Desmantelan red internacional de tráfico de armas entre Argentina y Chile: las escondían en camiones

En medio del aumento del crimen organizado en el país, un operativo policial expuso una compleja red de tráfico de armas que operaba desde Argentina hacia el territorio nacional. La investigación, fruto de la colaboración entre la policía federal argentina y la PDI chilena, se inició en abril de 2021. Sin embargo, la detención de un camionero en la ciudad fronteriza de Las Heras fue clave conocer cómo era el modus operandi para intentar consumar el contrabando.

De acuerdo con el diario El Sol de Mendoza, el detenido tenía una gran variedad de armamento oculto en la cabina de su camión. En específico, transportaba 1.500 balas de calibre 9 milímetros, 500 de calibre 38 SPL y 22 de calibre 40 S&W, junto con pistolas de las marcas Bersa, Mini Thunder, Taurus, Browning, Long, Hi Power, Pietro Beretta y Smith & Wesson, algunas con números de serie borrados. Estas armas iban destinadas a la ciudad chilena de Los Andes.

La investigación reveló que el camionero compraba las armas a bajo costo en barrios marginales de Mendoza y Buenos Aires, con la intención de venderlas a diversas organizaciones criminales en Chile. Su detención permitió a las autoridades identificar a otros miembros de la red, utilizando métodos como escuchas telefónicas y seguimientos. En tanto, el primer detenido ya fue condenado a cuatro años y diez meses de prisión.

Megaoperativo en territorio argentino

Este jueves, las fuerzas policiales de ambos países llevaron a cabo al menos 17 allanamientos en las localidades transandinas de Maipú, Guaymallén y Luján en Mendoza, y seis más en Buenos Aires. Este megaoperativo resultó en la detención de 15 sospechosos, quienes enfrentarán cargos por tráfico transnacional de armas. Durante los allanamientos, además de las armas, se incautaron drogas, numerosos teléfonos móviles y otros documentos relevantes para la investigación.

La investigación, liderada por el fiscal Fernando Alcaraz y el juez Marcelo Gárnica, dio cuenta de millonarias transferencias de dinero que los integrantes de la red recibían o enviaban a sus nexos en Chile, por intermedio de empresas remesadoras de divisas. “Esto arrojó un total de al menos 120.000 dólares. Sin embargo, ninguno de los investigados contaba con el nivel de vida acorde a esas sumas de dinero”, informaron oficialmente desde la Justicia Federal. De esta forma se identificaron los domicilios de los grupos delictivos que aportaban las armas.