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20 de Diciembre de 2021

Boric y Piñera cara a cara: Del forcejeo por las protestas estudiantiles a un encuentro por la transición en La Moneda

El Presidente y el mandatario electo tienen una historia marcada por desencuentros y opiniones cruzadas desde 2011. Este lunes 20 de diciembre se encontraron en La Moneda y comenzaron a preparar el cambio de mando de marzo. Una instancia que, según expertas, estará marcada por un cambio generacional y sobre cómo entender la política actual.

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En la noche del 19 de diciembre, tras su victoria, Gabriel Boric volvió a verse las caras con el Presidente Sebastián Piñera a través de una videollamada. En esta, acordaron reunirse este lunes 20 de diciembre en La Moneda. Piñera le recomendó sacarse una foto antes de comenzar el mandato y después, al finalizarlo, para reflejar lo difícil que es la misión. “Espero que lo hagamos mejor”, le dijo Gabriel Boric.

Para entender la relación entre ambos hay que volver el tiempo atrás, al Chile de 2011 y 2012, cuando el movimiento estudiantil se tomó las calles de Santiago y de Chile. En 2011, el protagonismo del movimiento estudiantil lo abarcaba Camila Vallejo, la entonces estudiante de Geografía y militante del Partido Comunista, quien presidía la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (Fech). A fin de año, en diciembre, Camila Vallejo perdía la reelección. Gabriel Boric tomaba la delantera y se posicionaba como el nuevo presidente de la Fech. 

Los dardos de parte del gobierno de Sebastián Piñera hacia el movimiento estudiantil comenzaron a aparecer antes. En agosto de 2011, después de una manifestación en Santiago, señalaba que estaba “absolutamente convencido que el camino para hacer de Chile un país más libre, justo, más próspero, más solidario, no es el camino de las piedras, de la violencia y de las bombas molotov, eso no conduce a ninguna parte”, añadiendo que ese camino llevó al país al quiebre de la democracia. 

Gabriel Boric, por su parte, días después de ser elegido presidente de la Fech, ya mostraba su postura frente al gobierno de Piñera. “El gobierno fue adversario de la ciudadanía chilena que se movilizó este 2011, el gobierno reprimió permanentemente a los estudiantes en las marchas, e intentó dividir al movimiento. Hoy somos adversarios del gobierno, y está bien que así sea”, sostuvo en el programa Tolerancia Cero de Chilevisión. 

La historia entre ambos está llena de momentos así, con opiniones cruzadas, donde Gabriel Boric se mostraba mucho más explícito y punzante con las críticas hacia el gobierno, explica la politóloga Javiera Arce, parte de la Red de Politólogas #Nosinmujeres: “Boric siempre ha tenido una relación súper problemática con Piñera. Piñera tiene concepciones ideológicas profundas y muy distintas al Frente Amplio y al resto de la oposición respecto de la educación, como por ejemplo cuando dijo que era un bien de consumo. Eso va a marcar la trayectoria de Boric, que será siempre enfrentada al gobierno de Piñera”.

“A las propuestas del movimiento el gobierno sólo ha respondido con represión”, escribía en agosto de 2012 Gabriel Boric en su cuenta de Twitter. Gran parte de las críticas se producían allí, a través de redes sociales, frente a un Sebastián Piñera, que optaba por hablar sobre el movimiento solo de vez en cuando. 

La violencia, los desmanes y la represión eran un tema central en las discusiones entre ambos. “No es un gobierno indiferente ni sordo a los planteamientos y aspiraciones de los estudiantes y de sus familias. (…) La causa de una educación de calidad para todos y cada uno de los niños y jóvenes de nuestro país es una causa noble y hermosa, que es compartida por el gobierno”, decía Piñera en 2012. 

En México, un mes antes, el mandatario que el movimiento estudiantil estaba influenciado por “ideas equivocadas, ya que sus principales dirigentes pertenecen al Partido Comunista”. 

“A esta altura, no sé si creerle al Presidente que alaba al movimiento estudiantil en la ONU o al de México, que dice que somos todos comunistas”, replicó entonces Boric. 

“Gabriel Boric fue una persona que se movilizó de manera crítica respecto al gobierno de Sebastián Piñera, y en ese sentido es bien especial, bien decidor que en diez años haya pasado de ser presidente de la Fech a ser presidente de la república, y que sea Sebastián Piñera, contra quien se movilizó, el que le entregue la banda presidencial”, dice Mariana Ardiles, magíster en Ciencia Política de la Universidad de Chile. 

En enero de 2013, la pugna fue más allá de las redes sociales y los puntos de prensa. En una gira de Sebastián Piñera por el sur, mientras ingresaba al Teatro Municipal de Punta Arenas, se topó con Gabriel Boric, quien le reclamó: “ustedes están atornillando al revés con la educación. Han seguido incentivando el negocio de la educación. Eso no se puede seguir permitiendo, así que sepa señor Presidente que vamos a seguir movilizándonos por una educación pública, gratuita y de calidad”.

“Me parece muy bien, todos los chilenos tenemos derecho a expresarnos y movilizarnos. Somos un país libre y democrático, pero siempre hay que hacerlo de forma pacífica y respetuosa”, le respondió Piñera.

Con el salto de Gabriel Boric al Congreso en 2014, su voz comenzó a ser mucho más recurrente en el escenario político nacional, convirtiéndose en un representante clave de la centro izquierda. Piñera, en ese entonces, estaba más bien fuera del plano político, volviendo de lleno con su candidatura en 2017. Tras apoyar Gabriel Boric a Beatriz Sánchez en primera vuelta, quien quedó en tercer lugar, el próximo presidente se definiría entre Alejandro Guillier o Sebastián Piñera. Bajo ese contexto, Boric afirmó que su voto, más que ser por Guillier, era “en contra de Piñera”. 

Tras ganar la presidencia el candidato de Chile Vamos, Boric pasó a ser un ente clave dentro de la oposición, encontrando su punto cúlmine en el estallido social de 2019. “Ante las gravísimas violaciones a los derechos humanos que estamos viviendo en Chile, Chadwick debe renunciar ya. Ante profundidad del malestar que se ha expresado estos días, cada minuto que pasa los anuncios del Presidente Piñera se vuelven más pequeños e insuficientes”, escribió Boric en su cuenta de Twitter en octubre de ese año.

En periodo de campaña, durante los debates presidenciales, el presidente electo también dejó espacios para dirigir sus críticas a Piñera por las violaciones de Derechos Humanos cometidas en Chile en el marco del estallido social.

“Es insólito que a cuatro ex ministros de Estado de un Gobierno que ha violado los Derechos Humanos en democracia de manera brutal no se les haya hecho ninguna pregunta ayer respecto a eso. Pero sepan, que a quienes sean responsables, los vamos a perseguir nacional e internacionalmente con todas las vías de la ley, así que señor Piñera, está avisado“, sostuvo Gabriel Boric en un debate televisivo durante junio de 2021.

Este lunes 20 de diciembre, después de mucho tiempo, se volvieron a encontrar cara a cara en La Moneda. Y el próximo 11 de marzo, el cambio de mando representará algo más que una simple transición presidencial, dice Mariana Ardiles: “Hay un cambio generacional pero también un cambio sobre cómo entender la política, sobre qué temas tiene que proyectar la política institucional, y un cambio en las personas finalmente, que habla mucho también de cuánto se desgastó la Concertación pese a todos los importantes logros que tuvo en su gobierno”. 

“Yo creo que Gabriel Boric representa también esta generación de jóvenes que muchos fueron dirigentes estudiantiles de la Universidad de Chile y de otras universidades, y que logró unir a nuevos sectores de la población en torno a la política que está desprestigiada, que le representa rechazo a mucha gente”, concluye la experta.

También puedes leer: De líder estudiantil a solitario firmante del 15N: el meteórico -y a ratos improbable- camino de Boric hasta La Moneda


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