Comisión Interamericana de DDHH pide a Cancillería que informe sobre robo a periodistas de investigación

El pasado 19 de diciembre la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) envió un documento al ministro de Relaciones Exteriores, Alfredo Moreno, donde le solicita que informe respecto del robo que sufrieron los periodistas Cristóbal Peña, Mauricio Weibel y Javier Rebolledo, como también el amedrentamiento a los profesionales Carlos Dorat y Pascalle Bonnefoy, esta última colaboradora del New York Times. Todos tienen algo en común: han escrito libros relacionados con los crímenes cometidos durante la dictadura militar.

De acuerdo a la comunicación –que publica íntegramente The Clinic Online- la petición fue formalmente enviada a Chile por Catalina Botero, la relatora especial para la libertad de expresión de la instancia internacional.

Básicamente, la CIDH requiere la información respecto a las medidas adoptadas a favor de los profesionales y los posibles responsables. En la misma línea inquiere también la actualización de los datos conforme vaya tramitándose la investigación que lleva la Fiscalía Centro Norte.

En la Cancillería el documento de la CIDH provocó preocupación. Si bien es cierto la instancia reconoció las medidas adoptadas por el Ministerio del Interior, en torno a otorgarle protección a Weibel, condenar los hechos y que la justicia actúe, lo cierto es que la posibilidad de que ex agentes de la dictadura o funcionarios activos estén detrás de los hechos, provocaría una fuerte mella a la imagen democrática de Chile.

Por esta razón el pasado viernes en la oficina del subsecretario del ramo Alfonso Silva Navarro, se convocó a una reunión multisectorial para coordinar la respuesta a la CIDH.

Al encuentro concurrieron el representante de la cartera de Justicia Milenko Bertrand, Juan Pablo Crisóstomo de la División de Derechos Humanos del Minrel y Luis Petit, jefe del Sistema Interamericano de la secretaría de Estado. Al encuentro debía llegar con información relevante, el nexo de la cartera de Interior, Alfonso Palacios, pero brilló por su ausencia.

Fuentes de justicia comentaron que la ausencia no cayó bien al subsecretario Silva, quien habría hecho un llamado a su par de Interior, Rodrigo Ubilla para apurar las gestiones y así entregar una respuesta a la CIDH.

Hay que recordar que a Weibel, quien es corresponsal de la agencia alemana DPA, le fue robado a mediados de diciembre, primero su auto, posteriormente tres computadoras desde su casa en La Reina, donde asegura guardaba información sobre una nueva publicación, distinta al libro “Asociación Ilícita” que publicó recientemente.

El otro que sufrió la sustracción de un disco duro donde guardaba una nueva investigación periodística fue Javier Rebolledo, autor del texto La Danza de los Cuervos, que relata la historia de Jorgelino Vergara, quien fuera el “mocito” de Manuel Contreras, el jefe de la DINA.

Por último, Cristóbal Peña -autor del libro Los Fusileros- sufrió la manipulación de su PC, luego que forzaran la entrada a su departamento.

Actualmente, la Fiscalía Centro Norte mantiene abierta una investigación para dar con los responsables, mientras que la Corte de Apelaciones de Santiago espera los informes de Carabineros, la PDI y la ANI, antes de resolver un recurso de amparo presentado por los profesionales.

Lea el documento enviado por la CIDH