Política
16 de Junio de 2022Fundador de Convergencia Social y sin vínculos en el mundo Mapuche: Víctor Ramos, el emisario de La Moneda en la Macrozona Sur
En el contexto del reforzamiento de equipos de la ministra Siches, Víctor Ramos llegó a Interior para encargarse de la mayor apuesta del gobierno para el conflicto mapuche: el Plan del Buen Vivir. Con una acotada agenda de contactos en la Araucanía, una metodología de “abajo hacia arriba” e infructuosas gestiones para retener a Salvador Millaleo en el ministerio -otrora coordinador de Asuntos Indígenas-, su llegada responde a un cambio de enfoque en la crisis que se vive en la zona: “las salidas que ahora estamos buscando son políticas”, afirman fuentes de gobierno.
El pasado viernes 10 de Junio la ministra del Interior, Izkia Siches, protagonizó un encuentro crucial relacionado a la crisis en la Macrozona Sur.
Tres werkén (voceros) representantes de ocho lonkos de las zonas de mayor conflictividad de la provincia de Arauco, llegaron hasta La Moneda para entregar una invitación al diálogo al presidente Gabriel Boric, a las titulares de Defensa, Maya Fernández, y de Desarrollo Social, Jeanette Vega, además de la propia Siches.
“Somos el Consejo de Lonko del territorio de Arauco, catalogado hoy como el centro neurálgico del ‘conflicto mapuche’. Representamos a diversos territorios y comunidades mapuche, que están en procesos de reconstrucción cultural y recuperación territorial”, dice un extracto de una carta que dejaron en la sede de gobierno, donde el formato de diálogo sugerido al Ejecutivo tenía incluso remniscencias históricas.
“El objetivo de reunirnos solemnemente en un diálogo de la más alta resolutividad y compromiso: Un nuevo Parlamento”, agregaba la misiva, según informó La Tercera.
Tras la cita, la jefa de gabinete reaccionó con indisimulado optimismo: “El gobierno lee este mensaje que nos entregan los werken con la mayor disposición al diálogo. Creemos que este camino puede contribuir a uno de los avances más significativos en décadas sobre el conflicto en el sur”, dijo en la ocasión la ministra Siches, en un contexto de polarización y violencia en la zona, como la Coordinadora Arauco-Malleco, colectivo que ha validado el uso de las armas como método para resolver el conflicto histórico entre el Estado de Chile y las demandas territoriales de las comunidades mapuches.
En ese encuentro, sin embargo, lejos de los focos que apuntaban a Siches, un nombre surgió desde la trastienda de aquel encuentro: Víctor Ramos, actualmente el encargado del Plan Buen Vivir, acaso la principal propuesta con que el gobierno busca dar solución a la conflictividad de la Macrozona Sur, en paralelo al Estado de Excepción Constitucional que rige en el sector.
Fundador de Convergencia Social y la firma del Acuerdo de 15N
Víctor Ramos (41) es psicólogo de profesión, especializado en su rama comunitaria donde “se trabaja de abajo para arriba”. Este criterio, cuentan en Interior, estaría intentando aplicar para el programa del Buen Vivir, a objeto de establecer redes de confianza con las autoridades Mapuche y actores locales de la Macrozona Sur.
Oriundo de Quilpué, Ramos integró desde sus inicios el Movimiento Autonomista -anterior domicilio político, entre otros, del ex Presidente Boric-, donde en el marco de las elecciones parlamentarias del 2017 conoció al diputado Diego Ibáñez y a la actual alcaldesa de la comuna, Valeria Melipillán.
En la comuna adquirió conocimiento por su capacidad de gestión, y así, entre el 2018 y el 2021 ejerció como jefe de gabinete de Ibáñez, antes de llegar el 2021 a la secretaría general de la Corporación Municipal de Quilpué tras el triunfo de Melipillán en las últimas elecciones.
En su vida militante, Ramos formó parte de las tratativas que dieron vida a lo que posteriormente fue Convergencia Social. No obstante, sus cercanos aseguran que no figura en la lista de fundadores porque el nacimiento de su tercera hija le impidió acudir a la notaría el día que el partido se inscribió oficialmente.
Con todo, Ramos formó parte del primer Comité Central de Convergencia Social, desde donde debió lidiar con las divisiones internas que generó la firma del Presidente Boric —entonces diputado- en el Acuerdo por la Paz y una Nueva Constitución del 15 de Noviembre del 2019.
En ese entonces, la estampa de Boric en el acuerdo tensionó de tal manera al partido que provocó que al Mandatario le abrieran una causa disciplinaria en el Tribunal Supremo de la colectividad, suspendiendo de paso su militancia. A lo anterior, se sumó el éxodo de más de setenta militantes liderados por el alcalde de Valparaíso, Jorge Sharp. Pese a ello, en el entorno de Ramos afirman que él fue parte del grupo de respaldó la decisión del Presidente de estampar su rúbrico en el acuerdo a título personal: “Gabriel Boric, diputado”.
“Salidas políticas” y el desconocimiento de los PP.OO en la Convención
Para entonces, Ramos ya se había granjeado cierta fama de hábil gesto político, cuentan fuentes consultadas para este artículo. Por lo mismo, su nombre fue propuesto a La Moneda por el diputado Diego Ibáñez, en el contexto del reforzamiento de equipos al que se sometió el círculo de la ministra Siches a mediados de Abril, luego de una serie de desaguisados en su cartera. El más dramático: el fallido viaje de la ministra a Temucuicui en el segundo día hábil del entonces recién asumido gobierno, periplo donde su delegación -compuesta por otros miembros del gabinete y profesionales de la prensa- fue recibida a balazos
Así, Ramos, quien a la fecha oficiaba como Jefe de División de Promoción y Protección Social en la subsecretaria de Servicios Sociales, arribó a Interior el 10 de Abril con una misión clara: “estructurar, materializar y territorializar el Programa del Buen Vivir”, según afirman las fuentes de Palacio.
La petición asumía un problema, hasta entonces, aparentemente inabordable desde el punto de vista intercultural, por lo que la llegada de Ramos responde a un cambio de enfoque en la búsqueda de soluciones al conflicto.
“Las salidas que ahora estamos buscando son políticas”, afirman desde Interior sobre el programa que busca reactivar la creación del ministerio de Asuntos Indígenas, aumentar el presupuesto de la Conadi para la restitución de tierras indígenas, y establecer “parlamentos territoriales” con actores políticos y autoridades territoriales mapuche.
Actualmente, en Interior se encuentran a la espera de la propuesta de la ONU —órgano intermediario en la instauración de los parlamentos—, tras la primera reunión que sostuvo su delegación con la ministra Siches este 26 de Mayo.
Con todo, Ramos contaba con una experiencia laboral previa relacionada a temas de pobreza y aislamiento geográfico en la Fundación para la Pobreza (2013-2018), participando en la elaboración de programas pilotos de vivienda en localidades como Curacautín, Puerto Saavedra y San Juan de la Costa. Allí tuvo sus primeros acercamientos a comunidades mapuche y huilliche.
No obstante, a su llegada a Interior, Ramos carecía de vínculos en las comunidades ubicadas en las principales zonas de conflicto de La Araucanía y del Biobío.
En esa línea, los representantes del Pueblo Mapuche al interior de la Convención Constitucional dicen no tener referencias de Ramos ni de sus nexos con las comunidades de la Macrozona Sur. “No lo conozco. Sólo una vez, me topé circunstancialmente con él”, afirma el constituyente y ex alcalde de Tirúa, Adolfo Millabur, mientras que la abogada y constituyente Natividad Llanquileo dice con economía de palabras: “¿Y quién será? No, no lo ubico”, dijo.
Modus operandi: contactos indirectos con autoridades locales
Con todo, fuentes de Interior defienden las capacidades políticas de Ramos, las que suplirían su modesta agenda de contactos entre las comunidades mapuches.
Así, describen que el modus operandi de Ramos se centra en el uso de los actores políticos públicos relacionados al conflicto Mapuche para llegar a las comunidades de forma indirecta.
En esa línea, las fuentes ejemplifican: si se quiere llegar a una comunidad, primero llaman al alcalde de la comuna en que reside dicho grupo para pedirle referencias sobre los principales liderazgos, antes de tratar directamente con las autoridades territoriales.
De esa forma, las fuentes afirman que el trabajo de Ramos “es menos de contactos. Si uno quisiera dialogar con cualquier persona de las comunidades mapuches, tanto política como territorial, podría hacerse fácilmente, es como llegar a cualquier parte”, comentan con naturalidad en La Moneda, antes de aseverar que existen actores de confianza que han ejercido de intermediarios en algunas gestiones en la Macrozona Sur.
Así las cosas, entre los actores públicos a los cuales Ramos ha acudido para obtener referencias, las fuentes mencionan al escritor y periodista Pedro Cayuqueo.
Las fuentes afirman que el trabajo de Ramos “es menos de contactos. Si uno quisiera dialogar con cualquier persona de las comunidades mapuches, tanto política como territorial, podría hacerse fácilmente, es como llegar a cualquier parte”.
Con todo, en el entorno de Ramos reconocen que el profesional se encuentra en un proceso de asimilar los códigos de entendimiento con la Araucanía. “Hay un desconocimiento profundo de los que somos de la zona central y de los que no pertenecemos al mundo mapuche. No conocemos sus protocolos, la profundidad de su cosmovisión. Una de las cosas que la ministra encomendó es tener esa sensibilidad”, afirman en La Moneda.
En ese sentido, desde Interior comentan que la reunión de Siches con los werkén de la semana pasada fue una iniciativa de los Lonkos y que Ramos gestionó la reunión mediante un intermediario, a través del cual constataron que los objetivos de las autoridades ancestrales tienen algunas similitudes con los lineamientos del Plan Buen Vivir.
Salida de Millaleo y coordinación con su equipo
Las fuentes aseguran que Ramos logró forjar una relación de confianza y respeto mutuo con el abogado y ex jefe de la dirección de Asuntos Indígenas del ministerio del Interior, Salvador Millaleo, quien renunció al cargo el pasado 29 de Abril.
La salida de Millaleo, según trascendió en su minuto, ocurrió en un contexto de agudas tensiones con la ministra Siches, las cuales se habrían iniciado precisamente tras la fallida visita de la ministra a Temucuicui.
Así las cosas, las fuentes de gobierno señalan que Ramos habría intentado que Millaleo no dejara su cargo, pero que al momento de su llegada a Interior, el abogado ya tenía la decisión tomada. Pese a ello, el equipo de Millaleo, compuesto por los asesores Francisco Reyes y Gabriela España, sigue en el ministerio, ante quienes Ramos continúa dándoles “soporte” en la dirección de Asuntos Indígenas.
En cuanto al cargo que dejó Millaleo, desde la cartera afirman que aún no hay claridad respecto a si se buscará un reemplazo para el jurista y académico.
