“El presupuesto es lo que tuvimos que afrontar, pero vamos por reformas mucho más profundas”

Ex presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Concepción y ex encargada del área estudiantil de la JJ.CC., Karol Cariola (24 años) tomó las riendas de la juventud de su partido renunciando a su pega en una clínica y abocándose 100% a su nuevo cargo político. Matrona de profesión, cuenta que fue una sorpresa todo lo que ha ocurrido con el movimiento, pero que venían trabajando en él hace mucho tiempo por lo que las demandas sólo fueron “cubiertas por los medios para que llegaran a las casas”.

Con la discusión y próxima votación del presupuesto para el Mineduc este 2012, dice que considerarían un avance lograr mejores condiciones para la educación pública, pero en ningún caso es la meta propuesta. “Después de esto vamos por el cambio de modelo”, cuenta.

¿Cuál es el rol de ustedes en la discusión del Presupuesto?

El movimiento social ya hizo todo un esfuerzo para llegar a un acuerdo con el Ejecutivo, hubo una abertura a integrar una mesa de diálogo a pesar de presentar cuatro propuestas de GANE con disintos nombres y no fueron capaces de asumir lo que los estudiantes y la mayoría de la ciudadanía pide. En este momento, yo creo que las conversaciones ya se cerraron. Ellos cerraron las puertas y el movimiento estudiantil igual trató de entenderse a pesar de la represión, de no dejar marchar por la Alameda, del ninguneo, las contradicciones entre ellos y del ridículo de Piñera hablando en la ONU de lo lindo del movimiento estudiantil. A pesar de todo eso, los jóvenes le dieron la oportunidad de negociar y el gobierno no lo supo aprovechar.

¿Dejaron todo en manos de los parlamentarios?

Lo de estos días tiene una única vía posible que es el poder legislativo. Pero las demandas de este movimiento son tan profundas que no pasan por una reforma del presupuesto. Eso puede significar un avance y efectivamente dar avances a aportes basales, de vías hacia la gratuidad, si es que se consiguen, nosotros como juventudes comunistas lo vamos a catalogar como un avance. Sin embargo, el triunfo político de este movimiento social no se va a solucionar con esto. Limitarlo al presupuesto es desconocer todo lo demás.

Es la “batalla” más próxima

Sí. Mira, lo vamos a considerar un avance, pero no es la meta. Los cambios estructurales pasan por otro tipo de transformaciones donde nosotros creemos que hay que hacer transformaciones profundas sobre cuál es el rol del Estado en cuanto a la educación.

Ustedes como PC tienen a tres representantes dentro y ahora, la oposición completa en bloque votando “por ustedes”.

Es que esto hay que tomárselo con madurez porque en el momento de votar hay que tomar decisiones concretas. Efectivamente nuestros parlamentarios no tienen la capacidad por sí solos y por eso los sectores de oposición que se han manifestado por el motivo que sea, ya sea por populismo, por querer aparecer o porque están convencidos, y después de manifestarse a favor nuestro este es el momento en el que tienen que actuar según lo que han dicho. Hay que pedirles actos concretos. Lamentablemente no están los estudiantes para votar ahí, pero estaremos pendientes de lo que pase.

Al final de estos procesos siempre hay una foto con los dos bandos con las brazos en alto. ¿Están dispuestos a sacarse esa foto?

Por supuesto que no. Nosotros creemos que es un avance, que es necesario porque es la forma de legislar. Lamentablemente es la forma política que tenemos en el país y para esto necesitas los votos de otras organizaciones. No podemos desconocer los esfuerzos que se han hecho y debemos tener madurez para saber que si hay un mejor presupuesto eso es un avance, porque este movimiento no debe sentirse perdedor y todos sabemos que el próximo año seguiremos empujando para conseguir el cambio al modelo.

La Jota 2011

¿Cómo han vivido el proceso este año con las movilizaciones? Parecen ser el único partido sin crisis de legitimidad.

Hemos vivido un crecimiento este año en términos políticos muy potente, de un gran crecimiento de la Jota en términos orgánicos. Nos hemos nutrido mucho del proceso de movimiento social y que hemos sido un aporte a los debates. Antes de empezar las movilizaciones nosotros desarrollamos nuestro encuentro nacional universitario, donde debatimos y discutimos bastante de las proyecciones de este proceso para este año.

¿Fue una sorpresa lo que ocurrió?

Claro que sí, para todos ha sido una sorpresa. Nunca pensamos que podía ser tan grande como lo que ha ocurrido, pero esto ha fortalecido nuestras convicciones porque también de cierta forma discutimos, debatimos y trabajamos duro para eso.

Todos los demás partidos políticos están en crisis por la escasa atención de los jóvenes. ¿Ustedes viven algo distinto con el movimiento estudiantil?

En general hay un desgaste de apreciación a los partidos políticos y los espacios de representación, no es algo sólo de Chile. Acá se ha abusado en profundizar un sistema económico y político claramente segregador, que aumenta las desigualdades sociales, privatiza servicios básicos, desmejora las condiciones laborales y eso permite que la gente critique a las coaliciones que han gobernado los últimos años. Es natural que pase cuando se pasan 4 meses discutiendo por el sueldo mínimo y la diferencia entre la Concertación y la Alianza es de 4 lucas.

Pero a ustedes no les ocurre eso.

Mira, como dato, en poco menos de un año hemos crecido al triple de lo que era la estructura nacional. Mucha gente se ha querido vincular a nuestra organización. Es que nosotros como partido y juventud particularmente, nunca hemos dejado de hacer las críticas correspondientes. Todos estos años hemos sido oposición, más allá de integrar listas con la Concertación para alcanzar un espacio parlamentario.

¿Y es sólo por el movimiento estudiantil?

Tiene relación, pero nosotros tenemos un desafío mucho más grande de construir un bloque juvenil que postule temas que no están representandos en la política tradicional.

¿Cómo cuáles?

Aborto terapéutico, despenalización de la marihuana, la diversidad sexual. Un elemento fundamental para nosotros como son las condiciones laborales de los jóvenes y estamos trabajando para ganarnos ese espacio.

¿De qué forma lo harán?

Vamos a llevar una batería de candidatos a distintos espacios públicos donde pretendemos representar no sólo a las juventudes comunistas sino que a todos los jóvenes que no se sienten representados y que no necesariamente militan en un partido político y que no están de acuerdo en la manera en que avanza el país.

¿Cuánto de esa expansión tiene que ver con la figuración pública de sus dirigentes, como Camila Vallejo y Ballesteros?

Efectivamente estos nuevos liderazgos han hecho que haya mayor atracción y han mostrado que los comunistas no somos los marcianos ni los mounstros que muchas veces han intentando pintar. La mayor atracción de los medios nos ha permitido mostrarnos como lo que somos: jóvenes comunes y corrientes que están inmersos den distintos espacios.

Junto con ese auge, también han recibido críticas y ataques directos a sus dirigentes. ¿Cómo las reciben?

Nosotros tenemos una historia de persecuciones. No lo digo por hacerme la víctima, lo dicen los libros y en la historia de este país ha pasado en muchas oportunidades. Bueno, hay gente a la que les molesta que le digan las cosas en la cara o que hayan sectores organizados que planteen transformaciones políticas de forma seria. En ese sentido, lo que más nos duele es que hay sectores que se plantean de izquierda y en vez de buscar unidad van por la separación. Cada vez que nos critican o nos tratan de vapulear o inventar cosas, nosotros salimos siempre con la cara en alto.

¿Cúanto les duele cuando en la calle gritan “el pueblo unido avanza sin partido”?

No nos duele, nos parece lamentable. Esa es la construcción que ha hecho el modelo en nuestro pueblo. Si hay algunos que creen que desde la organización política no se pueden plantear las transformaciones sociales que la gran mayoría está de acuerdo, nos parece lamentable que se coseche esa intolerancia. Las transformaciones se hacen con todos, no solo con los sectores no militantes. Muchos de los que gritan eso también participan en organizaciones políticas y me parece hipócrita y muy lamentable.