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2 de Septiembre de 2024Destruyen milenarios geoglifos en Iquique: culpan a conductores de vehículos 4×4 por conducir sobre las figuras
“Los geoglifos de Alto Barranco, con más de 1000 años de historia, han sobrevivido gracias a las condiciones naturales del desierto de Atacama", asegura la Fundación encargada de proteger estos lugares.
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La Fundación Desierto de Atacama realizó una denuncia a través de sus redes sociales por la destrucción sufrida por los milenarios geoglifos de Alto Barranco, ubicados en la zona sur de Iquique, en la Región de Tarapacá.
Según la fundación, el área donde se encuentran estas figuras de valor histórico incalculable habría sido deteriorada por la acción de motoristas y conductores de vehículos 4×4. Estas personas utilizan este tipo de vehículos para realizar actividades fuera de los caminos establecidos, dejando las marcas que se observan en las fotos.
“Los geoglifos de Alto Barranco, con más de 1000 años de historia, han sobrevivido gracias a las condiciones naturales del desierto de Atacama. Sin embargo, su destrucción actual por motoqueros y jeeperos amenaza gravemente su existencia milenaria”, asegura la fundación a través de su Instagram,
Los más importante de América Latina
La Fundación Desierto de Atacama hace un llamado a cuidar estos lugares ubicados en Iquique: “Dónde dejas tu huella es tu decisión. No lo hagas sobre los geoglifos. No sobre la historia de esta tierra”. El periodo aproximado de la aparición de estas figuras es entre el año 1000 y 1540.
A pesar de la importancia del sitio arqueológico, este no cuenta con mayor protección que algunos carteles donde se pide a los visitantes no transitar en vehículo y mantener una distancia prudente para contemplar las figuras.
Los geoglifos son figuras dibujadas en laderas de cerros o en planicies, utilizando la técnica de adición de piedras de tonalidades oscuras de origen volcánico a manera de mosaico.
Entre los más conocidos están las Líneas de Nazca, que se encuentran en las pampas de Jumana, en el desierto de Nazca, entre las poblaciones de Nazca y Palpa, en Perú.
En América del Sur, también destacan los geoglifos amazónicos en Acre y Rondonia (Brasil) y los geoglifos de Chug-Chug en el desierto de Atacama (Chile), una zona que alberga una de las mayores concentraciones de geoglifos del mundo y algunos de los más antiguos.
