Entrevistas
2 de Abril de 2023Jorge Burgos: “Boric venía con un discurso irreal sobre seguridad desde la función de gobierno”
"Yo no voté por Boric, pero me parece que es loable y bueno para el país que él haya cambiado su discurso". Así reflexiona Jorge Burgos sobre el respaldo del Presidente a Carabineros. Aquí, además, asegura que "hay mucha responsabilidad de los comentarios de Boric y el FA en el pasado que influyeron en la pérdida de respeto a Carabineros".
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Jorge Burgos, abogado, exministro del Interior y de Defensa, exdiputado y dirigente histórico de la exConcertación, observa la crisis de delincuencia en país desde un nuevo cargo, como presidente de la Asociación de Mutuales que integran distintos gremios de seguridad, donde asegura que todavía está en un periodo de inducción.
Atiende el teléfono desde su casa para abordar la crisis actual, que tras la muerte de la Sargento de Carabineros Rita Olivares, generó la reacción del Congreso para suspender la semana territorial y legislar proyectos que fomenten la seguridad.
El exmilitante demócrata cristiano y actual miembro de la comisión política de Amarillos por Chile asegura que estamos en la peor crisis de seguridad del país. Para justificarlo, menciona como factor que “está muy presente un gobierno que tuvo que cambiar su discurso y sus actitudes al poco andar”. Este cambio, para el otrora diputado, tiene que ver con que “la vida es dura”.
-¿La vida ha sido dura para el Presidente?
-Sí. Y es dura en un momento de la vida en que a los 30 y tantos años, la vida es más sencilla o, generalmente, más alegre. A él se le vino una responsabilidad grande y, en materia de seguridad, mucho más grande. Boric venía con un discurso irreal sobre seguridad desde la función de gobierno. A lo mejor se podría decir que no es creíble, porque antes dijo cosas muy graves, pero creo que eso habla bien de él. Yo no voté por Boric, pero me parece que es loable y bueno para el país que haya cambiado su discurso. Se puede decir que no es por convicción, sino por pragmatismo, pero lo importante es que cambió.
El exministro Jorge Burgos también tiene una visión pragmática a la hora de evaluar al Presidente. “Es mejor y deja más tranquilo que alguien con tanto poder, como un presidente en un país presidencialista, cambie su discurso”. Sin embargo, detecta una incoherencia: “Ha tenido regresiones, la más grave fue aplicar los indultos”.
-Esos indultos estaban contemplados dentro de las promesas de gobierno, ¿eso no lo hace coherente?
-La decisión de indultar en ese momento fue incoherente. Ya el gobierno estaba en un cambio de discurso. De hecho, mi sensación es que ahí también hay un arrepentimiento de la decisión tomada. Cuando el ministro Cordero no sólo rechazó un indulto del Presidente, un indulto del mismo tipo de persona, sino que dijo que no iban a haber más indultos de ese tipo, ahí se ve el arrepentimiento.
-El 3 de octubre, cuando un manifestante cayó al Río Mapocho, Gabriel Boric dijo: “Esto es un intento de asesinato. Quienes lo hicieron son criminales”. Hoy, su postura avanzó al punto de querer acompañar procedimientos policiales. ¿Es viable un cambio de discurso tan profundo?
-Es complejísimo. Si alguien lee esta entrevista puede decir que Jorge Burgos es un ingenuo por decir que está bien que Boric haya cambiado, tienen derecho a decirlo. Sobre todo porque los polos de ambos discursos de Boric son muy recientes. Pero insisto en que creo que el cambio es positivo. Lo que está haciendo hoy día el Presidente va en la línea correcta.
-¿Y es creíble el cambio de postura?
-Es creíble. Hay que analizarlo, justamente porque viene de alguien que dijo otra cosa hace poco tiempo que era tan distinta. Pero es creíble, porque no sólo es un cambio de postura, sino también un sacrificio desde el punto de vista partidista, pensando en que algunos puedan sentirse traicionados.
“Se ha movido más hacia un gobierno socialdemócrata”
Durante la semana, el proyecto de ley que se robó casi toda la atención fue el denominado Naín-Retamal, que contiene una indicación para permitir una legítima defensa privilegiada. Jorge Burgos asegura que, en esa materia en específico, “como está hoy en día en el Código Penal está bien establecida. Probablemente los problemas que tiene son más bien en los procesos persecutorios del Ministerio Público”.
-¿El problema de seguridad pasa realmente por el uso de la fuerza policial? ¿El problema está en que carabineros no se atreven a usar su arma?
-Creo que los delincuentes, sobre todo la criminalidad organizada, la vinculada al narcotráfico, están con más armas automáticas. No creo que hayan superado en armamento a Carabineros, pero están con armas. Ya no es un revólver viejo que consiguieron en un robo. Creo que hay un elemento previo a modificaciones de leyes que puede ser necesaria, que es que hay que reponer un ambiente nacional de que, frente al delincuente, Carabineros puede actuar y no termine siempre dando explicaciones de la actuación. Tenemos que reponer la autoridad de Carabineros en la calle, en Seguridad pública y en orden público.
-¿En esa pérdida de respeto a Carabineros hay responsabilidad de las declaraciones que hacía Boric como diputado?
-Hay mucha responsabilidad de los comentarios de Boric y el Frente Amplio en el pasado que influyeron en la pérdida de respeto a Carabineros. Esa lógica de violación a los derechos humanos en todo actuar de Carabineros no permeó sólo en el Frente Amplio, sino también en la exConcertación.
-¿Pasó lo mismo con la inmigración?
-Sí. Ha sido difícil cambiar las posturas respecto de la migración. Tuvimos que recurrir a las Fuerzas Armadas en la zona norte, hay un proyecto de ley para facilitar la expulsión. Además, el gobierno se encuentra con un vecino que no colabora y que nos quiere crear problemas, me refiero a Bolivia y Venezuela. Hay que decir las cosas por su nombre, el interés de esos países es crearnos problemas.
-Ambos países tienen gobiernos de izquierda. ¿Será que, para ellos, Boric se movió más “a la derecha”?
-No. Se podría decir que se ha movido más hacia un gobierno socialdemócrata, no creo que a la derecha. Hay que analizar eso, porque en materia de seguridad son cambios que hace estando ya en el gobierno y después de errores no forzados múltiples, pero en otros aspectos ya venían señales de una postura más socialdemócrata, el nombramiento de Mario Marcel fue la primera señal en ese sentido.
“Cuando Boric y el Frente Amplio estuvieron lejos del poder fueron muy irresponsables”
Además de ser ministro de Interior, Jorge Burgos tuvo un paso por la cartera de Defensa. Desde esa experiencia, se opone rotundamente a aplicar Estado de Excepción en regiones como Valparaíso o la Metropolitana.
“Nosotros no podemos descuidar las tareas naturales de las Fuerzas Armadas. Es cierto que el mundo ha cambiado, pero nosotros tenemos amenazas históricas que hacen necesario que tengamos capacidad de disuasión importante en ciertos sectores, principalmente en el norte. El otro factor es que un despliegue de FF.AA. no necesariamente va a producir un efecto positivo, porque la presencia puede ser positiva, pero eso dura un tiempo corto”, fundamenta el exmilitante DC.
-Carabineros también tiene poca dotación. ¿Cree que el discurso crítico de Carabineros que tenía el Presidente Boric contribuyó a desincentivar que más personas quieran ser carabineros?
-El discurso de la izquierda novedosa de mucha crítica permanente a Carabineros a priori debe haber ayudado al desincentivo. El tema no sólo pasa por la cantidad de funcionarios, sino por la formación que tengan, porque durante mucho tiempo tuvimos incorporaciones masivas, pero poco preparados y eso también se ha notado.
-¿Cuál es su reflexión, más allá de si el cambio está bien o mal, del antiguo y el nuevo Gabriel Boric?
-Cuando Boric y el Frente Amplio estuvieron lejos del poder fueron muy irresponsables y el poder les llegó antes de lo que creían. Por lo tanto, tuvieron que pasar demasiado rápido de la irresponsabilidad a la responsabilidad de gobernar. Eso no es fácil. Quienes tenemos más experiencia tenemos que ser capaces de reconocer los cambios, de estar juzgando u opinando, pero no partir de la base de que el cambio es poco creíble, eso no es bueno.