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6 de Noviembre de 2024Cuál de los dos se ve más feliz en redes sociales: por qué hay ex que compiten por verse mejor que el otro después de terminar una relación de pareja
A veces hay personas que sienten que "bloquear" a una ex pareja de redes sociales puede ser una jugada agresiva. O que el "contacto cero" no es necesario. Tarde o temprano, uno de los dos va a empezar a subir fotografías de su nueva vida y de las actividades que está haciendo con amigos y sin su ex pareja. Quién sube más fotos felices después de una ruptura se ha transformado en una competencia. ¿Por qué hacerlo? "Las personas proyectan aspectos idealizados o cuidadosamente seleccionados de sus vidas en función de quienes observan", explica Yerko Koscina, sociólogo especialista en tecnología y sociedad.
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Adela (32) esperaba acostada junto al teléfono esperando a ver si su ex subía fotos con otras personas después de que terminaran. Había pasado una semana desde el quiebre, ella se lo había llorado todo y no habían vuelto a hablar desde entonces. “¿Esas actividades las planeó para olvidarse de mí? ¿Iban a pasar igual si seguíamos juntos? Me preguntaba todo el rato si estaba pensando en mí o no”, recuerda.
Michelle Pollman, psicoanalista relacional y directora del centro de terapia de parejas Al Alma, cuenta que ese escenario es algo común. “Antiguamente tu terminabas con alguien y quedaba todo dentro de la fantasía. Hoy día se quiebra un vínculo pero independiente del término, yo me sigo vinculando. Tal vez no afectivamente, puede ser de otra forma. Una forma incluso obsesiva, revisando si está en whatsApp, ver si subió algún posteo, ver dónde está, con quién está”, dice.
Adela recuerda que eso estiró su duelo tras el término. “Verlo viajando y pasándolo bien con sus amigos y gente nueva me mataba. Mis amigas tuvieron que sacarme el celular al frente mío y borrarlo y bloquearlo de todo. Solo cuando borraron hasta su número, logré empezare a vivir el duelo realmente”.
Es la forma en la que las redes sociales han cambiado la forma de terminar una relación.
Mientras uno sufre, el otro, al mostrar públicamente que ha superado la ruptura, busca una forma de auto-compensación. Pero también, según los especialistas, puede tratarse de las ganas de influir en las emociones del otro, generando envidia, sorpresa o arrepentimiento.
“En la teoría de la Ciencia, Tecnología y Sociedad, este fenómeno puede entenderse como una “performance” de bienestar, que busca un efecto en el observador, en este caso, la ex-pareja, utilizando la visibilidad y el alcance de las redes sociales”, explica Yerko Koscina, Magíster en Ciencia, Tecnología y Sociedad de la Universidad Alberto Hurtado.
“La ‘performance´en redes sociales, se convierte en una representación constante de identidad y emociones, ya que se limita a lo que los individuos deciden compartir, creando una narrativa que no siempre refleja la realidad completa”, continúa.
En este escenario, las personas proyectan aspectos idealizados o cuidadosamente seleccionados de sus vidas en función de quienes observan. “Este fenómeno es conocido como ‘interacción parasocial’, donde las personas construyen una conexión emocional basada en una ilusión de reciprocidad”, agrega.
Hoy se cumplen exactamente un año y medio desde Adela que terminó con su ex. No habla con él hace 11 meses, no sabe nada de su vida, tampoco tienen amigos en común que le puedan contar cómo está. Pero ayer, una notificación que jamás se hubiese imaginado rompió su racha.
“Estaba almorzando con mis compañeros de trabajo cuando mi celular se iluminó. Era una notificación de Uber. Sí, de Uber. Decía que mi ex quería compartir el recorrido de su viaje conmigo. Rarísimo”, cuenta. “No aguanté la curiosidad. Literalmente no sabía nada de él hace mucho tiempo y no había forma de contactarnos. Así que la abrí”.
En el mapa de la aplicación, apareció que su ex le estaba compartiendo el recorrido de un Uber desde Florianópolis en Brasil. El viaje duraba 11 minutos y lo llevaba de un restorán hasta una posada, probablemente el lugar donde se estaba alojando. Eran las 13:30 de la tarde en Santiago, la misma hora que en la localidad brasileña.
“Le pregunté a mis compañeros qué creían que estaba pasando. Si está de vacaciones y estaba tomando a esa hora, podía ser que se le hubiese apretado el botón por accidente en una borrachera. Pero todos, creyeron que en realidad estaba tratando de llamar mi atención de la única manera que podía. Una de mis amigas me dijo: ‘Quizás quiere mostrarte que está en Florianópolis pasándolo increíble’. ‘¿Pero un año y medio después?’, le respondí confundida”, cuenta hoy.
Uber no es una red social. Lo que le pasó a Adela evidencia como, incluso cuando Instagram no está disponible para ver qué está haciendo el otro -porque lo bloquearon-, el impulso de mostrarle a una ex pareja lo que se está haciendo, puede llegar a esos extremos.
Qué busca realmente el que compite por mostrarse bien en redes sociales
Según los especialistas, las redes sociales ofrecen un escenario ideal para proyectar una versión mejorada o idealizada de la propia vida, donde cada publicación se convierte en una “prueba” de superación, éxito o bienestar.
Pero si quien ve los posts está tratando de hacer un proceso de superación real de la relación que se quebró, Pollman explica que viendo este tipo de contenido puede provocar que “construya una interpretación de que la relación no era tan importante”.
Todo puede ser parte de una fantasía en redes sociales. “Si yo quiero mostrar que estoy. muy bien a pesar de que no lo estoy, es una forma de esconder el dolor”, explica Pollman. “Quien realmente está bien no lo publica, solo lo está”, dice la psicóloga.
En contraste, desde una perspectiva de validación social, los “likes” y comentarios positivos refuerzan el sentido de que uno está “ganando” la ruptura”. “Esta competencia también está influenciada por una cultura digital que promueve la comparación y el éxito aparente”, dice Yerko Koscina. “Así, una persona puede ver en la exhibición de una vida “mejorada” una forma de demostrar públicamente su capacidad de resiliencia. Todo, mientras prolonga la conexión a través de la competencia en un escenario digital accesible a todos”, concluye.