Ethan: la búsqueda de la nueva masculinidad

Caminando por un calle de Santiago centro, de lejos se puede notar la cabellera de un azul intenso de Pilo, junto a Lía, una perrita que cuida temporalmente. En el segundo piso del café y con el animal en el regazo, habla de su vida como si fuera una historia que ha contado muchas veces. Explica cómo ha sido el largo recorrido buscando su identidad y que Camila, su pareja, e Ethan, el personaje drag que representa, lo han acercado cada vez más al hombre que es hoy. 

En su carnet está inscrito el nombre de Pilar Naturali, pero aclara que Pilo es su nombre actual. Fue criado en La Pintana por su madre y su abuela, con las que vivía en una parcela. A su padre lo conoció mejor cuando creció. “Mi papá se separó de mi vieja cuando yo era muy chico”, cuenta. “Si bien mi papá me quería mucho, fue una figura muy ausente igual”. Él murió cuando Ethan tenía 15 años, “así que me duró poco”, dice. “Considero a mi familia sanguínea un núcleo muy pequeño”, agrega.

GÉNERO FLUIDO

Pilo se autodescribe como un hombre transgénero no binario y mayormente queer. Afirma que desde pequeño sintió que “era una persona, que podía y puedo hacer las cosas sin importar si soy hombre o mujer”. Nunca se sintió identificado al cien por ciento con ser una mujer, pero a los 18 años pensaba que era una mujer lesbiana, simplemente. Con el paso del tiempo, gracias a sus amistades ,comenzó a informarse en temas de feminismo y teoría queer, entre otras cosas. Además, al unirse a la red social Tumblr pudo acceder a gran cantidad de información respecto a estos temas, que en Chile no circulaba. 

Sin embargo, cuenta que solo hace unos seis años comenzó a conocer términos como género binario, no binario y género fluido. Y fue ahí cuando consideró, por primera vez, la posibilidad de ser género fluido, personas que no se sienten identificadas con una sola identidad. “Ahí pensé que todo tenía sentido, lo empecé a hablar con mis amigos, leí y me informé. Después se lo planteé a mi pareja de ese entonces, pero tuvo pésima recepción. Hubo burlas y negación”, cuenta. 

Entonces cerró un capítulo y decidió seguir informarse sin comentárselo a su pareja. Con su nueva identidad continuaba sintiendo más cercanía con lo masculino, aunque sin identificarse con el hombre de barba, musculoso y pene. Y pensó: “Chuta, tal vez no soy solo de género fluido, tal vez soy una persona trans”. Y finalmente, dice concluyó que es una persona transgénero no binaria porque “no necesariamente cumplo con los estándares binarios de la sociedad, dígase hombre con pelo, músculo, la genitalidad, ser siempre rudo y decisivo. Ni ser mujer con pelo largo, maquillaje, femineidad y receptora. Sino que puedo ser ambos”.

¿Y qué opina tu familia al respecto?

-Hablaré de mi mamá, que es la persona que más me entiende. Le cuesta caleta. Ella es muy dulce y bacán, pero creo que hay algo en la relación madre e hijo que no encaja, que para ella siempre seré su hija. No sé hasta qué punto me voy hacer cargo de eso. Lo que estoy viendo con psicólogo es cómo comunicarle a mi mamá que en un momento me quiero hacer la mastectomía, que es una cosa muy precisa. Para mí implica tal vez desaparecer dos semanas con reposo absoluto en la casa después de una intervención quirúrgica y es algo que no se lo quiero ocultar. Un día le dije: “Mamá pasa esto y ha pasado por todos estos años” y a pesar de esa conversación y de lo dulce que fue en su momento, aún me sigue diciendo hija. Creo que nunca se va a meter en la cabeza decirme de otra forma. No es que no tenga fe, pero es una cuestión que va más allá de lo que puedo manejar. Para muchos es más fácil leerme como mujer, que es lo más cómodo mentalmente y a mi mamá creo que le pasa eso. Ella me apoya, pero aún no cae en cuenta de lo que eso significa. 

¿Tu respetas eso o te gustaría que cambiara?

-Sería lindo que lo cambiara, pero mi relación con ella trata de ser lo más dulce y positiva posible. Creo que si la empiezo a corregir, tal vez me equivoque, se sienta atacada o incómoda y ya hay cierta distancia entre lxs dos.

Su madre lo acompañó a la pasada “Marcha del orgullo”, caracterizado como Ethan. “Cuando la vi aparecer dije: ‘Hueón, ¡Lo cumplió! Qué bacán’ y se me hizo un nudito en la garganta. Mi mamá estaba feliz al lado mío diciéndome que todos nos veíamos bien. En ese momento pensaba que eso no lo tiene cualquiera”. 

Una búsqueda artística

Ethan Sword es un personaje drag king que nace en marzo de 2018 y Pilo manifiesta entre risas que “eso no quiere decir que sea Piscis, porque es demasiado Leo para ser Piscis”. Un mes antes de que naciera este personaje se había planteado hacerlo, cuestionándose qué tipo de drag quería hacer y qué clase de hombre quería reflejar. A Ethan lo considera, por un lado, como algo performativo y artístico; pero, por el otro, ligado a la búsqueda de género que ha tenido en su vida.

¿Qué tipo de hombre quieres que refleje Ethan?

-Es un hombre suave. Pienso que es una exageración visual de lo que yo aspiro a ser. Sigue siendo clásico en algunas cosas como estilísticas, pero básicamente Ethan es un hombre queer. Al trabajar la estética, es un hombre muy hombre en lo físico, pero en un contexto de lo no binario, de lo queer y lo femenino, que lo abraza y potencia. Estas características las entiende como parte de sí mismo y no les tiene miedo. En ese sentido, lo que quiero representar un poco es la masculinidad suave. Porque en ese caso con Ethan o conmigo pueden vibrar chicos trans o colas que son de una masculinidad distinta, no hegemónica.

¿Qué te motivó a dar el paso, finalmente?

-Creo que fue el apoyo de mi pareja, la Cami. Con ella he podido ser quien realmente soy, e ir explorando. Y para qué vamos a andar con cosas, Camila es una persona muy vinculada a lo que es la estética, moda, imagen y corrientes artísticas, por lo que desde el primer momento empezó apoyarme con cómo podría verse (Ethan). Ella facilitó las cosas, desde cómo hacerme un contorno para poder verme más como hombre, hasta cómo trabajar distintos conceptos. 

Camila explica que para Pilo la estética de Ethan “también traspasa sus propios gustos y rasgos, y es también producto de los criterios de diseño que Pilo tiene en sí mismo. Todo esto genera un total coherente, de alta calidad visual, sólido. Y eso deja marca”. 

Se conocieron a través de un grupo de amigas con las que hacen cosplay del famoso anime japonés “Sailor Moon”. Ambas tenían parejas y cuenta que “casualmente, (yo) representaba cierto personaje que en la serie era pareja del personaje que hacía ella”. Con el paso del tiempo comenzaron a conocerse y se hicieron amigas, compartían gustos como el arte, la música, el género, entre otras cosas. Hasta que en un momento, en que ambas estaban en relaciones que pasaban por crisis, “se sumaron las cosas y tuvimos que tomar cierta distancia y decir está pasando esto. Así dimos paso a una relación nueva”.  

Después de casi tres años de relación, hoy viven juntos y hace tres meses decidieron casarse. Lo llevaron a cabo en dos fases: la legal, que significó el Acuerdo de Unión Civil, y días después una fiesta, en donde pudieron celebrar con ceremonias y ritos personales. “Lo hicimos totalmente a nuestra medida”, cuenta Pilo.   

¿Qué significa ella para ti?

-Es mi refugio. Siempre le digo que es como el premio que me dio la vida por alguna razón misteriosa. Es bacán ella. Es mi principal apoyo, es mi familia, es mi mamá. 

Pilo afirma que con el tiempo ambos se han vuelto más fuertes ante las críticas. Considera que a la sociedad le falta entender que él es un hombre transgénero que se puede ver femenino. “Ahí se nota que falta un poco, porque más que sentirnos discriminadxs  directamente, es pensar ¡Qué más me falta para hacerlo visible!, cómo más me valido”. Además ambos sienten que tal vez han tenido suerte, ya que nunca han sido discriminadxs de una forma violenta, como le ha ocurrido a otras personas.

“Hay discriminaciones tan absurdas como que nos dicen: ‘Oye, pero qué estupendo que tu pareja sea mujer, así se pueden compartir la ropa’ y al final es un poquito más que eso. Ahí uno sabe qué batallas liderar”, explica. Hoy su lucha, dice, “es alcanzar la mastectomía sin dar mi vida pagando un crédito de consumo. Es como la economía versus mi identidad”. 

Tras casarse y tener un vida junto a Camila considera que su relación “más que una cuestión de intercambios, es una sociedad en realidad. Por ejemplo, para el tema del drag Camila es esencial. Sin ella podría hacerlo, pero con ella sale todo mejor”. 

¿Qué mensaje te gustaría que Ethan entregue a la sociedad?

-Diversidad y conciencia. Diversidad porque busco reflejar que la masculinidad suave es posible. Y así buscar flexibilizar el rol masculino que está impuesto en la sociedad, porque esta masculinidad es violenta para hombres, mujeres y niños. Mientras podamos ser nosotros mismos en el escenario, espero que resuene esa idea. También entregar conciencia, porque en cada uno de mis shows espero dar un mensaje, por lo menos alguna metáfora o un concepto que la gente entienda y diga: “!Wow! No es solo la estética”. Para mi la estética es una herramienta. Porque si puedo contar en forma bonita las pesadillas que están ocurriendo allá afuera, tal vez pueda lograr algo. 

(*) Este trabajo forma parte de una serie elaborada por alumnos del ramo Entrevista dictado por Alejandra Matus en la Escuela de Periodismo de la Universidad Diego Portales.