Bajó medio cambio: Alessandri insiste en que podría cerrar el Instituto Nacional con una nueva fórmula y responsabiliza a la comunidad de su futuro

El alcalde de Santiago, Felipe Alessandri, sacó la voz tras la polémica que desató al asegurar que podría cerrar el Instituto Nacional.

En conversación con Las Últimas Noticias, el jefe comunal reconoció que esta idea surgió “al ver que los niveles de violencia no paraban” y acusó que “el colegio ya está prácticamente cerrado porque en todo mayo y junio no ha habido clases”.

Sin embargo, el edil especificó que su fórmula pasa más bien por “refundar” el colegio y aseguró que “si a la vuelta al segundo semestre (este lunes 8) no somos capaces de dialogar e ir haciendo mejoras, tendremos que evaluar la refundación del colegio y cambiarlo completamente para asegurarles educación de calidad a aquellos alumnos destacados que sí quieren estudiar”.

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La concejala del PC, Irací Hassler, acusó que en los últimos dos años el municipio ha reducido en 1.740 millones de pesos su aporte a la educación pública y aseguró que la Ley de Nueva Educación Pública impide enajenar o cerrar establecimientos.

Alessandri tomó como ejemplo el cierre del Liceo Amunátegui porque “el año pasado lo quemaron” y redistribuyeron a los alumnos en otros establecimientos”.

“Si siguen las tomas, reubicaremos a los alumnos que quieren estudiar, mientras realizamos la refundación del Instituto Nacional“, manifestó.

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En un punto de prensa al que asistió The Clinic, Valdés dijo que “las palabras del alcalde nos desilusionan. Vemos a una autoridad que creíamos que podía solucionar este conflicto, pero en realidad se la ha ido de las manos”.

Además, desafió la Ley de Nueva Educación Pública, que prohíbe el cierre de establecimientos, y aseguró que “eso es facultad del sostenedor”.

Sin embargo, precisó que “no estoy buscando el cierre; yo espero que la comunidad asuma en sus manos el futuro de este colegio, que se responsabilice de lo que está pasando”.

“Para mí sería un fracaso tener que cerrar el colegio, pero hay que entender que es imposible avanzar cuando uno tiene una contraparte que no está dispuesta a dialogar”, cerró.