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Cultura

9 de Noviembre de 2016

Encuesta Top: Artistas agarrados de las mechas por centro de arte contemporáneo en Cerrillos

El ministro Ernesto Ottone fue el primero en desatar la polémica cuando anunció que el Centro Nacional de Arte Contemporáneo de Cerrillos, albergaría obras realizadas a partir del año 1967. Al poco rato se comenzaba a incendiar la pradera artística. Justo Pastor Mellado, Francisco Brugnoli y Juan Domingo Dávila fueron los primeros en echarle leña al fuego. Luego se sumaron otros artistas defendiendo con garras el proyecto y la labor de su curador, Camilo Yañez. Más allá de la discusión del año de corte, la pelea ha servido para que los artistas saquen sus trapitos al sol y revelen las luchas de poder y egos indomables del mundo artístico. Contactamos a varios para que nos dieran su opinión sobre el trasfondo del asunto. Pero nadie se pone de acuerdo. El pelambre, lejos de disminuir, arde en llamas.

Macarena Gallo
Macarena Gallo
Por

Arturo Duclos, artista visual: “Es una bomba de humo”
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“La polémica fue instalada por Justo Pastor Mellado porque él está haciendo su campaña política para el gobierno de Piñera, no hay que olvidar que fue asesor de Cruz-Coke. A estas críticas, luego se sumaron voces como la de Brugnoli y Farriol que son una suerte de conservadurismo reaccionario. Esto es una bomba de humo para esconder intereses personales. Todas las instituciones vinculadas a las artes visuales en Chile han sido ineficientes y cuando se genera otra opción, que viene a cambiar el paradigma, inmediatamente surge la reacción y esta ha sido destemplada y desproporcionada. Hay que hacer cambios, estamos atrasados en 50 años”.

Antonio Becerro, director de Perrera Arte: “Estamos frente a un posible Ecce homo”
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“Lo único que hace este tipo de autoritarismo izquierdoso es correr el cerco de la tolerancia de quienes miramos el descontrol de sus acciones dando palos de ciego por sobre la ciudadanía. Más allá de las guerrillas de las vanidades, el Consejo Nacional de la Cultura, debería liderar y dirigir un debate a una consulta digna que involucre a los entendidos en la materia y mostrar abiertamente su diseño. Si no es así, estamos frente a un posible ‘Ecce homo’, la fallida restauración que intervino con fe la anciana Cecilia Giménez, porque encontró que el cuadro del Cristo estaba deteriorado. Lo peor es que ella cree que lo hizo bien”.

Bruna Truffa, pintora y artista visual: “Es un sinsentido”
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“Meter lucas en un museo que está en el culo del mundo, donde no va a ir nadie, es un sinsentido. Ese es un elefante blanco que no le veo destino. Que es un buen proyecto, que el edificio es la raja, sí, pero sabemos que en Chile la gente no se mueve por la cultura… y la división entre el Bellas Artes y Cerrillos, es curiosísima. Se toman las decisiones además de manera rara. Estas son puras luchas de poder, de los cinco pelados que están ahí tratando de agarrar puestos, y que ya sabemos quiénes son”.

Sergio Parra, dueño de galería Metales Pesados: “El Estado ha logrado que todos entren en disputa”
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“El Estado tiene mucha responsabilidad, ya que ha logrado que todos entren en disputa, lo que genera distancias, poca colaboración e individualismo en los proyectos. Mientras no se resuelvan presupuestos acordes a las necesidades reales de los museos y centros culturales, no habrá avances en el desarrollo de la calidad que todos esperamos”.

Francisco Papas Fritas, artista: “Espero que el espacio sea plural”
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“Suena prometedor, pero ya hemos visto proyectos que quedan desfinanciados y terminan en nada o viviendo del mismo Fondart, que parece ser lo único que puede hacer el ministerio de la cultura: dar fondos dentro de un mecanismo muy cuestionable. No sabemos si se conservarán las obras y bajo qué cánones. Tampoco estoy de acuerdo en el arte del amiguismo en esta estrategia de Ottone y Yáñez, ya me parece siniestro que comience de esa manera. Espero que el espacio sea plural”.

Federico Galende, teórico del arte: “Un plato poco apetitoso”
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“Lo que puedo decir de Cerrillos -proyecto del que por las dudas no formo ni formé parte- es que la curatoría de Camilo Yáñez me pareció una de las memorias más contundentes que se han trazado sobre las artes visuales en Chile durante los últimos cuarenta o cincuenta años. Con esto sirvió evidentemente un plato poco apetitoso a algunos críticos y gestores bastante mediocres. Es cierto que el Ministro no es de lo más ducho precisando datas y fechas (lo del año 67 es bien arbitrario), pero los contrataques de medios como La Segunda o El Mercurio se deben menos a esto que a todo lo que les molesta percibir en este proyecto el antecedente de un estado desarrollista que busca por primera vez en la historia reciente comprometerse con el despliegue de las artes visuales a nivel nacional. Lo de las fechas debe ser discutido en este contexto”.

Gaspar Galaz, escultor e historiador del arte: “¡No nos da el cuero!”
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“Se están pasando películas antes de tiempo, a la discusión legislativa respecto de en qué ministerio estará la Dibam le queda mucho rato. Pero lo más grave es el financiamiento. Cada gobierno no puede inventar un museo nuevo. ¡No nos da el cuero! Cerrillos es un espacio genial y está en un sector de la ciudad donde no hay ni cine, entonces que se instale ahí es fantástico, pero ¿de dónde sacamos la plata? O aterrizamos y nos damos cuenta que vivimos en un país pobre, o estamos hasta las bolas, porque no se trata de subir el IVA ni nacionalizar empresas, muchos países con eso se han ido a la misma mierda. Necesitamos planificar de manera muy inteligente el aparato cultural” .

Juan José Santos, crítico de arte: “¿Coleccionistas y políticos juntos y revueltos?
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“¿Quién o qué marca la línea de lo que es arte contemporáneo? El edificio en el que se aloja. El contenedor. ¿Quién o qué determina que de lo que hablan los artistas, críticos, curadores no sea de arte, sino de artificios? Pagar las cuentas de la casa. El contenedor. ¿Coleccionistas y políticos juntos y revueltos? Los primeros, buscan un contenedor para almacenar sus obras, y los segundos un contenedor donde cobijar, si es posible, su ego. Y eso hay que asesorarlo. Quien lo hace no sabe ni asesorar sus deudas. Del contenido queda un aroma”.

Iván Navarro, artista visual: “Mi sueño sería eliminar el Centro Cultural La Moneda”
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“Viví en Los Cerrillos hasta los 23 años y no había nada similar a un museo ni centro cultural, solo instituciones militares, fábricas y un mall, por eso cuando era chico me gustaba ir a la FISA. El Centro de Arte Contemporáneo de Cerrillos le haría un gran bien al barrio. En muchas ciudades del mundo hay grandes centros de arte fuera de los centros congestionados y colapsados. Aquí la discusión de fondo es si vale la pena apoyar otro lugar estatal para el arte contemporáneo en Santiago, porque ya tenemos varios y ninguno funciona con un nivel de excelencia. Mi sueño sería: el MAC y MNBA consolidados como un solo museo; eliminar el Centro Cultural La Moneda y la Galería Gabriela Mistral; hacer del GAM un centro especializado en performance; y el Centro de Arte Contemporáneo de Cerrillos un espacio de documentación-bodega y exposición de artistas jóvenes con énfasis en el arte publico”.

Ignacio Gumucio, pintor: “La virulencia de los comentarios impresiona”
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“La polémica dejó de ser un intercambio de puntos de vistas sobre la política cultural o la reacción a una entrevista con errores notorios dada por Ottone en un diario mala leche. Y entró al mundo del hambre insaciable por cortar cabezas. No sé qué vamos a hacer con todas las cabezas que estamos coleccionando. Personalmente, prefiero la cabeza de Yáñez sobre sus hombros que en una bandeja. La virulencia de los comentarios impresiona. Hace años que no escucho ningún comentario público tan apasionado sobre las exposiciones, las obras o los artistas. La notaría se tragó toda la energía y el intelecto de los teóricos y los artistas chilenos y es triste, porque también pasan cosas fuera de las instituciones y los ministerios”.

Jorge Cerezo, artista visual: “Hay que ser muy pata de vaca para no apoyar”
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“Como artista visual que habita esta periferia, me resisto a que una minoría burguesa oligárquica de militantes Mapu, unida a una derecha con olor a carne quemada, busquen deshabilitar un proyecto cultural del gobierno de Bachelet. Más allá de mis diferencias políticas con este gobierno, hay que ser muy pata de vaca para no apoyar una iniciativa que va en directo beneficio de la periferia de Santiago”.

Hugo Cárdenas, pintor: “Quién es Camilo Yáñez. Quién es Ottone. No son nadie”
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“Siempre que se abran nuevos espacios para el arte, es positivo. Por supuesto que no participaría ahí, no creo en el establishment del arte. Encantado iría a conocerlo, pero si me invitan a un refresco. No tengo tiempo pa perder y no me interesa el arte chileno. Justo Pastor Mellado está pataleando, aunque es amigo mío y lo quiero, es un figurón. Está bueno que agite el gallinero, pero aquí no tiene por dónde. Mellado debe querer que vuelva la derecha pa que lo apituten. Quién es Camilo Yáñez. Quién es Ottone. No son nadie. Son gente que está en el poder de la cultura, pero sus ideas no me interesan. O sea, yo creo que acá hay envidia de los que no tienen ese poder, porque acá hay plata involucrada, esa hueá no la hacen por bolitas de dulce”.

Gonzalo Díaz, Premio Nacional de Arte: “Las quejas se cambian a conveniencia todas las semanas”
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“Nadie entiende mucho este escandalillo surgido a causa de la fundación del nuevo Centro Nacional de Arte Contemporáneo de Cerrillos porque se han improvisado los asuntos polémicos que discuten su supuesto carácter museal, su función de exhibición y archivo, o su supuesta misión de resguardo de colecciones privadas. Colabora con esta confusión, el hecho de que las quejas se cambian a conveniencia todas las semanas, en cada oportunidad en que la prensa de derecha entrevista a sus ‘especialistas’ y a los coristas dispuestos a hablar por la boca. Desde el pintor Dávila que puso velas personales y subjetivas en este entierro dándole pie al Pontificio Doctor Chiuminatto, que nadie entiende desde qué lugar habla, y que la última vez sacó una voz histérica en contra de la izquierda que estaría tomándose la justicia reparatoria (¡¡¡ !!!) por propia mano, hasta el tránsfuga Mellado, de quien al menos y gracias a La Segunda, se conocen sus verdaderas motivaciones. Qué hizo como consejero del Ministro Cruz-Coke y como Director del Parque Cultural de Valparaíso en Cerro Cárcel que no fuera transformarlo en un páramo perfecto en donde penaban las ánimas, desconectándolo absolutamente de la comunidad porteña. Se suma a este enredo, una carta tan aliñada como confusa, firmada por mucha gente, que creo sería útil y conveniente responderla. Y el inefable profesor Brugnoli perdió otra oportunidad para el MAC y la Universidad de Chile de haber hecho una amplia alianza con este nuevo Centro Nacional, en vez de sentirse amenazado por su existencia. Ahora, que ya le pasó nuevamente el carro de la historia por encima, podría al menos dejar de hacerle el juego a la derecha como segunda voz del tránsfuga Mellado. En todo caso, importa poco, pues él mismo ya anunció su retiro. A todos les haría bien leer la carta del señor Aguirre, Alcalde de Cerrillos, publicada por El Mercurio.
Sin embargo, lo que sí indica esta fabricada polémica es lo mucho que queda de trabajo por delante, para asentar de manera adecuada una institucionalidad estatal, con este nuevo Centro Nacional y su sede en Cerrillos, que colabore y organice el desarrollo de las artes visuales en Chile, en todas sus dimensiones, en todas las regiones del país y en las instancias de conexión de los bienes culturales con las grandes poblaciones y los públicos especializados; con los artistas, intelectuales, críticos y gestores; con los museos públicos y privados, universidades y escuelas de arte; instancias exhibitivas, nacionales e internacionales. Se requeriría racionalizar todos los recursos institucionales vinculados con las artes visuales con que cuenta actualmente el Estado –que son muchos– dotándolos de relaciones lógicas, de espesor crítico, de una funcionalidad eficiente y de un presupuesto que contenga en su diseño los fundamentos de su propia incrementalidad proyectiva”.

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