Está prófugo de la justicia: la millonaria cifra que ha recibido pensionado por gracia del estallido social

En septiembre del 2023, los medios de comunicación ya informaban de que uno de los beneficiados de las pensiones por gracia —por motivo del estallido social— brindadas por el Gobierno contaba con un prófugo de la justicia. Se trató de Juan Francisco Villalobos Prado, quien tenía esa condición, por estafa, desde julio del 2019.

Pese a ese antecedente, Villalobos estuvo dentro de los 418 seleccionados —de 438 solicitudes— para recibir la garantía. De esa forma, de acuerdo a Ex-Ante, el pensionado ha recibido por parte del Estado la suma de $5.698.168. Ello aunque Villalobos continúa prófugo.

El tema de las pensiones por gracia comenzó en septiembre del 2022, cuando el Gobierno emitió el decreto exento relativo a la temática. Tal documento llevó la firma de los ministros del Interior y de Hacienda, Carolina Tohá y Mario Marcel, respectivamente.

No fue hasta febrero de este año cuando tal decreto culminó su tramitación. Así las cosas, el pago hacia Villalobos —que es vitalicio y mantendrá esa condición mientras “subsistan las condiciones que motivaron su otorgamiento”— comenzó en abril. El mismo corresponde a 2 ingresos mínimos no remuneracionales.

Si se hace una distribución mensual de lo que Villalobos ha recibido hasta ahora, se llega a la cifra de $633.129 por mes.

La denuncia por la que Villalobos fue pensionado

Villalobos estuvo apto para postular al beneficio de acuerdo a un hecho ocurrido en noviembre del 2019. Según se relató en una querella auspiciada por el Instituto Nacional de Derechos Humanos, se denuncia el delito de abuso sexual reiterado.

Los detalles, recopilados por el medio citado, cuentan que Villalobos, luego de participar en una marcha en La Florida, “es interceptado sin mediación alguna” por Carabineros. Según se cuenta, ninguno de las autoridades llevaba consigo una identificación visible. Golpearon con lumas y “golpes de pie” al afectado, y posteriormente la un móvil policial.

Posteriormente lo llevaron a constatar lesiones al Cesfam de Los Quillayes. Además, de acuerdo a la querella, el recinto hospitalario emitió un documento que se le entregó a Carabineros y no a Villalobos.

Concluidos los trámites en el Cesfam, se ingresaron los antecedentes del detenido en la 36° Comisaría de La Florida. A continuación, lo trasladaron a la subcomisaría de Los Quillayes. Es allí donde se materializaría la denuncia.

En el único calabozo del lugar, las fuerzas policiales le piden a Villalobos que se desnude, al tiempo que es esposado. Luego dos de los Carabineros le toman los brazos, donde un tercero “introdujo un dedo en su recto, hecho que se repitió 4 veces mientras se le preguntaba de forma amenazante: ‘tení (SIC) algo … tení (SIC) droga’”.

Además, el INDH relató que Villalobos recibió descargas eléctricas en sus dedos, con lo que el afectado reconoció como una linterna.