Ejecutivo español llega a la cúpula de Telefónica Chile tras renuncia de histórico CEO y en medio de rumores de venta

A partir del próximo 1 de junio, Juan Vicente Martín Fontelles será el nuevo presidente y CEO de Telefónica Chile -que funciona bajo el nombre Movistar-, en reemplazo de Roberto Muñoz, quien, de acuerdo a la compañía, dejó la organización tras 25 años para asumir nuevos retos profesionales.

“El nuevo presidente destaca su compromiso con la creación de valor sostenible para la empresa, el desarrollo y crecimiento del talento, así como el acompañamiento en los procesos de transformación digital de los clientes”, indicó en un comunicado Telefónica Hispam.

El sucesor de Muñoz ha estado ligado al grupo Telefónica desde 1995, periodo en el que ha ejercido como director de B2B.

“Dentro de sus retos al frente de la compañía destacan mantener la visión estratégica de Telefónica y proteger su liderazgo como el principal operador integrado de Chile, en medio de una fuerte competencia”, comunicó la compañía.

La paulatina salida de Telefónica de América Latina

El ajuste en la directiva de Telefónica Chile se enmarca en los rumores de venta de la compañía. Cabe recordar que el grupo español ha ido vendiendo paulatinamente sus operaciones en América Latina y concentrándose en aquellos mercados que considera estratégicos para su futuro.

Hace una semana Telefónica cerró la venta de su filial en Uruguay a Millicom por 440 millones de euros, que se suma a su desinversión en Argentina en febrero pasado, avaluada en US$1.245 millones. Un mes más tarde se fue de Colombia, y también anunció la venta simbólica de su filial en Perú.

Pese a que respecto de Chile no existe todavía una definición concreta, a diferencia de lo que ocurrió en países vecinos, la sociedad española divulgó una inyección relevante de recursos por US$140 millones, para renovar la red 5G de Movistar a lo largo del país.

Eso sí, a mediados de mayo, el medio hispano El Confidencial informó que la empresa habría contratado como asesor a Citibank para vender su negocio en Chile. De acuerdo a lo recabado por el medio ibérico -que citó fuentes del mercado bajo reserva- la transacción reportaría a la multinacional unos US$1.100 millones.