Secciones

The Clinic
Buscar
Entender es todo
cerrar
Cerrar publicidad
Cerrar publicidad
Flotar en una cámara
Foto: Gentileza.

Especiales

16 de Febrero de 2024

400 kilos de sales de Epsom y 600 litros de agua: así son las cámaras privadas de Float Chile

Francois Pouzet y Vicente Villela son los fundadores de Float Chile, un centro terapéutico que te permite relajarte a través de la experiencia de flotar.

Por
Compartir

Poder flotar sin ningún esfuerzo y a 35 grados de temperatura es lo que permite Float Chile. Una experiencia que se consigue sumergiéndose en una cámara privada de 600 litros de agua cargada con 400 kilos de sales de Epsom. Esto permite una variación en la densidad del agua.

Este componente se conoce como sulfato de magnesio y tiene variadas propiedades que pueden ayudar con la psoriasis, fibromialgia, entre varias otras cosas. Además, entre los beneficios de flotar destacan la reparación de ciclos de sueño, reducción de estrés y ansiedad, alivio de dolores físicos, además de un espacio ideal para la meditación y la introspección.

Pese a que es una experiencia que puede generar temor en algunas personas, en especial aquellas que sufren de claustrofobia, esta preocupación suele disiparse una vez dentro de la cámara. Y es que la perdida de noción del lugar en donde se está permite tener control de esta experiencia.

También existe la posibilidad de realizar esta actividad en una cámara abierta. En ella no es necesario estar encerrado para experimentar este tipo de sesiones.

“Al principio fue un poco desafiante para mí enfrentarme a un silencio profundo y una oscuridad absoluta”, dice Magdalena Tapia. “A medida que fui conectándome un poco más con mi respiración y la calma, fue una muy linda experiencia de conexión, de relajo, como de volver al origen, es difícil de describir con palabras la verdad”, dice sobre su experiencia en una de estas cámaras que suprime los estímulos externos.

Una experiencia en la que la mente y cuerpo pueden descansar, aprovechando la ausencia de luz y ruido. Además, de poder experimentar flotar al mismo nivel que en el Mar Muerto o en la Laguna Cejar del norte de Chile.

Revisa el video del primer capítulo de “Mi equilibrio espiritual” acá:

Comentarios

Notas relacionadas