“En el celular estaba su fotografía”: padre de enfermera apuñalada reveló detalles de cómo sujetos atacaron a su hija

Patricio Álvarez, el padre de la enfermera que fue apuñalada en Las Condes, entregó nuevos detalles del brutal ataque que sufrió su hija a solo cuadras de la clínica en la que trabaja luego de haber terminado su turno.

Cabe recordar que la mujer identificada como Pola Álvarez fue agredida por dos sujetos que le propinaron once puñaladas. Tras esto, vecinos la ayudar a volver a la Clínica Cordillera para ser atendida de urgencia, quedando fuera de riesgo vital.

Ante esta situación el padre de la enfermera acusó que en las semanas previas al ataque su hija había sido víctima de amenazas y hostigamiento laboral, por lo que apuntó a una posible “sicariato” luego de que estos sujetos la intentaran matar.

El ataque

Así, en conversación con el matinal Mucho Gusto de Mega, Patricio Álvarez reveló una serie de nuevos detalles sobre cómo ocurrió el ataque en contra de su hija.

En esta línea, el padre de la enfermera detalló que esta “salió a las nueve, nueve y media de la mañana hacia su domicilio que está a una cuadra”.

“Cuando ingresa al pasaje Cayumanqui se da cuenta de que hay dos sujetos en moto, uno con un casco blanco y otro con un casco naranjo con una estrella”, añadió.

Luego de esto, relató que “ella va pasando por el lado de estos tipos a 50 metros de su casa y se da cuenta de que en el celular estaba su fotografía”.

“Eso la impresionó mucho, la asustó y corrió hasta su casa y en ese momento estos tipos la toman del cuello le empiezan a dar los estocazos que derivaron en once”, complementó sobre el ataque sufrido por su hija.

Amenazas contra su hija

Respecto a las amenazas y hostigamiento, el padre de la enfermera explicó que estas acciones comenzaron luego de que su hija fuera ascendida en la clínica donde trabaja.

“Desde ese momento, hace dos meses atrás, comenzó este bullying constante, bullying laboral con amenazas que en un principio parecían infantiles”, afirmó.

Sobre esta situación, sostuvo además que “uno los podría tomar como niñerías y ahora uno se da cuenta que debió haber tomado cartas en el asunto mucho antes”.

Asimismo, aseguró que “no era solo bullying contra mi hija, sino contra todo el personal del turno en que ella se desempeñaba”.

Finalmente, reveló que “la persona que nosotros denunciamos y de la que la clínica tiene conocimiento es una sola. Tiene nombre y apellido, una identificación clara. Los mensajes están respaldados y yo me tomé la libertad de entregar el celular de mi hija a la Brigada de Homicidios”.