¿Y si transitamos del Día de Internet al de la Inclusión Digital?

“Quienes no tienen conectividad, prácticamente quedan fuera de la sociedad”, declaró el ministro de Transportes y Telecomunicaciones, Juan Carlos Muñoz, en medio de la conmemoración del Día Mundial del Internet y las Telecomunicaciones. Una iniciativa ciudadana, nacida en 2005 en España, que tomó tanta fuerza que la ONU terminó declarándola una fecha de reconocimiento mundial. ¿Su objetivo? Aumentar la sensibilización sobre las posibilidades que la utilización de Internet y otras tecnologías de la información pueden ofrecer a las sociedades y economías, así como la opción de reducir la brecha digital. 

Los avances tecnológicos son evidentes y han cambiado nuestro diario vivir. Basta ver, por ejemplo, cómo trabajábamos antes de la pandemia y cómo hoy muchos han transitado hacia plataformas que nos permiten conectarnos desde cualquier lugar para una reunión. Sin embargo, estos cambios no han involucrado a la población en su conjunto. Los meros avances tecnológicos no implican una penetración completa: aquellos que no nacieron en un entorno digital ven cómo se transforma el mundo en el que crecieron siendo excluidos de los progresos y, como bien dice el ministro Muñoz, se van quedando fuera de esta nueva sociedad. 

¿Y si cambiamos el foco y empezamos a hablar del Día de la Inclusión Digital? 

Desde Conecta Mayor UC vemos con preocupación cómo los sectores público y privado migran a canales digitales eliminando sus servicios de atención presencial. La irrupción del uso de bots, por ejemplo, no considera programas de apoyo para la adquisición de habilidades tecnológicas, lo que es especialmente preocupante para los usuarios mayores. Un estudio de País Digital (2020), arrojó que en Chile sólo el 18% de las personas mayores de 80 años es usuaria de internet.

Los meros avances tecnológicos no implican una penetración completa: aquellos que no nacieron en un entorno digital ven cómo se transforma el mundo en el que crecieron siendo excluidos de los progresos y, como bien dice el ministro Muñoz, se van quedando fuera de esta nueva sociedad. 

El estudio “Calidad de Vida de las Personas Mayores durante la pandemia” (PUC, 2021) reveló que, si bien hubo un aumento significativo en el uso de smartphones para mantener contacto con conocidos, solo el 14% de las personas mayores lo usa para hacer trámites. Si consideramos las cifras del Laboratorio de Gobierno, que indica que un 86% de los trámites del Estado se pueden realizar de manera online, el problema de la brecha digital para este grupo etario se hace aún más preocupante. 

Celebramos con entusiasmo el lanzamiento del plan Brecha Digital Cero del gobierno, que sin duda será un paso en pos de la integración digital de las personas mayores. Nuestra preocupación, sin embargo, es que dada su concentración en la dotación de infraestructura, este esfuerzo se quede corto: desde un punto de vista gerontológico, es necesario avanzar hacia una transformación digital que considere a las personas mayores y sus desafíos.

*Eduardo Toro es ingeniero civil de la Universidad Católica. Se desempeña como director ejecutivo de la Fundación Conecta Mayor UC desde su nacimiento en 2020. Antes trabajó en Techo y en los ministerios de Energía y Desarrollo Social y Familia.