Una inversión de 100 millones de dólares que no fue: el enredo de Grau con Sinovac en la ejecución de un centro de vacunas en Chile

La noticia era celebrada con vitores: Sinovac, empresa china pionera en la generación de vacunas en contra de la pandemia del covid-19, anunciaba la inversión de alrededor de $US 100 millones en Chile en 2021 para asentarse en Antofagasta y Quilicura.

En la región del norte el interés estaba en elaborar un centro de innovación y desarrollo, mientras que para la comuna capitalina ser un núcleo de distribución de vacunas en Latinoamérica. Sin embargo, dos años después, la compañía informó que el establecimiento a construir en el norte se trasladará a Bogotá, Colombia, así como también la paralización de actividades en su proyecto en Quilicura.

Rápidamente las autoridades de Gobierno debieron salir a dar explicaciones. Tal fue el caso de la ministra de Ciencia, Aisén Etcheverry, quien sostuvo que “lo que gatilló la decisión no fue un tema de permisos, fue un tema de tamaño de mercado“.

De hecho, ante la repercusión de la noticia –dada a conocer la semana pasada-, la compañía salió a explicitar sus motivos mediante un comunicado. En él, parte del escrito le daba la razón a Etcheverry, pues su interés en Quilicura se diluyó ante la rápida superación de la pandemia. No obstante, para el caso de Antofagasta, la situación era distinta.

La razón que brindaron desde Sinovac para desistir de la construcción del centro de desarrollo fue el terreno designado por el Gobierno para realizar sus actividades, el cual no estaba urbanizado -no contaba con acceso a agua potable ni electricidad-. La empresa aseguró haber informado del inconveniente a las autoridades en mayo del 2022 y que, pese a ello, no se brindaron más opciones por parte del Gobierno.

Las posturas de Grau

“En términos de salud pública, es razonable para nuestro país“, argumentó el día domingo el ministro de Economía, Nicolás Grau, sobre la decisión de Sinovac de desistir de sus programas en Chile. En esa oportunidad, el secretario de Estado apuntaba a que la misma empresa definió que el ingreso a Colombia es completamente independiente a sus intenciones con Chile, lo cual no cerraba por completo nuevas tratativas.

Días después, Grau dijo -a Radio Duna– que con la empresa, en sus reuniones posteriores a mayo, “nunca hablamos nada de Antofagasta, porque esa era una decisión que estaba tomada hace mucho tiempo”. De hecho, apeló que en aquellas citas sólo se conversaba sobre la planta de Quilicura, en la que Sinovac también tenía sus reparos en lo relativo a la seguridad de la comuna.

El secretario de Estado señaló que conversaron sobre “potenciales subsidios o el hecho de garantizar un nivel de consumo de esas vacunas por mucho tiempo“, que podrían alterar la estrategia del Gobierno en materia de salud pública, argumentó.

Sobre lo mismo, Sinovac respondió difiriendo de los dichos de Grau. De acuerdo a Ex-Ante, la empresa ha “explorado diferentes alternativas de colaboración público-privadas, siempre a la luz de modelos exitosos en otros países (…). los términos ‘subsidios y vacunas garantizadas‘ no fueron los correctos para describir el trabajo propuesto”.

Por otro lado, en lo relativo a la marcha atrás que dio Sinovac a la construcción del centro de investigación en Antofagasta, el ministro Grau, al ser consultado en el Congreso sobre si fue notificado sobre el percance, el líder de Economía sostuvo que “nunca Sinovac ha dicho que en que mayo del 2022 se nos entregó una información“.

Lo anterior a pesar de que el comunicado de la empresa sostenía sus puntos en ello.