Secciones

The Clinic
Buscar
Entender es todo
cerrar
Cerrar publicidad
Cerrar publicidad
pérdida de memoria cerebro sin recuerdos

Tendencias

15 de Noviembre de 2024

El estrés crónico puede alterar la memoria a corto plazo: científicos comprueban por qué hay amnesia después de un evento traumático

¿Problemas para recordar algo cuando hay mucho estrés? Un estudio publicado hoy en la revista Nature reveló como unos científicos canadienses comprobaron que el estrés crónico está directamente ligado a la pérdida de memoria o de recuerdos a corto plazo. Juan Pablo Mansilla, neurólogo especialista, explica lo que pasa en el cerebro y si es que estos recuerdos se pueden recuperar. "Lo importante es no esperar a estar desbordado por el estrés".

Por
Compartir

Un estudio publicado en la revista Nature habla sobre cómo el estrés altera la formación de la memoria. En particular, los recuerdos de acontecimientos aterradores.

“El estrés crónico tiene un impacto directo en las conexiones neuronales, especialmente en las que están relacionadas con la memoria en el hipocampo“, explica el doctor Juan Pablo Mansilla, neurólogo de del Hospital Carlos Van Buren y de CLINIT.

Producto de esto, ocurren dos consecuencias de manera paralela pero que terminan por conectarse. La primera, según Mansilla, es que “cuando estamos bajo estrés, se libera cortisol. A niveles elevados y de manera sostenida puede producir toxicidad a las neuronas del hipocampo. Esto pasa que las neuronas sean menos adaptables a distintas situaciones y por lo tanto, menos adaptables a poder almacenar nuevos recuerdos”.

Luego el estrés crónico genera una alteración entre el hipocampo y la corteza pre-frontal. “Ésta es la parte que está encargada de que yo ponga atención y me pueda concentrar. Para la memoria, esa conexión es fundamental”, explica Mansilla.

No todo estrés afecta inmediatamente la memoria

Existen distintos tipos de estrés y por lo tanto, distinta cantidad de liberación de cortisol en el cuerpo que puede afectar la memoria a corto plazo. Pero hay personas que son más susceptibles a algunos tipos de estrés.

“Esto va a depender de las experiencias vividas y de la resiliencia de las personas”, dice Mansilla. “Puede haber un evento traumático que genera un estrés agudo o intenso. Es como lo que muestran en las películas: cuando una persona vive algo muy fuerte, produce una disociaciones donde hay una amnesia temporal del evento. Eso, en contextos de repetidos estreses agudos, el cerebro tiene su sistema de atención muy parcial”.

Como el l estrés crónico puede ser el resultado de la exposición de una persona a un evento traumático, los científicos probaron cómo se alteraba la amígdala poniendo a prueba la memoria de una serie de ratones. Unos sometidos a estrés y otros que no habían pasado por algún evento traumático.

“Los recuerdos están empaquetados en grupos de neuronas, llamados engramas, que están activos cuando se forma un recuerdo”, dice el estudio. Los científicos canadienses, observaron si el estrés altera la formación de engramas y se centraron en una región del cerebro llamada amígdala, que está implicada en la respuesta al estrés y a las emociones.

Así, comprobaron que los que estaban estresados olvidaron cómo distinguir una serie de amenazas que podrían haber aprendido a evadir, tras haber vivido un evento traumático.

¿Se pueden recuperar esos recuerdos perdidos?

El equipo pudo revertir los efectos del estrés en la formación de la memoria de los ratones con un medicamento: la mifepristona, usado para interrumpir el embarazo o abortar. “Este medicamento permitió que los ratones estresados ​​recordaran de la misma manera que lo hacían los ratones no estresados”, dicen los investigadores.

Pero advierten que también hay efectos secundarios más allá del cerebro y solo permiten recuperar la memoria si se administran en el momento en el que se crea un recuerdo en el cerebro. “Es poco probable que sean útiles en las personas”.

¿Podría un ser humano recuperar esos recuerdos perdidos por el estrés? “Depende de qué tanto tiempo llevaban esos recuerdos almacenados”, dice Mansilla. “El estrés va a haciendo que la memoria inmediata o reciente vaya de a poco perdiéndose. Pero la memoria a largo plazo suele afectarse mucho menos”.

Para ejercitar y proteger la memoria, el especialista recomienda “hacer ejercicio físico de manera regular. Disminuye los niveles de estrés, aumenta la formación de hormonas beneficiosas, funciona mejor el cerebro y sumado a la disminución de cortisol, va a ir mejorando su plasticidad neuronal”.

En caso de que la pérdida de memoria haya sido por un evento traumático, “la forma de recuperar los recuerdos es haciendo psicoterapia o mindfulness. También, hay técnicas de estimulación cognitiva con juegos mentales que son más fáciles de hacer. En caso de traumas, hacer terapias cognitivo-conductuales o la terapia EMDR puede ser útil en estos casos”.

Otra cosa fundamental es el sueño. Aquí, es fundamental distinguir la pérdida de memoria de la pérdida de concentración. “El estrés puede estar generando una especie de pérdida de memoria que en realidad no lo es. Se trata de que no estoy atento en lo que estoy haciendo y por eso no puedo almacenarlo en mi hipocampo”. Por eso, según el especialista, dormir es clave para consolidar los recuerdos porque la concentración en el día va a estar mucho más activa”.

Comentarios

Notas relacionadas