Negocios
24 de Septiembre de 2024Desde una cocina familiar en Colina a “endulzar” Santiago: el secreto detrás del éxito de la pastelería La Berlín, que anunció su cuarto local
Daniel Canala-Echevarría, uno de los socios fundadores, habla sobre los inicios del negocio, pasos que siguieron para triunfar con este y así "seguir creciendo".
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“Somos merengue, manjar, chocolate y caramelo”, y “artesanía dulce”. Esas son las frases que destacan en la descripción que aparece en el sitio web de La Berlín, pastelería nacional cuya historia comenzó el año 2017, en los hornos de una casa en Colina.
En conversación con The Clinic Daniel Canala-Echevarría (46), uno de los fundadores de La Berlín, profundizó sobre los inicios de la marca, además de los pasos que siguieron para triunfar con su negocio y las proyecciones a futuro.
El fin de semana que recién pasó la pastelería abrió su tercer local, en La Dehesa -antes tenían en Vitacura y San Carlos de Apoquindo-, y anunciaron un cuarto para 2025.
¿Cómo nació La Berlín?
Daniel, viñamarino y periodista de profesión, cuenta que en febrero de 2017 se quedó sin trabajo, y fue entonces que, junto con su socia y suegra, Claudia Franceschini, decidieron embarcarse en la aventura de emprender.
“El inicio de La Berlín es bien anecdótico, porque yo me quedé sin trabajo en febrero del año 2017. Yo había conocido a Claudia, que en ese minuto era mi suegra, un año antes, y había ido a varias comidas en su casa y siempre había probado tortas o postres que ella hacía que eran espectaculares. Venía desde hace un tiempo diciéndole por qué no emprendía, o por qué no ponía un café, o una pastelería y vendía su producto”, explica Canala-Echevarría.
Y agrega que “en la duda de si me empleaba nuevamente, o de si emprendía, le propuse a Claudia que ella hiciera las tortas y postres, y yo los vendía y distribuía. Ahí partimos con nada, trabajando en su casa en Colina, empezamos a hacer las tortas en el horno de la casa, y vendiendo muy poquito, y al poco andar nos dimos cuenta de que esta cuestión tenía harto tiraje”.
El paso siguiente fue incluir un nuevo integrante para agregar a capital a la naciente pastelería, y fue entonces cuando Canala-Echevarría decidió asociarse con su primo, Diego Acevedo, quien se interesó en participar. A ellos se les sumó Ana María Astaburuaga, quien cumplió un rol similar. “Con eso pudimos comprar el primer horno, la primera batidora. Y un año después ya estábamos con nuestra fábrica y nuestra primera tienda en Vitacura”, comenta.
“Yo no tenía ninguna experiencia en el rubro de la pastelería hasta ese minuto, y la experiencia de Claudia era más bien amateur, como una dueña de casa que le gustaba hacer tortas ricas. Luego se metió Diego, que tampoco sabía nada del rubro, y ahí de a poco empezamos a montar el asunto, y funcionó”, afirma el socio de La Berlín.
El secreto detrás del éxito
A la fecha, La Berlín cuenta con tres sucursales: una ubicada en Vitacura (2018), luego en San Carlos de Apoquindo (2023), y en La Dehesa (2024). Además, ya poseen el financiamiento aprobado para abrir una cuarta el próximo año.
Consultado por los secretos detrás de su éxito, Canala-Echevarría destaca que lo primero fue tener un “muy buen producto”. “Yo sentía que el producto era ganador a morir y se estaba perdiendo. Lo segundo es que siempre nos enfocamos, desde el minuto uno, en que los productos que hiciéramos siempre fuesen hechos con materia prima de primera calidad”, indica.
En tercer lugar, como las tortas no eran visibles dado que la cocina estaba en Colina, y la distribución era a domicilio, los fundadores optaron por tomar buenas fotos, especialmente en los comienzos. Lo otro que fue clave, a juicio de Canala-Echevarría, es que desde un inicio apostaron por la difusión y promoción a través de redes sociales, especialmente Facebook e Instagram.
Otro aspecto relevante, explica, fue abarcar a un público general, incluyendo diversas restricciones alimentarias.
En cuanto al futuro, el socio de La Berlín señala que cuentan con planes de expansión, pero más bien “controlados”. “Vamos con la tercera tienda en siete años, es decir, no hemos sido especialmente rápidos en la apertura, a diferencia de otras pastelerías, pero hemos crecido de manera más orgánica, más segura”, declara-
“Tenemos ya aprobado el financiamiento para una cuarta tienda a abrir el próximo año, y probablemente no sea solo una cuarta, sino también una quinta. Además de eso, hemos recibido varias propuestas de distintas personas en regiones para abrir locales, ya sea a través de un local propio de La Berlín o a través de franquicias. Sin duda alguna, queremos seguir creciendo y expandiéndonos”, cierra.