Sebastián Dávalos recurre nuevamente a la justicia acusando destrucción de su vida profesional y personal: exige casi $700 millones

El exdirector del Área Sociocultural de la Presidencia (2014-2015) e hijo de la expresidenta Michelle Bachelet, Sebastián Dávalos, presentó el viernes 30 de agosto una demanda por de responsabilidad civil extracontractual e indemnización de perjuicios por abuso del derecho en contra de Gonzalo Vial Concha. La acción también va dirigida contra su sociedad, Inversiones Graneles Sur.

En total, Dávalos pide una indemnización de $683.500.000 por los perjuicios por la querella criminal que interpuso el empresario. Este monto contempla un lucro cesante de $483.000.000, que es el monto que habría dejado de percibir durante los ocho años que duró la investigación y la pérdida de oportunidades laborales. Se suman $120.000.000 solicitados por daño moral, que busca compensar el “sufrimiento emocional, la ansiedad y la pérdida de confianza que experimentó durante todo el proceso judicial”. Por último, solicita el reembolso de $80.500.000 por concepto de costas judiciales de sus abogados. Según él, los costos fueron tan altos que tuvo que vender sus inmuebles para cubrirlos.

Una de las cosas que acusa el demandante es que, durante el proceso, fue sometido a distintas medidas cautelares que limitaron su libertad, que afectaron su vida profesional y personal. Además, su reputación habría sido destruida por el escrutinio público, señaló una publicación de La Tercera.

“En cuanto a su honra, por la gravedad de la naturaleza de los delitos que se le imputaban, fue sometido a un constante y despiadado escarnio público, que destruyó su vida personal y profesional, viéndose expuesto a un continuo asedio de críticas y juicios mediáticos que parecían no cesar nunca, contribuyendo a un desgaste significativo y una exposición pública que sobrepasó cualquier noción de justicia.”, señala la acción judicial.

“Esta demanda busca reparación”

Dávalos detalló, en declaraciones con La Tercera, que “está demanda lo que busca es reparación. Estamos hablando de una causa que duró más de 8 años y que como el mismo fallo señala, no tiene pruebas suficientes ni para justificar que se este frente a un delito”.

“En todo este periodo el daño ha sido a todos los niveles. Personal, familiar, patrimonial, entre otros, para que después el querellante desista de manera unilateral y no se haga cargo de todo el daño generado. Gonzalo Vial no ha ofrecido ni una disculpa siquiera. Se le contactó vía carta y no fue capaz ni de responder. Eso demuestra que no hay interés en reparar el daño causado. Yo fui absuelto por 3 a 0 y la fiscalía ni siquiera apeló. Entonces, ¿por qué Gonzalo Vial cree que puede usar a la justicia chilena que ya está sobrecargada con causas que más parecen un capricho? Lo que corresponde es que Gonzalo Vial asuma su responsabilidad y se haga cargo de todo el daño causado“, sostuvo.

“Gonzalo Vial puede haber llegado a un acuerdo con Caval, pero yo no soy socio ni parte de Caval, yo no llegue a ningún acuerdo con él, porque sabía que íbamos a haber en un juicio. Su abogado también lo sabía y estaba preocupado justamente de las acciones civiles que podíamos tomar una vez finalizado el juicio. Ese acuerdo lo firmo Gonzalo Vial con Natalia Compagnon y Mauricio Valero a mis espaldas y yo solo me enteré de su existencia en una audiencia. No puede alegar ahora que él no sabía, si yo no firme ese acuerdo y él tiene copia del mismo”, añadió.

Las otras demandas y querellas de Dávalos

Esta no es la primera vez que Dávalos recurre a la justicia. En febrero de este año, reactivó una demanda contra Canal 13 por la indemnización de perjuicios que presentó en 2018, exigiendo más de 3 mil millones por injurias hechas por el personaje de Daniel Alcaíno, Yerko Puchento. Por estas declaraciones dijo que perdió una serie de contratos, que justifican el monto solicitado.

En enero de 2018, luego de que la Corte de Apelaciones de Rancagua acogiera el sobreseimiento definitivo de Sebastián Dávalos del caso Caval, señaló: “Tres años han pasado y hasta el día de hoy no he sido formalizado, menos aún acusado. Lo paradójico es que pese a encontrarse la causa cerrada, la Fiscalía mantuviera el porfiado afán de negarse sistemáticamente a mi sobreseimiento”.

A ello agregó que no le sorprendería que “la muy corrupta Fiscalía, haciendo uso de la nomenclatura utilizada por el fiscal nacional, intente formalizarme por un delito inexistente a modo de represalia”. En ese contexto, dijo que iba a añadir una querella por filtraciones de la investigación en contra del fiscal Emiliano Arias.

Otra querella que anunció fue en junio de ese mismo año. Esta vez en contra del exsubsecretario de Minería, Pablo Terrazas, y los diputados de Renovación Nacional, Diego Paulsen y Marcela Sabat, en el marco de las denuncias dichas por las autoridades por el caso Caval. En ese entonces, el hijo de Bachelet criticó que se le hayan imputado delitos sin tener pruebas.

En noviembre de 2018 se querelló contra el exministro del Trabajo Nicolás Monckeberg. Esto porque cuando este era diputado habría vinculado a Sebastián Dávalos con los negocios de la empresa Caval, específicamente por los delitos negociación incompatible y tráfico de influencias.