La épica arenga del sindicato de Escondida para ir a huelga: “¿Quién ve por nosotros?, que se vaya el país a la chucha”

En medio de la preocupación que hay en las autoridades gubernamentales por una posible huelga de Minera Escondida, el yacimiento de cobre más grande del mundo, se revelaron parte de las conversaciones que han tenido algunos participantes del conflicto.

Según un reportaje de La Tercera, la dirigencia del sindicato reveló una conversación que tuvo el líder del ente sindical, Patricio Tapia, con un representante del Ministerio del Trabajo.

La agrupación autodenominada los “Patos Negros” representa a cerca de 2.500 personas, siendo el ente sindical más grande de la minería privada.

En la última oferta de la empresa se pusieron en la mesa $18 millones para cada trabajadores, monto que fue rechazado por el 84 por ciento de los empleados, que piden $25 millones.

Patricio Tapia aseguró que “hoy he recibido llamados del asesor del ministro del Trabajo (nombra a Mario Livingstone, Coordinador de la división socio sindical de dicha cartera) y, compañeros, me dijo ¿cómo veíamos la cosa? Y yo le dije, súper bien para nosotros. ¿Me puede explicar? No le queríamos explicar al principio pero se lo expliqué. Le dije mire señor, nosotros tenemos esta propuesta que es lamentable para nosotros. Nosotros vamos a votar huelga y vamos a hacer efectiva la huelga”.

La Tercera continúa señalando que el intercambio continuó con Tapia señalando que la decisión tiene que ver con que “nunca han negociado con nosotros, siempre ha sido imposición”.

El dirigente le habría añadido al representante de gobierno que “nosotros nos vamos 30 días de huelga y descolgamos al día 30 todos los viejos y nosotros… Le conté toda la historia”, según el relato de Tapia a los trabajadores en una reunión sindical.

Según el medio de Copesa, la estrategia de los mineros apuntaría a un descuelgue masivo de operarios, y tras esto un grupo pequeño se acogería al artículo 342 del Código de Trabajo, con lo que podrían negociar en 18 meses más.

Tapia señala posteriormente “Y me dijo ‘no pueden hacer eso. Van a cagar al país’ (carcajadas de los asistentes a la asamblea). Lo único que atinó a decir fue van a cagar al país, y ¿quién ve por nosotros? Entonces, ¡que se vaya el país a la chucha!”, cerró centre aplausos de los asistentes.