Secciones

Más en The Clinic

The Clinic Newsletters
cerrar
Cerrar publicidad
Cerrar publicidad

Nacional

23 de Septiembre de 2016

Francisco Letelier, el hijo muralista del asesinado excanciller de Allende: “Mi papá era una gran artista. Dibujaba increíble”

"Era tremendamente carismático. Nosotros nos hemos repartido esos talentos", afirma Felipe, quien pintó el mural "Todas las manos", obra que forma parte en los homenajes a Orlando Letelier, asesinado por las garras de la dictadura el 21 de septiembre de 1976 en Washington.

Por

Homenaje a Orlando Letelier TW

Diecisiete años tenía Francisco Letelier, hoy artista, cuando mataron a su padre, el ex canciller Orlando Letelier, en un atentado con bomba que hizo explotar el auto en el que viajaba junto a la estadounidense Ronni Moffitt aquel 21 de septiembre de 1976 en Washington. De ese día y de otros aspectos de la vida de su padre, como su facilidad para el dibujo, habla con el diario La Segunda.

“Mi papá era un gran artista. Dibujaba increíble, cantaba, tocaba la guitarra. Era tremendamente carismático. Nosotros nos hemos repartido esos talentos”, afirma el hombre de 57 años, radicado en Estados Unidos al igual que otro de su hermanos, el actor y modelo Cristián.

Francisco rememora una anécdota con su padre que-según dice- lo hizo ser la persona que es hoy. Un artista.

“Yo soy el que está sobre sus hombros. El me levantó y me dijo: ‘¿quieres saber cómo es volar?’ Y aquí estoy ahora, volando gracias a las alas que él me dio”, recuerda al revisar una foto junto a su padre y sus hermanos en una playa de California.

Una de las obras de Francisco, el mural “Todas las manos”, forma parte en los actos conmemorativos por los 40 años de la muerte de su padre. Al respecto, recuerda un conversación que tuvo con él poco tiempo antes de que lo matase las garras de la Dictadura.

“Era verano acá, pleno agosto, y le saqué el auto para salir con una pololita. Era el mismo en que pusieron la bomba que lo mató. Y lo choqué, no fue culpa mía -dice, riéndose de su frase defensiva-. Mi papá fue muy buena onda, me explicó que necesitaba el auto para su trabajo y que le era imprescindible tenerlo en buen estado. Luego me quitó las llaves”.

Sobre el final de la conversación con el vespertino, habla del mural que forma parte de los actos para recordar a su padre. “Para el primer aniversario de la muerte de mi padre, la comunidad chilena en Washington pintó un mural. Ahora, después de 40 años, retomamos algo del espíritu del muralismo chileno que desarrolló durante la UP”.

 

Notas relacionadas