vez hemos estado más cerca de clasificar a un mundial. Para el torneo pasado no pasamos a la siguiente fase por un resultado de nuestro grupo que debería haber sido de una forma pero no se dio. Siempre hemos estado ahí, a punto, pero bueno, bacán que se haya dado ahora, podría darse como no podría darse, pero es buenísimo. Yo creo que nosotros nos hemos profesionalizado mucho de cierta manera. Todas tenemos como prioridad el hockey, las que estudian no ponen clases a la hora de entrenamiento, las que trabajan piden permiso para salir en esos horarios… Todas dejan cosas al final para poder rendir al cien por ciento.
–Y tú en paralelo estudiaste…
-Sí, estudié Ingeniería Comercial y me demoré un poco, tuve que congelar varios años, porque entre medio después fui a Estados Unidos, Bélgica y Alemania. Volví, terminé, me fui a Bélgica de nuevo, pero con trabajo de ingeniera comercial, y ahora trabajo en una empresa. Soy E-commerce manager, traemos muchas marcas de triatlón y las distribuimos a lo largo de Chile, y también vendemos en nuestra página web. ¡Tuve que pedir la semana sin sueldo para jugar tranquila!
“Nosotras no tenemos tiempo ni para recuperación ni para descanso”
Si bien Constanza era quien llevaba la jineta de capitana al momento de la clasificación histórica al mundial de hockey, ella cree hoy que la capitanía es un puesto compartido dentro del equipo, donde todas las jugadoras van aportando diferentes cosas.
“La Cami Carán siempre ha sido la capitana histórica de la selección, hace muchos años, y a mí hace un par de años me habían nombrado como subcapitana. Durante todo el año pasado yo estuve lesionada y la Cami estaba embarazada y tuvo guagua. Ahí quedó Feña Flores como capitana. Volví yo, y quedé de capitana. Para la gira lo decidieron, pero siempre como una capitanía compartida, todas aportan desde su lado y la Cami me apoyó muchísimo, lo mismo con la Feña”, dice Constanza.
“Es un honor siempre ser capitana. Mi mamá me decía: ‘Qué onda la suerte que tuviste, primera vez que eres capitana y clasifican a un mundial’. Lo bueno es que nos apoyamos entre todas. Obvio que si bien hay voces un poco más de mando, son al final las que tienen más experiencia y las que tienen que liderar el tema. Tenga o no tenga la jineta yo creo que el tema de capitana, sea quien sea, se da naturalmente. Estamos todas tan seguras de lo que hemos hecho y entrenado que ahora todo se dio no más”, agrega.
Hoy Constanza cree que el hockey en Chile se está popularizando cada vez más. Obviamente no al nivel del fútbol, dice, pero le alegró ver en este último torneo a mucha gente yendo a ver los partidos. Sin embargo quedan aún tareas pendientes, asegura.
–¿Es hoy Argentina un rival clásico?
-Siempre lo ha sido, porque en todos los Torneos Panamericanos y Copa América siempre nos topamos con ellas, pero sabemos que es un equipo que está sobre el nuestro. Es un subcampeón olímpico que siempre ha estado peleando, siempre ha ido al mundial y a los Juegos Olímpicos. Nosotros nunca en la vida habíamos ido a un mundial. Es súper difícil al final comparar a los dos equipos. Ellas están por encima nuestro. Son número 3 creo a nivel mundial. Nosotros estamos en el número 18. Pero bueno, ojalá que con esta clasificación y la masificación del hockey se vaya acortando cada vez más esa brecha.
–¿Notabas muchas diferencias en el desarrollo de este deporte mientras vivías en Argentina?
-La principal diferencia es que el hockey es percibido como un deporte donde no importa la clase social. Acá yo creo que está muy estigmatizado de que es un deporte súper ABC1, que hasta el día de hoy es 80% así. Que se practica en colegios británicos, en clubes ABC1, pero creo que es algo que se está tratando de cambiar y que se ha hecho un trabajo gigante para tratar de cambiarlo, y tenemos que seguir trabajando en eso. En un club (de Argentina) hay casi la cantidad de jugadoras que hay en todo Chile. En Argentina por provincia hay infinitas jugadoras, y mientras más jugadoras tengas, más jugadoras buenas podrás sacar.
–¿Acá en Chile ustedes, como jugadoras, no reciben ninguna remuneración monetaria?
-Recibimos un Proddar (Sistema de becas para deportistas de alto rendimiento) pero que pasa a un fondo común, que lo usamos para pagar suplementos. Si alguien tiene que ir al doctor, si de repente tenemos que comprar más pelotas o materiales, etcétera. Si bien la federación se pone con cosas, a veces necesitamos otras que tenemos que pagar nosotros no más. El Proddar pasa por mi cuenta y se va directo a la cuenta de la selección. No veo esa plata. Ahora estamos tratando de repartirnos un poco más el dinero, pero alcanza con suerte para cubrir la bencina.
“Encuentro que la situación económica ha ido mejorando, el Proddar para nosotros es un gran apoyo, sin embargo nos gustaría poder vivir del hockey y poder dedicarnos más profesionalmente aún de lo que lo estamos haciendo. Pero entendemos también la situación de los deportistas acá en Chile, que quizás no es la óptima. Yo no sé si en Argentina todos los deportistas viven como viven las Leonas (Selección femenina de hockey). Yo creo que las Leonas son unas afortunadas. Si bien reciben plata por jugar en la selección, también reciben plata por sponsor y por otras cosas, y ahí se arman su sueldo. Nosotros no tenemos la misma suerte”, agrega Constanza.
–¿Por qué ha demorado tanto en profesionalizarse el hockey en Chile?
-Porque no hay plata, porque no hay empresas que quieran invertir, no hay suficiente plata para poder pagarles a todas. Yo creo que una buena medida sería que los clubes se consiguieran quizás empresas que los auspicien y que quieran invertir, que es lo que se hace un poco en Bélgica, y esas empresas son las que financian el traer jugadoras de afuera para que quieran jugar en nuestra liga y subir el nivel de la liga para lograr algo mejor.
–Cambiaría rotundamente el panorama…
-Sí, obvio que sí. Nosotras, las jugadoras chilenas, vamos al kinesiólogo y a entrenar en la mañana. Después tienes que estudiar o trabajar durante todo el día, o correr de un lado para otro en distintos trabajos y después llegar a entrenar, mientras que otros países entrenan en la mañana, se van a dormir siesta, van a hacerse masajes para recuperarse y después van a entrenar en la tarde. Obviamente que cambiaría si se profesionaliza. Se sabe que algo muy importante dentro del deporte es la parte del descanso y recuperación, y lamentablemente nosotras no tenemos tiempo ni para recuperación ni para descanso.
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