Francia retira modelo de iPhone del mercado por altos niveles de radiación: medida se extendería a otros países

Francia ordenó retirar temporalmente el iPhone 12 del mercado luego de que la Agencia Nacional de Frecuencias (ANFR) determinara que el dispositivo de Apple sobrepasa los límites establecidos de emisión de ondas de radiofrecuencia.

Luego de analizar 142 aparatos, el organismo estableció que presentaban un índice de absorción específica de energía (SAR) de 5,74 W/kg, cuando el máximo considerado “seguro” para el cuerpo humano es de 4 W/kg.

La investigación consistió en dos etapas: primero se consideró el contacto con el teléfono a una distancia de 0 mm, como cuando está a la mano o en el bolsillo del usuario; y posteriormente a 5 mm, cuando está guardado en un bolso o mochila. Tras la prueba, la ANFR alertó que el iPhone 12 supera los límites establecidos para la seguridad de las personas en al menos una de las dos pruebas.

iPhone 12 podría ser retirado en otros países

La portavoz de la Comisión Europea, Sonya Gospodinova, adelantó que esta medida se podría extender por el viejo continente tras indicar a Efe que “por el momento, los estados miembros están examinando las restricciones y decidirán si presentan objeciones o no. Y en función de que haya o no objeciones, habrá consecuencias en el mercado interno”.

De hecho, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) de España pidió a las autoridades que revisen y confirmen las emisiones del iPhone 12 en el país ibérico para adoptar la misma decisión que Francia. Además, solicitaron a Apple solucionar este problema de forma rápida y gratuita.

El caso francés generó tanta repercusión que incluso, Bélgica, Alemania e Italia han anunciado que examinarán los posibles riesgos asociados a este dispositivo, aunque por el momento no han tomado una medida al respecto.

A pesar de que el iPhone 12 supera los niveles de SAR establecidos por distintas entidades del mundo, expertos hacen un llamado a la calma, ya que estiman que la cifra debería superar los dos dígitos para poder causar directamente una enfermedad, según indica La Vanguardia.