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La Convención

16 de Febrero de 2022

Los claros y oscuros de las normas de Formas de Estado que se votan en el Pleno de la CC

Montaje de foto con imágenes de banderas mapuches, un bote en el mar, un campo y una ciudad

La segunda sesión de Pleno de la convención está convocada este miércoles 16 para abordar y votar las propuestas de normas que fueron despachadas por la comisión de Formas de Estado. Acá, antes de que empiece el debate, expertos opinan sobre los pros y contras de las normas más importantes.

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El trabajo en la Convención no para. Después de largas horas de la primera jornada de deliberación y votación de normas en el Pleno, realizada ayer, este miércoles 16 los convencionales volverán a reunirse para ver las iniciativas provenientes de la comisión de Formas de Estado.

En total, esta comisión aprobó 36 normas que serán discutidas por el Pleno y votadas en general por un quórum de 2/3 de los convencionales.

Aquí, The Clinic seleccionó cuatro de esas iniciativas para someterlas al juicio de los expertos y ver sus ventajas y desventajas.

Comisión de Forma de Estado bajo la lupa: expertos escrutan normas que ya están listas para llegar al pleno

Estado Regional, Plurinacional e Intercultural

La iniciativa de tener en Chile un Estado Regional, Plurinacional e Intercultural será una de las normas que se discutirá en el Pleno y que cuenta con un amplio respaldo.

Esta norma busca reconocer constitucionalmente que en Chile coexisten más naciones aparte de la chilena y propone otorgar mayor poder de decisión a las regiones sobre políticas que afecten a sus territorios.

Tomás Jordán, abogado constitucionalista y coordinador del Observatorio Nueva Constitución, se refiere al aspecto de “Estado Regional” observando como una ventaja que “Chile deja de ser unitario y el poder centralizado en el Presidente se empieza a distribuir territorialmente como una demanda histórica de las regiones. Esa es la ventaja de lo que se propone”.

Sobre el aspecto de la Plurinacionalidad, Jordán destaca que “aquí se establece una convivencia entre el Estado y los pueblos. Esto también es una demanda histórica y una deuda histórica. Esto es recomponer las relaciones, o empezar a hacerlo”.

Pamela Figueroa plantea que la ventaja de un Estado Regional “es que responde a algo que ya venía de hace unos años, de la necesidad de descentralizar el Estado”.

Para Pamela Figueroa, politóloga y académica de la Facultad de Humanidades de la Usach, “la ventaja es que responde a algo que ya venía hace unos años, de la necesidad de descentralizar el Estado. Se ha ido haciendo paulatinamente y esto responde a la necesidad de desconcentrar el poder que se expresa en este Estado Regional sin pasar a ser un Estado Federal”.

Como desventaja de la norma, Figueroa menciona que “tiene que ver con que el diseño de la regionalización cumpla con los objetivos que se propone; es decir, que el Estado Regional logre ser una entidad que, a pesar de que van a existir estructuras nacionales, las regiones puedan tener competencias que les permitan tomar las decisiones que les son pertinentes”.

Rodrigo Correa, abogado constitucionalista y académico de la UAI, dice que “yo no creo que estas 15 regiones tengan suficientes recursos como para tener sentido económico, financiero, etc. Y el proyecto reconoce eso, porque establece la idea de solidaridad; es decir, hay algunas regiones que van a ser ricas y otras pobres, y las últimas van a depender de las ricas”.

Jordán, por su parte, observa como una eventual desventaja que “el Estado cumpliría un rol más coordinador. Con el régimen presidencial al que estamos acostumbrados y que también aprobó la comisión de Sistemas Políticos, se genera una especie de contradicción. Porque es un Presidente fuerte, pero el poder lo tienen las regiones”.

En el caso de la Plurinacionalidad, Jordán menciona que “todavía no está claro el alcance de la autonomía política de los territorios autónomos indígenas. Porque se les otorga autogobierno político, financiero y administrativo, pero no están claros los límites. El tema que podría ser desventajoso es que sin esos límites definidos se genera un desequilibrio entre el poder central, el de regiones y el autogobierno de los pueblos”.

Maritorio

Otra de las normas que llegaron desde la comisión de Formas de Estado hasta el Pleno de la Convención es la que propone que Chile sea un Maritorio.

Esta norma incluiría en la Constitución que Chile “es un país oceánico” y menciona todos los terrenos que conforman al país.

Para Tomás Jordán, “la ventaja está ligada a una cuestión de cosmovisión. Los pueblos indígenas, sobre todo los ligados al mar, ven una unidad entre territorio y mar, por lo que permite a esos pueblos su propia forma de ver el Estado”.

Pamela Figueroa afirma que “es interesante como la Convención ha ido incorporando un lenguaje donde se intenta dar cuenta de nuevos paradigmas. A mi me parece ventajoso ver como se incorporan nuevos conceptos en la Constitución”.

Para Rodrigo Correa, la idea de incorporar este nuevo lenguaje “me parece irrelevante. No le veo ni ventajas ni desventajas a un cambio de nombre de esa naturaleza”.

Como desventaja, Figueroa plantea que “cuando tú incorporas un lenguaje de esta naturaleza en la Constitución, cuando tiene un correlato internacional, eso podría dificultar la necesaria conversación que hay en el sistema internacional donde no se usa ese tipo de lenguaje”.

En eso coincide Jordán, explicando que “las relaciones que tiene Chile con las aguas están reguladas en tratados internacionales. Por lo tanto, sería un problema que la Constitución fijara ciertas reglas que permitieran, incluso, contradecir algunos tratados. Eso generaría un problema incluso a nivel internacional”.

Gobierno Regional

Una tercera norma relevante para la discusión del Pleno será la conformación de un Gobierno Regional, con varias atribuciones, como elaborar y administrar su presupuesto y tomar el control de algunos servicios públicos, entre otras.

Para Pamela Figueroa, la ventaja es que “se clarifica cuál sería el rol y las atribuciones y funciones de los gobiernos regionales”.

Jordán, por su parte, menciona como ventaja que “permite ejecutar de acuerdo a las realidades regionales las políticas públicas, que es la gran desventaja de un Estado unitario”.

Como desventaja, Jordán observa que “se atribuyen todas las funciones del poder central hacia las regiones. Por lo tanto tiene una lógica a la inversa. Cuestión que permite que haya una eventual complicación de coordinación desde la mirada nacional”.

Rodrigo Correa ve como una desventaja el Gobierno Regional ya que “uno podría ver una región que se declara monarquía, porque las únicas limitaciones son que fuera democracia y respetara derechos fundamentales”.

Rodrigo Correa es más crítico con esta iniciativa y la proyecta hacia un caso extremo -y ficticio-: “Extremando las cosas, uno podría ver una región que se declara monarquía, porque las únicas limitaciones que yo vi en el proyecto es que fuera una democracia y que respetara los derechos fundamentales, pero nadie duda que el Reino Unido, siendo monarquía, tiene democracia y respeta derechos fundamentales”.

A priori, Figueroa no ve desventajas en los Gobiernos Regionales, aunque menciona que “el detalle de cómo se relaciona ese gobierno regional con el gobierno central es algo a lo que hay que ponerle atención”.

Asambleas Legislativas Regionales

En la sesión del Pleno de este miércoles 16, también estará presente la iniciativa que propone crear Asambleas Legislativas Regionales, las que vendrían a reemplazar a los consejeros regionales y que, además, está “dotado de potestades legislativas, resolutivas y fiscalizadoras”, según se lee en la norma.

Para Tomás Jordán, “esto no me parece una buena idea”. De todos modos, asegura que, buscando una ventaja, “la adecuación de las políticas públicas se podría hacer con una regulación más concreta según las características propias de cada región”

Pamela Figueroa menciona que las ventajas de esta norma “dependen de cuáles sean las atribuciones de las asambleas. Depende de sobre qué se puede legislar. Quizás ayudaría si atiende temas más locales”.

Sobre este último punto, Rodrigo Correa plantea que “uno podría ver ventajoso que un Congreso regional atienda conflictos menores, sobre lugares patrimoniales, o regulación de algunos espacios públicos. Pero ¿y el municipio? esas son atribuciones que me hacen más sentido que vengan desde la Municipalidad, que se resuelvan de forma más comunal”.

Por su parte, Figueroa plantea como desventaja que “esto se contradice con el Estado Regional, porque las asambleas legislativas son propias de los Estados Federales, y la idea del Estado Regional era no convertirse en un federalismo”.

Sobre las Asambleas Legislativas Regionales, Tomás Jordán observa que “cada región podría tener su propia configuración político-administrativa. Entonces podrían haber muchos modelos que no conversaran entre si”.

Jordán observa como una clara desventaja que “cada región podría tener su propia configuración político-administrativa. Es decir, cada región podría ser distinta, entonces podrían haber muchos modelos que no conversaran entre si”.


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