Por no cumplir normativa: concejal de Ñuñoa pide pronunciamiento a Contraloría por llegada de Emilia Ríos al Gobierno

Revuelo ha generado en el concejo municipal de Ñuñoa la salida del municipio de la ahora exalcaldesa de la comuna Emilia Ríos (Frente Amplio).

El viernes, la dirección de comunicaciones de Presidencia informó el nombramiento que hizo el Presidente Gabriel Boric del nombre de la exjefa comunal frenteamplista, que renunció a su cargo durante la semana pasada. En esa instancia, el Mandatario la nombró como nueva líder de la Subsecretaría del Deporte, en reemplazo de Antonia Illanés, quien asumió la labor administrativa del Palacio de La Moneda.

Sin embargo, rápidamente se objetó el nombramiento de Ríos por parte de algunos. ¿El motivo? la justificación de la renuncia unilateral que hizo al municipio, acogiéndose a uno de los puntos bajo el cual puede desligarse de la municipalidad sin requerir el visado del concejo municipal.

Y es que la ley establece cuatro puntos para que un alcalde cese de su cargo: pérdida de la calidad de ciudadano; inhabilidad o incompatibilidad sobreviniente; remoción por impedimento grave —relativo a notable abandono de deberes o probidad—; y renuncia por motivos justificados, aprobada por dos tercios del concejo municipal.

Esta última es la que, si se tratase de una renuncia motivada para disputar cargos de elección popular, no necesita de la aprobación de los concejales. Y eso fue a lo que optó Ríos, quien mediante una carta comunicó su decisión expresa de competir en los comicios del próximo año.

No obstante, con el nombramiento de Boric a Emilia Ríos alteró el curso de lo que había señalado en el escrito . Y, por lo mismo, generó el cuestionamiento posterior, el cual ahora considera la solicitud de un pronunciamiento de la Contraloría General de la República.

Esa solicitud hizo el concejal Germán Sylvester (RN), quien advirtió lo señalado y cuestionó que “la renuncia de la exalcaldesa Ríos es improcedente para el cargo que finalmente asumió”.

Por lo anterior, explicó, es que solicitó que la contralora Dorothy Pérez es refiera a ello y “fiscalice la validez de esta renuncia, así como la declaración de nulidad de todos los actos administrativos que ocurrieron entre la aceptación irregular de su renuncia hasta el nombramiento de un nuevo alcalde en ejercicio”.

Y concluyó: “Los vecinos de Ñuñoa no pueden aceptar una falta de respeto como esta“.

Para Alberto Precht, abogado especialista en transparencia, lo ocurrido con Emilia Ríos es una situación “jurídicamente curiosa”.

En todo caso, argumenta que la propia exalcaldesa podría argumentar que su nombramiento como subsecretaria responde a un hecho “sobreviniente posterior a su renuncia para poder postular a un cargo público, pero es curioso que esto ocurra con pocas horas de diferencia”.