“La fama fue jodida”: exmiembro de Los Wachiturros sueña con ser pastor evangélico tras “tocar fondo”

Una curiosa vida ha tenido Lucas Daniel Caballero, uno de los integrantes del grupo argentino Los Wachiturros que hoy, confiesa, busca convertirse en pastor evangélico.

El miembro del colectivo que brilló con el tema villero de “Tírate un paso” hoy está lejos de la música, pero no de los micrófonos. A viva voz se ha transformado en un consejo para jóvenes quienes hoy se decantan de la religión. Lucas pone su historia a disposición de otros y, asegura, busca seguir formándose en la fe.

El hoy retirado de la música habló de todo con Clarín, donde explicó las razones de su salto a su faceta de creyente. De esta forma, reveló que todo se dio en 2013, tras una gira que se realizaría en Europa. Fue entonces que, cuenta, comenzó a agradecerle a Dios por el camino que lo llevaba al viejo continente. Entonces, asegura, logró hallar la voz que lo guiaría.

“El mensaje fue claro e intenso. Dios me dijo: ‘O me servís a mí o servís a tu grupo’. Ni más ni menos, sólo eso me dijo. Y bastaron esas palabras para sentir el pecado en mi vida, que todo lo que hacía estaba mal, que no era el camino correcto el que estaba tomando. Que Dios me creó con otro propósito”, fueron parte de sus aclaraciones.

Tras estos hechos se comenzó a desligar de Los Wachiturros. En la actualidad, describe al medio trasandino, vive en Belgrano junto a su hija y su pareja. Adicionalmente trabaja como repartidor de bidones de agua a domicilio.

Tocar fondo

Su sueño, sin embargo, ya no está en los escenarios villeros, sino en las iglesias. De esta forma, participa constantemente de la Iglesia Cristiana evangélica llamada “Ministerio Jesús Está Aquí“. Allí, describe a Clarín, lidera un grupo de jóvenes.

“La verdad estaba al borde de tocar fondo. No le encontraba sentido a la plata, a la vida. La fama fue jodida. Era un momento no podíamos salir a ningún lado, literal. Por ejemplo, yo me iba casi un mes a laburar, al volver quería invitar a mi familia a comer y no podía de la gente que me pedía fotos”, comentó.