Pólemica por fuertes críticas del Contralor a reformas: Gobierno asegura que se extralimitó

“Se extralimitó, no opinó con prudencia”.

Con esas palabras reaccionó el Gobierno a las fuertes críticas a las reformas y las instituciones que esbozó el Contralor, Ramiro Mendoza, en el marco de un seminario, las cuales fueron reproducidas por La Segunda en un artículo publicado en la edición de este miércoles.

“Consideramos que estos juicios personales no corresponden a quien debe ser imparcial en su labor de control y fiscalización de los órganos del Estado”, dijo el Ejecutivo, a través del vocero Alvaro Elizalde.

Mendoza, consignó el vespertino, dijo que respecto del quehacer público “hay un montón de cosas inapropiadas o muy estúpidas en lo que está pasando en el último tiempo”.

El titular de la Segegob agregó que “lamentamos los dichos del contralor, porque opinó sobre temas que no dicen relación con su rol institucional, porque se extralimitó y no opinó con la prudencia del cargo que detenta”, añadió.

Siempre desde el Gobierno, el subsecretario del Interior, Mahmud Aleuy, precisó que el organismo que dirige Mendoza tiene la facultad de emitir opiniones, pero “a través de informes formales”.

“Me parecen desafortunadas las declaraciones del Contralor. No corresponden a su rol ni a la conducta histórica que ha tenido la Contraloría.”, dijo Aleuy, en línea con las palabras de Elizalde.

Además, el funcionario de gobierno señaló que las explicaciones de Mendoza, quien acusó descontextualización de lo que dijo en el marco de una actividad universitaria, no tienen justificación.

“No hay ninguna autoridad pública que pueda justificarse para decir que tiene un rol distinto cuando interviene en una actividad de una universidad o un seminario. En el único caso que uno podría aceptar esa situación es cuando es en el living de la casa”.

Esta tarde, Mendoza, dijo, a través de una declaración pública, que la nota de La Segunda lo sacó totalmente de contexto, pues la intención de sus dichos tenían que ver con otra cosa.

“En el día de hoy el diario La Segunda publica como noticia una versión descontextualizada de una charla que dicté ayer”, dice Mendoza, quien agrega que el motivo de ésta era llamar a la “reflexión de los alumnos en torno al Derecho Público, en particular el derecho administrativo como instrumento activo para el desarrollo de la sociedad, y el control de la corrupción en base de la mejora en la confianza de nuestra institucionalidad”.

El Contralor agregó que la charla estaba dirigida a los asistentes, académicos y alumnos, pues no se trataba de una actividad pública abierta. Precisó además que era un encuentro que tenía como finalidad el rescate en la confianza de las instituciones.

“La disección y seccionamiento no autorizado de mis palabras, con intereses ajenos a mi voluntad, distorsionan la visión propositiva que formulé y menoscaba el aporte y buenas noticias que nos traen los autores que cité en la presentación, que nos anuncian que nuestro mejor destino está en las reglas de buena gobernanza, que se han construido y conservado a lo largo de los años”. afirmó.

El artículo que generó la polémica

La Segunda consignó que Mendoza abordó la coyuntura nacional, disparando contra instituciones, reformas, y la abundancia de leyes.

Criticó, entre otras cosas, la ley de violencia en los estadios, el paso de Carabineros a dependencias del Ministerio del Interior y el Sistema de Alta Dirección Pública.

“Hay cosas muy inapropiadas o muy estúpidas en lo que está pasando en el último tiempo”, fue la frase más potente, citada en el texto.

También se refirió el artículo al término “evangelizador”, que según el Contralor, son todos aquellos que aparecen en el debate nacional, desconociendo el derecho público, para opinar de todo y hacer nuevas propuestas de cualquier cosa.

“No entedemos lo que está pasando y cada vez el evangelizador puede decirme algo nuevo”, entonces ‘Oye, una Nueva Constitución”, y estamos pensando todos una nueva Constitución. Después un evangelizador va a decir ‘Fijemos los precios’ y ya fijamos los precios”.

Además, dijo que se tiene la tendencia a legislar con modelos provenientes de afuera, que muchas veces no tienen nada que con la realidad nacional.

“En consecuencia hacemos una especie de gato mono constitucional. Mezclamos un gato con un mono y si le podemos poner orejas de burro, le ponemos”, recalcó.